El Tribunal Supremo de Myanmar juzgará a Suu Kyi por revelar secretos oficiales
Junto a la líder birmana serán juzgados en el Supremo por el mismo delito su asesor económico, el australiano Sean Turnell, y tres ministros del gobierno
Junto a la líder birmana serán juzgados en el Supremo por el mismo delito su asesor económico, el australiano Sean Turnell, y tres ministros del gobierno
El Tribunal Supremo de Myanmar juzgará a la depuesta líder Aung San Suu Kyi por violar la Ley de Secretos Oficiales, la acusación más grave que afronta la premio nobel de la paz, que se encuentra en arresto domiciliario desde el golpe de Estado del 1 de febrero.
La máxima instancia del país asumirá este caso que, hasta ahora, trataba un tribunal de distrito de Rangún, la antigua capital, confirmó Khin Maung Zaw, uno de los abogados de la líder electa, que añadió que las autoridades judiciales no han explicado las razones de este cambio.
El Tribunal Supremo, con sede en la capital del país, Naipyidó, celebrará la primera vista el 3 de junio, según anunció el jueves el juez del tribunal de Rangún a los abogados de Suu Kyi.
Junto a la líder birmana serán juzgados en el Supremo por el mismo delito su asesor económico, el australiano Sean Turnell, que fue detenido días después del golpe, y tres ministros del gobierno depuestos por los militares.
Suu Kyi, de 75 años, se enfrenta además en un tribunal de Naipyidó a cinco cargos, incluidos la supuesta importación ilegal de dispositivos electrónicos, vulnerar las normas sobre la covid-19 y por provocar la alarma e incitar a que se cometan ofensas contra el Estado y el orden público.
El 24 de mayo está previsto que la líder depuesta, que hasta ahora no ha podido reunirse en persona con sus abogados, comparezca por primera vez de manera presencial en un tribunal de la capital.
Las acusaciones contra Suu Kyi, que pasó un total de 15 años bajo arresto domiciliario durante la anterior junta militar (1988-2011), han sido rechazadas con contundencia por sus letrados.
La premio nobel de la paz también ha sido acusada de corrupción, pero, de momento, no se han presentado los cargos ante ningún tribunal.
El proceso contra Suu Kyi y otros miembros del Gobierno electo se celebra mientras continúan las protestas y el movimiento de desobediencia civil contra la junta militar que están siendo reprimidos brutalmente por las fuerzas de seguridad, que han matado a al menos a 810 personas y detenido a más de 5.000.
El Ejército birmano justifica el golpe de Estado por un supuesto fraude electoral en los comicios del pasado noviembre, en los que arrasó el partido de Suu Kyi, como ya hiciera en 2015, y que fueron considerados legítimos por los observadores internacionales.