Cientos de repartidores se manifiestan en Londres tras una oleada de ataques con ácido
Unos doscientos repartidores de comida preparada para llevar se han manifestado este martes en el centro de Londres con sus motocicletas para pedir más protección, después de una oleada de ataques con sustancias corrosivas. Los motoristas se han concentrado alrededor de la plaza del Parlamento en protesta por los ataques de los que han sido víctima en los últimos días, incluidos seis perpetrados el pasado jueves por dos adolescentes en varios puntos de Londres en un periodo de 90 minutos, informa Efe.
Unos doscientos repartidores de comida preparada para llevar se han manifestado este martes en el centro de Londres con sus motocicletas para pedir más protección, después de una oleada de ataques con sustancias corrosivas. Los motoristas se han concentrado alrededor de la plaza del Parlamento en protesta por los ataques de los que han sido víctima en los últimos días, incluidos seis perpetrados el pasado jueves por dos adolescentes en varios puntos de Londres en un periodo de 90 minutos, informa Efe.
«Ha llegado un punto en que no nos sentimos seguros», ha declarado a la agencia británica PA Worneh, un repartidor de la compañía UberEats. «Cada vez que una moto se para detrás nuestro, tememos que alguien nos arroje ácido o nos ataque con un cuchillo», ha afirmado.
Johnny Miller, conductor de la compañía rival Deliveroo, que igualmente reparte comida para llevar de diversos establecimientos de la capital, ha asegurado que él y sus compañeros no se atreven a entrar en ciertas zonas de la ciudad «después de las siete de la tarde». En nombre de los manifestantes, el presidente de la Campaña británica de la comida para llevar, que promueve esos negocios, Ibrahim Dogus, ha pedido a la Policía que patrulle más las calles y al Gobierno que endurezca la ley contra los ataques con sustancias corrosivas.
Los expertos consideran que los ataques con ácido han proliferado, especialmente en Londres, porque son sustancias accesibles en tiendas o incluso en el hogar y hasta ahora su uso tenía menos consecuencias que el de otras armas, como los cuchillos.
Según datos oficiales, en los seis meses hasta el pasado abril ha habido en Inglaterra y Gales unos 400 ataques con ácido, por móviles que incluyen robos, ataques racistas, agresiones sexuales o crímenes de «honor». El aumento de los ataques con ácido u otras sustancias corrosivas ha motivado una revisión de la legislación vigente por parte del Gobierno.