Un chico de 23 años muere en su casa después de que el 112 “no escuchara que se ahogaba”
Su familia denuncia que el médico que atendió la primera llamada no valoró la gravedad y retrasó la asistencia
La Consejería madrileña de Sanidad ha abierto una investigación para revisar el caso de un joven de 23 años de la Navalcarnero que falleció cuatro días después de que su familia llamara al Summa 112 en enero de 2018 alertando de que se ahogaba, y un médico respondiera que él veía que respiraba «perfectamente».
Según han denunciado los padres del joven, representados por el abogado de El Defensor del Paciente, el Summa 112 cometió una «negligencia», ya que el chico, que sufría un tromboembolismo pulmonar, se estaba ahogando pero el médico que atendió la primera llamada no valoró la gravedad y retrasó la asistencia.
En los pasillos de la Asamblea, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha explicado que la investigación se ha iniciado hace escasas fechas cuando el abogado de la familia del joven ha presentado una reclamación patrimonial a la Comunidad de Madrid, por vía administrativa, por la muerte del chico.
Ruiz Escudero ha lamentado «profundamente» este caso «triste y dramático» en el que una familia llamó al Summa 112 y, cuatro días más tarde, acabó con el fallecimiento de este joven de 23 años.
El consejero ha precisado que el abogado de la familia hizo una reclamación patrimonial por vía administrativa a la Comunidad de Madrid para valorar cómo había sido la actuación del médico del Summa 112 en este caso.
La Comunidad de Madrid, a través de la Consejería de Sanidad, ha activado la vía administrativa para determinar cómo fue la actuación del profesional del Summa 112 en este caso activando los protocolos previstos en este tipo de actuaciones, ha detallado Ruiz Escudero.
Ha indicado que «lo que hay que hacer es escuchar la transcripción (de la llamada telefónica al Summa 112) y ahí que se valore realmente si se ha procedido» conforme a los protocolos que tiene el Summa 112 para estos casos.
No obstante, Ruiz Escudero ha subrayado que «se activaron los recursos cuando se tuvieron que activar», primero, una ambulancia; luego, una UCI; posteriormente, hubo un traslado al Hospital Rey Juan Carlos y, cuatro días después, se produjo el fallecimiento.
El consejero ha indicado que el profesional que atendió a esa persona en el Summa 112 ha trabajado desde 2018 hasta ahora «con normalidad».
Según la primera valoración de la inspección médica, se actuó conforme a los protocolos, en la activación de los recursos, pero se están valorando la conversación que mantuvo el médico con el paciente, ha agregado.
«Su hijo no tiene nada»
El audio de la conversación muestra cómo, nada más descolgar el teléfono y contactar con el SUMMA porque su hijo estaba “cambiando de color”, la madre de Aitor escuchó:
–“Señora, páseme a su hijo al teléfono, pásemelo”.
–“¡Pero es que se está ahogando! ¿No le digo que se está ahogando?”
–“Pásemelo. ¿Si estuviera en un hospital le tendría que atender un médico o no?”.
En ese momento, la madre acercó el auricular al joven, quien a duras penas pudo balbucear un helador “Me ahogoooo… No puedoooo…”.
–“Yo no te escucho que te ahogues. ¿Has estado nervioso o algo?”
–“ Nooo…”
– “A ver, pásame a tu mamá”.
Acto seguido, tras detallarle la situación vivida en el domicilio, incluida la pérdida de consciencia del hijo, el doctor al otro lado del teléfono concluyó:
– “Señora, su hijo no tiene nada. Respira perfectamente”.
El resto ya figura en la autopsia. El chico se quedó sin aire, “poniéndose azul” y entrando en parada cardiorrespiratoria para entrar en muerte cerebral, primero, y finalmente morir a los pocos días.
"Yo no escucho que te ahogues". Estas son las duras palabras que tuvo que escuchar Aitor tras llamar al Summa 112. El joven de 24 años murió ahogado en Navalcarnero. El médico se negó a enviar una UVI móvil a su casa. Ahora salen los audios. Son de vergüenza. Terribles. pic.twitter.com/VJI1mt1x1C
— Antonio M. Beaumont (@Amartinbeaumont) November 7, 2019
Ayuso dice que el 112 aplicó los protocolos en la atención al joven fallecido
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha dicho este jueves que «en su momento se aplicaron los protocolos» en este caso, aunque ha admitido que «faltó humanidad» por parte del profesional al atender la llamada de su familia pidiendo auxilio.
La presidenta regional ha indicado que desde la Comunidad aún tiene que «recabar información» porque tiene «la misma que los medios», pero desde los servicios de emergencia le han comunicado que «en su momento sí que se aplicaron los protocolos de emergencias».
«Lo que a mí me han trasladado es que los servicios de emergencia sí que fueron al hogar y sí que activaron el protocolo habitual», ha señalado.
«Por el audio, sí se detecta una falta de cercanía y de empatía con la familia, es algo que yo lamento», ha indicado Ayuso, que ha dicho que le parece «reprochable» esa actitud «un tanto despegada», a la que le ha faltado «un tanto de humanidad».
Ayuso ha señalado que pese a esto apoya a todos los profesionales que trabajan en el Summa 112 «atendiendo emergencias en Madrid» ya que le consta que «la inmensa mayoría» lo hace «con la eficacia, amabilidad y atención especial que hay que ofrecerles a los ciudadanos».
Asimismo, ha trasladado su «cariño y apoyo» a la familia, y ha lamentado «profundamente» lo sucedido.