Trump da carpetazo al caso Khashoggi y blinda su alianza con Arabia Saudí
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dado por cerrada la respuesta de su Gobierno al asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi, al argumentar que la relación económica y estratégica con Arabia Saudí es más importante que la cuestión de si la cúpula del reino estuvo detrás del crimen.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dado por cerrada la respuesta de su Gobierno al asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi, al argumentar que la relación económica y estratégica con Arabia Saudí es más importante que la cuestión de si la cúpula del reino estuvo detrás del crimen. Precisamente, Trump ha asegurado que el informe de la CIA no ha llegado a ninguna conclusión definitiva. «La CIA miró el asunto. No tienen nada definitivo», dijo el mandatario a periodistas en la Casa Blanca.
«Quizás nunca sepamos todos los hechos relacionados con el asesinato del señor Jamal Khashoggi. En cualquier caso, nuestra relación es con el Reino de Arabia Saudí, del cual Estados Unidos tiene intención de seguir siendo un socio firme», ha asegurado Trump. El presidente estadounidense prioriza de esta manera su relación con el reino saudí a pesar de que el príncipe heredero Mohamed bin Salmán, pueda estar vinculado con el brutal asesinato de Khashoggi. «Bien podría ser que el príncipe heredero tuviese conocimiento de este trágico evento, ¡quizás lo tenía y quizás no!», se puede leer en un comunicado.
Trump ha dicho que tanto el príncipe como el rey «niegan vigorosamente cualquier conocimiento de la planificación o ejecución del asesinato del señor Khashoggi» y ha enumerado las razones de la alianza estratégica entre Washington y Riad. Arabia Saudí proporciona ayuda crucial en la lucha contra el enemigo común Irán y el combate contra el «terrorismo islámico radical», y comprometió 450.000 millones de dólares en contratos de armas estadounidenses y otras inversiones. Además, Riad, primer exportador mundial de petróleo, ha ayudado a mantener bajos los precios del crudo, ha señalado Trump.
«Estados Unidos tiene la intención de seguir siendo un socio firme de Arabia Saudí para garantizar los intereses de nuestro país, Israel y todos los demás socios de la región», ha remarcado.
Trump sí que ha reconocido la presión del Congreso para que Estados Unidos sancione a Mohamed bin Salmán y tome otras medidas contra autoridades sauditas. «Consideraré las ideas que se me presenten, pero solo si son acordes con la seguridad absoluta de Estados Unidos», ha sentenciado el mandatario estadounidense.
Por su parte, el ministro turco de Relaciones Exteriores, Mevlut Cavusoglu, ha afirmado sin embargo durante una visita a Washington que los responsables de ordenar la muerte del periodista deben «rendir cuentas». «Es nuestro objetivo», ha señalado, aunque aún hay «preguntas sin respuesta», según ha dicho, horas después de la declaración de Trump.
El asesinato de Khashoggi, quien desapareció tras ir al consulado saudita en Estambul el 2 de octubre, dañó la imagen del reino y de MBS, como todos conocen al poderoso príncipe heredero, considerado como un agente de modernización de ese estado islámico conservador.