¿Por qué preocupan tanto los cadáveres enterrados a la orilla del Ganges?
Desde el pasado mes de mayo centenares de cuerpos han aparecido en las orillas del río sagrado
Desde el pasado mes de mayo centenares de cuerpos han aparecido en las orillas del río sagrado
La India ha sido uno de los países más azotados por la crisis del coronavirus. Cientos de miles de personas han muerto, la escasez de oxígeno y sus cifras récord de contagios han puesto al país en una situación límite.
La pobreza es una realidad en la India que se ha acrecentado aún más con la pandemia. La falta de recursos para incinerar los cuerpos de las personas fallecidas por el coronavirus, han hecho que muchas familias que no tuvieron la solvencia económica para pagar la leña con la que se incinera a un fallecido, (como normalmente hacen en el país por tradición), entierren a sus allegados en tumbas poco profundas en las orillas del río Ganges.
El río Ganges es tan sagrado como contaminado. Millones son los que se rinden a su paso para reverenciarlo y ofrecerle un sin fin de ofrendas, pero ese acto de tanta fe, lleva consigo una inevitable contaminación. Cada año, los indios vierten 8,8 toneladas de desechos florales, algo que perjudica notablemente a su precario ecosistema por los pesticidas e insecticidas que contienen. A eso, hay que sumarle los desperdicios domésticos e industriales. Los expertos calculan que cada día se arrojan a su cauce tres mil millones de litros de aguas residuales.
Por otro lado, las orillas del Ganges siempre han sido un “ghat” (como los hindúes denominan al lugar para cremar o enterrar a los difuntos) muy popular, pero durante la pandemia el número de personas enterradas allí ha aumentado de forma excesiva. Según los datos oficiales, casi medio millón de personas han muerto en el país a causa del covid-19 pero hay muchos otros fallecidos que no aparecen en los recuentos. Se estima que la cifra subiría a prácticamente 700.000 fallecidos hasta día de hoy.
El problema y la incertidumbre de todos estos cuerpos enterrados en el Ganges llega con el periodo de monzones. Se teme que con este fenómeno los cadáveres se pierdan entre las aguas altas del río, algo que supondría un problema de salud pública y para el medioambiente. Si el Ganges aumenta su caudal, los cadáveres quedarían en el agua que se contaminaría aún más con la descomposición de los cuerpos.
Hay que tener en cuenta que el Ganges es un río con fines comerciales por la pesca y animales acuáticos. Además su agua se emplea para regar y beber. El sustento de más de cuatro millones de personas depende del río. Por lo tanto la contaminación de la descomposición de todos esos cuerpos junto con la ya existente, no solo produciría un problema de salud pública y medioambiental… también sería económica, en un país ya sumergido en la pobreza.
¿Qué son los monzones?
Se trata de un fenómeno meteorológico de vientos que producen lluvias torrenciales y fuertes inundaciones. Los auténticos monzones se producen en el sureste asiático, especialmente en la India y su océano. Existen dos clases de monzones: los de verano y los de invierno. El viento cambia de dirección en cada uno de ellos, de ahí la palabra ‘monzón’ que quiere decir ‘estación’ o ‘cambio’. De los monzones depende gran parte de la economía de la India, ya que el algodón y el arroz necesitan mucha cantidad de agua.