Bruselas responde a las amenazas de Reino Unido: habrá "graves consecuencias" si no se respeta el acuerdo del Brexit

El protocolo irlandés del acuerdo lleva semanas causando fricciones entre ambas partes, con los británicos dispuestos a suspenderlo

La Comisión Europea advirtió este viernes al Reino Unido de que habría «graves consecuencias» si optara por suspender de manera unilateral el protocolo irlandés incluido en el acuerdo del Brexit.

Asimismo, calificó de «decepcionante» que Londres no cambie su posición para facilitar la implementación de ese remedio, que evita una frontera física en Irlanda.

El Reino Unido lleva semanas amenazando a la Unión Europea con activar el Artículo 16, que permitiría la suspensión de manera unilateral de algunas partes del citado protocolo.

«Que no haya duda de que activar el Artículo 16, para buscar la renegociación del protocolo, tendría graves consecuencias», declaró el vicepresidente de la CE para Relaciones Interinstitucionales, Maros Sefcovic.

El político avisó de que las consecuencias serían «graves» para Irlanda del Norte porque «conduciría a la inestabilidad y la imprevisibilidad», pero también para las relaciones entre el Reino Unido y los Veintisiete, puesto que supondría «un rechazo de los esfuerzos de la UE para encontrar una solución consensuada sobre la implementación del protocolo».

Sefcovic se pronunció así en una comparecencia tras reunirse en Bruselas con el secretario de Estado británico para el Brexit, David Frost, para negociar nuevas formas de aplicar el protocolo.

El vicepresidente de la CE calificó de «decepcionante» la falta de flexibilidad del Reino Unido para consensuar fórmulas que simplifiquen la aplicación de ese remedio.

El protocolo evita el regreso de una frontera comercial entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte, pero crea nuevos controles sobre las mercancías que viajan desde Gran Bretaña a Irlanda del Norte, región del Reino Unido en la que se siguen aplicando las normas del mercado único comunitario.

La nueva carga burocrática ha provocado escasez de productos y tensiones políticas en Irlanda del Norte.

Además, el Reino Unido exige ahora que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea no sea el encargado de resolver las disputas sobre el funcionamiento de dicho documento y propone reemplazar la corte por un proceso de arbitraje.

También amenaza con suspender el protocolo de forma unilateral.

Este mismo viernes Frost aseguró que el Reino Unido no activará hoy el Artículo 16, pese a que subrayó que esta opción «está muy presente sobre la mesa y lo ha estado desde el pasado julio».

Ante la escalada de la tensión y los problemas de escasez de productos, la CE presentó el mes pasado unas propuestas para simplificar los controles y procesos sanitarios y aduaneros.

La Comisión está debatiendo esas iniciativas con el Reino Unido y aspira a lograr una solución consensuada antes de fin de año.

Desde el miércoles se han mantenido negociaciones técnicas en Bruselas, a la espera del encuentro de hoy entre Sefcovic y Frost.

Sefcovic aseguró que las propuestas que Bruselas anunció el mes pasado supusieron «un gran movimiento» por parte del club comunitario.

«Pero hasta hoy no hemos visto movimiento en absoluto por parte del Reino Unido. Encuentro esto decepcionante y, una vez más, animo al Gobierno del Reino Unido a comprometerse con nosotros de manera sincera», comentó.

La de hoy fue la tercera reunión entre Sefcovic y Frost desde que la Comisión publicó las propuestas para facilitar la implementación del protocolo, y los dos políticos tienen previsto volver a citarse el próximo viernes, 12 de noviembre, en Londres. Además, las negociaciones continuarán a nivel de expertos.

El vicepresidente comunitario instó a concentrar «todos los esfuerzos» en encontrar una solución «tan pronto como sea posible».

Frost y Sefcovic también abordaron el conflicto pesquero por la negativa del Reino Unido a conceder todas las licencias pesqueras que corresponden a Francia para pescar en aguas británicas.

El vicepresidente de la CE recordó que el acuerdo comercial pactado entre Londres y Bruselas estipula que todos los barcos que pescaban antes del Brexit en aguas territoriales británicas deberían poder seguir haciéndolo.

«Todos los barcos franceses con derecho a una licencia deberían recibir una», aseveró.

Fuente: EFE