Serguéi Lavrov, ministro de Exteriores ruso, ha ejercido de mediador entre las dos partes implicadas
Durante la madrugada de este viernes, se ha acordado un alto el fuego en los enfrentamientos armados que estallaron el pasado 27 de septiembre entre Armenia y Azerbaiyán, en Nagorno Karabaj. Serguéi Lavrov, ministro de Exteriores ruso, ha ejercido de mediador con los jefes de las diplomacias de las partes implicadas. La tregua comenzará este sábado a partir de las doce del mediodía.
Con fines “humanitarios” y, tal y como ha explicado Lavrov, tendrá como objetivo “intercambiar prisioneros de guerra, otras personas y los cuerpos de los muertos según los criterios del Comité de la Cruz Roja Internacional”. Los “parámetros específicos” de la aplicación como la duración que debe tener la tregua, todavía deben negociarse.
Además, el ministro de Exteriores ruso ha explicado que las partes enfrentadas se han comprometido también a celebrar “negociaciones sustanciales para lograr rápidamente una solución pacífica” bajo el patrocinio del Grupo de Minsk de la OSCE, que está presidido por Francia, Rusia y Estados Unidos.
La iniciativa de realizar este intento de alto al fuego fue del presidente ruso, Vladímir Putin. La reunión, que duró más de diez horas, comenzó con mucho retraso y llegó a temerse por su cancelación. María Zajárova, portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, publicó en su cuenta de Facebook que las negociaciones habían sido “maratónicas”.
Una reunión en un ambiente caldeado
Antes de que la reunión se produjera, Ilham Alíev, presidente azerbaiyano, hizo unas declaraciones por televisión que caldearon el ambiente previo a la reunión: “Recuperar los territorios ocupados por los armenios de cualquier manera; “les estamos dando una última oportunidad de retirar las tropas y volver a las negociaciones”, aseguró.
Según sus palabras, Nagorno Karabaj “sí tiene una solución militar”: “Hemos escuchado reiteradamente a mediadores y responsables de organizaciones internacionales que el conflicto no tiene solución militar y yo decía que no estaba de acuerdo con esta tesis y tenía razón”, afirmó. Pero después añadió: “¿Cómo se está resolviendo ahora la cuestión? ¿No por medios militares? Se está resolviendo precisamente por medios militares”. Para Alíev, “primero deben ir la vía militar y luego la política”. Además, aseguró que su ejército es más poderoso y está mejor preparado que el armenio.
Por otro lado, Nikol Pashinián, primer ministro armenio, declaró el viernes que son “fieles al principio del arreglo pacífico del conflicto en Nagorno Karabaj” y que están “preparados para reanudar el proceso de paz en concordancia con las declaraciones hechas en los últimos días por los presidentes y ministros de Asuntos Exteriores de los países copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE”.
El primer ministro armenio, en una entrevista difundida este jueves, afirmó que “se podría resolver el problema de Nagorno Karabaj alcanzando un compromiso entre las partes, pero Azerbaiyán prefiere recurrir a la fuerza”. “Es hora de solucionar este conflicto de una vez para que no tengan que heredar las nuevas generaciones”, añadió.
