La oposición anuncia un Gobierno alternativo en Israel para poner fin a 12 años de era Netanyahu
Ocho partidos, de diversa ideología y con una frágil mayoría parlamentaria, se han unido para sacar del poder al emblemático primer ministro
Ocho partidos, de diversa ideología y con una frágil mayoría parlamentaria, se han unido para sacar del poder al emblemático primer ministro
El líder de la oposición, Yair Lapid, encargado de formar gobierno en Israel, anunció este miércoles que ha logrado cerrar un pacto con las fuerzas opositoras para crear un ejecutivo que desbancaría del poder al actual primer ministro, Benjamín Netanyahu.
La nueva coalición de gobierno, compuesta de partidos de casi todo el arco ideológico -incluido un partido árabe por primera vez-, estará liderada por el ultranacionalista religioso Naftali Benet durante los dos primeros años y será reemplazado por el centrista laico Lapid durante los dos siguientes.
Poco antes de la medianoche, cuando acababa su plazo para conformar un Ejecutivo, Lapid, líder del centrista Yesh Atid, comunicó al presidente de Israel, Reuvén Rivlin, que ha logrado un pacto de gobierno en el que estarían implicados otros siete partidos de la oposición.
«Me comprometo con usted, señor presidente, a que este gobierno trabajará para servir a todos los ciudadanos de Israel», dijo Lapid, que agregó que hará todo lo que esté a su alcance «para unir a todas las partes de la sociedad israelí.
El líder centrista informó también al presidente de la Knéset (Parlamento), Yariv Levín, y le instó a convocar una sesión especial lo antes posible para llevar a cabo la jura del nuevo Ejecutivo. Ésta podría producirse tan pronto como la semana que viene o extenderse por un plazo desde hasta doce días.
Una coalición inestable
Además de Yesh Atid y Yamina, el partido que lidera Benet, el próximo Ejecutivo estará compuesto por el ultraderechista Israel Nuestro Hogar, el derechista Nueva Esperanza, el centroderechista Azul y Blanco, el centroizquierdista Partido Laborista, el izquierdista y pacifista Meretz y el islamista árabe Raam.
Estos ocho partidos concentran un total de 62 escaños de una Cámara de 120, lo que significa una mayoría suficiente para gobernar pero garantiza una coalición inestable.
A esto se agrega la diversidad ideológica de los partidos, que demoró hasta último momento el acuerdo alcanzado hoy y que podría continuar siendo un factor problemático en los días previos a la ratificación del nuevo Gobierno.
Si bien todos los líderes de los partidos miembro pusieron hoy su firma en el documento fundacional del nuevo Ejecutivo, los acuerdos entre ellos son de carácter político y no los comprometen legalmente, por lo que aún podrían revertir su posición o incluso votar en contra de su ratificación durante la jura.