El Presidente de Perú destituye al comandante de la policía y a 15 generales tras las protestas en el país
El presidente peruano anuncia un sistema de protección de las víctimas de la fuerza del orden
El presidente de Perú, Francisco Sagasti, anunció la designación de un nuevo comandante general de la Policía, la instalación de una comisión de modernización de esta institución y gerentes públicos para la gestión de sus recursos, como parte de una reforma policial tras los violentos sucesos en las manifestaciones a inicios de este mes.
En un mensaje televisado, Sagasti anunció que, en uso de las atribuciones constitucionales, ha decidido designar como nuevo comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP) al general César Augusto Cervantes Cárdenas, en reemplazo del teniente general Jorge Lam.
«También he decidido instalar una comisión de bases, cuya misión será recomendar acciones, en un plazo de 60 días, para modernizar y fortalecer a la Policía Nacional, en defensa de los derechos ciudadanos, el orden interno y la seguridad ciudadana y de la institución policial», agregó el jefe de Estado. La aludida comisión será liderada por el ministro del Interior, Rubén Vargas, y contará con la participación de la sociedad civil.
Hereda investigaciones por represión
Sagasti asumió la presidencia de Perú después de una semana de protestas en las calles en rechazo a su antecesor Manuel Merino, bajo cuya presidencia del Parlamento impulsó la destitución de Martín Vizcarra (2018-2020).
Las manifestaciones fueron violentamente reprimidas por la Policía y acabaron el 14 de noviembre con la muerte de dos manifestantes y más de un centenar de heridos, nueve de ellos de gravedad. A raíz de estas muertes, la Fiscalía ha abierto una investigación por presunto homicidio y lesiones graves a Merino, a su primer ministro Antero Flores-Aráoz y a otras autoridades.
Sagasti reiteró su «profundo pesar por los hechos ocurridos en las movilizaciones ciudadanas, en las cuales dos jóvenes perdieron la vida, otros ciudadanos resultaron heridos, algunos de ellos de gravedad, y otros fueron afectados en su dignidad durante su detención».
Con el fin de volver a conectar a la Policía Nacional con la ciudadanía, el gobernante anunció que ha dispuesto «que se fortalezca el sistema de protección a la familias de las víctimas y brigadistas que dieron apoyo en las movilizaciones públicas, en coordinación con las organizaciones de derechos humanos». «Queremos darle tranquilidad a los familiares», remarcó Sagasti.
Irregularidades durante la pandemia
Asimismo, el mandatario lamentó que, durante la pandemia del Covid-19, «se hayan cometido graves irregularidades en la administración de los recursos de la Policía Nacional, (dado que) esto habría ocasionado la muerte de miembros de esta institución que estaban en la primera línea de combate contra el Covid-19″.
En ese sentido, Sagasti informó que se ha dispuesto que, a través de la Autoridad Nacional del Servicio Civil (SERVIR), se dote a la Policía Nacional de gerentes públicos para la gestión de sus sistemas administrativos y presupuestales».
Igualmente, se solicitará a la Contraloría General de la República, que realice el control concurrente de su gestión administrativa, anotó. «Estas medidas tienen por finalidad fortalecer y agilizar los procesos de la Policía Nacional, con transparencia e integridad», expresó el presidente peruano.
Estrategia contra delitos
Con respecto a la seguridad ciudadana, Sagasti dijo haber dispuesto que se active una estrategia ad hoc contra el crimen organizado, las bandas y los delitos de alto impacto callejero. El mandatario subrayó que «es urgente renovar el compromiso de brindar seguridad y protección a los peruanos», y que por lo tanto «esta será la manera más segura de reconciliarnos y devolver la confianza a la ciudadanía en su Policía Nacional».
Sagasti también expresó su reconocimiento a «la entrega, servicio, y sacrificio de muchos policías que han expuesto su vida y en algunos casos la han perdido en la lucha contra el Covid y en el cumplimiento de sus funciones».