El Kremlin confía en la "voluntad política" de la Unión Europea para continuar con el diálogo
El alto representante para Política Exterior de la UE, Josep Borrell, aseguró que Rusia «se está desconectando progresivamente de Europa»
El Kremlin confía en que la Unión Europea (UE) tenga la voluntad política para continuar el diálogo con Rusia y que esto prevalezca sobre la amenaza de una nueva espiral de sanciones, informó el martes el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
«Sabemos que hay conversaciones sobre la imposición de sanciones (a Moscú) en Bruselas y también en Estados Unidos, donde estas se llevan a cabo con una insistencia enfermiza», dijo Peskov a la prensa.
El funcionario agregó que, a pesar de ello, el Kremlin espera que impere la voluntad en el seno de la UE para resolver «los asuntos más complicados de las relaciones bilaterales«.
A la vez, agregó que la tensión que existe ahora entre las partes ha obligado a Moscú a permanecer en estado de «movilización permanente».
«Las amenazas potenciales de acciones inamistosas, desde luego, obligan a que estemos siempre movilizados y preparados para tales manifestaciones«, señaló.
Posible ruptura de las relaciones con la Unión Europea
El pasado viernes el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, aludió a una posible ruptura de las relaciones con la Unión Europea en caso de nuevas sanciones, después de que el alto representante para Política Exterior de la UE, Josep Borrell, asegurara que Rusia «se está desconectando progresivamente de Europa».
Además, este lunes explicó que, en realidad, la ruptura entre Rusia y los Veintisiete comenzó ya en 2014 por Ucrania, al tiempo que recordó que «no hay que confundir la UE con Europa».
Borrell, que se convirtió el pasado 5 de febrero en el primer jefe de la diplomacia comunitaria en visitar Rusia desde 2017, admitió que la reunión con Lavrov había sido tensa, especialmente cuando pidió la liberación del líder opositor, Alexéi Navalni, condenado a una pena de cárcel.
A su vuelta a Bruselas, el diplomático español no descartó la adopción de una nueva partida de sanciones contra Moscú, algo que ya han pedido varios miembros de la Unión.