La Unión Europea hace efectivo el cierre de su espacio aéreo a Bielorrusia
Es la principal represalia por el aterrizaje forzoso en Minsk de un avión de Ryanair para arrestar al periodista Roman Protasevich
Es la principal represalia de los Estados comunitarios por el aterrizaje forzoso en Minsk de un avión de Ryanair para arrestar al periodista Roman Protasevich
Los países de la Unión Europea acordaron este viernes prohibir que las compañías aéreas bielorrusas y sus aviones sobrevuelen el espacio aéreo de los Estados comunitarios, así como impedir que los vuelos operados por ellas accedan a sus aeropuertos.
«El Consejo ha decidido hoy reforzar las medidas restrictivas existentes en vista de la situación en Bielorrusia mediante la introducción de una prohibición sobre el sobrevuelo del espacio aéreo de la UE y sobre el acceso a los aeropuertos de la UE por compañías bielorrusas de todo tipo», informó la institución en un comunicado.
Así pues, especificó, los Estados miembros de la UE deberán denegar el permiso para aterrizar, despegar o sobrevolar sus territorios a cualquier aeronave operada por compañías aéreas bielorrusas, incluso como compañía de comercialización.
La decisión adoptada por los embajadores de los Veintisiete se publicará este mismo viernes en el «Diario Oficial» de la UE, con el fin de que entre «en vigor a las 00:00 del 5 de junio», precisaron a Efe fuentes comunitarias.
Los embajadores de los Veintisiete ante las instituciones europeas, bajo la presidencia portuguesa de la UE, adoptaron así los «actos jurídicos» necesarios en un «tiempo récord» para ejecutar esta decisión, que figuraba en las conclusiones alcanzadas en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno celebrada presencialmente en Bruselas los pasados días 24 y 25 de mayo, añadieron las fuentes.
De esta manera, señalaron, «se ha podido traducir jurídicamente, en un tiempo récord, uno de los componentes prioritarios de las conclusiones del Consejo Europeo y quizás el de mayor impacto político en Bielorrusia», en respuesta a la decisión del régimen de Alexander Lukashenko de obligar el 23 de mayo a un avión de Ryanair a realizar un aterrizaje forzoso en el aeropuerto de Minsk para arrestar al periodista crítico Roman Protasevich y a su compañera.
Las fuentes añadieron que «los trabajos sobre los demás componentes de las conclusiones del Consejo Europeo avanzan a muy buen ritmo», en alusión a próximas sanciones.
Sólo Rusia apoya a Bielorrusia
En la pasada cumbre, los jefes de Estado y de Gobierno acordaron también ampliar la lista de sanciones contra Bielorrusia, inclusive al presidente Lukashenko y a su hijo y asesor Víktor Lukashenko, a los que se les prohíbe entrar en territorio comunitario y se les han congelado todos sus bienes y activos en la UE.
Aunque los nombres y las nuevas entidades no han transcendido aún, Bruselas dijo que todos ellos estarían relacionados con el aterrizaje forzoso del avión y el arresto del periodista y opositor Protasevich y su compañera, la ciudadana rusa Sofía Sapega.
Además, el Ejecutivo comunitario ha congelado un préstamo de 3.000 millones de euros a Bielorrusia «hasta que sea un país democrático».
Desde finales de mayo, solo aerolíneas chinas y rusas sobrevuelan Bielorrusia, según el servicio de seguimiento de vuelos FlightRadar24.
Entre las compañías que decidieron por su cuenta evitar el espacio aéreo de Bielorrusia figuran Air France, Austrian Airlines, Lufthansa, Swiss, Finnair, Iberia, la polaca LOT, Air Baltic, KLM y la propia Ryanair.
Ucrania suspendió todos los vuelos entre ambos países y prohibió a sus compañías aéreas cruzar el espacio aéreo bielorruso, a pesar de que el aeropuerto de Kiev perderá por la medida un diez por ciento de sus ingresos.
La bielorrusa Belavia, a su vez, anunció la cancelación de vuelos a cerca de una decena de países, entre ellos España, debido al cierre del espacio aéreo por parte de la UE para la compañía.
Rusia se ha convertido en el único apoyo de Bielorrusia en su último enfrentamiento con Occidente.