Las tasas de hospitalización por covid en Sudáfrica marcan su cifra más baja con ómicron: caen un 91%
Lo mismo ocurre con las muertes, que si bien aumentaron en los últimos días, se mantienen menos numerosas que en otras etapas de la pandemia
Lo mismo ocurre con las muertes, que si bien aumentaron en los últimos días, se mantienen menos numerosas que en otras etapas de la pandemia
Aunque la cifra de contagios de Covid-19 confirmados en Sudáfrica durante estos días ha superado los máximos de todas las anteriores debido a la variante ómicron, los últimos datos obtenidos en cuanto a la tasa de hospitalizaciones son alentadores.
La tasa de hospitalizaciones se mantiene «mucho más baja» que en otros momentos de la pandemia, además, estos datos también aportan señales de que este nuevo aumento de infecciones puede estar llegando a su punto máximo.
El ministro de Salud sudafricano Joe Phaahla, confirmó con estos datos que, con la variante ómicron dominando las infecciones en el país, «el número de casos de esta cuarta ola ha excedido los picos de la tercera, segunda y primera».
En la semana entre el 8 y el 15 de diciembre, la media de nuevos casos diarios fue de 19.755 para una población de unos 58 millones (y la jornada del miércoles sumó la cifra más alta nunca antes registrada en Sudáfrica, 26.976 nuevas infecciones).
Asimismo, la tasa de positividad de los test realizados -un factor que los expertos consideran más indicativo que las cifras absolutas de nuevos casos- también se mantiene muy alta, por encima del 30% en los últimos días.
Las hospitalizaciones también estuvieron creciendo «rápidamente» y en los últimos 7 días el aumento fue del 70%, pero el ministro sudafricano recalcó que, aunque el porcentaje de aumento es grande, el país partía de una tasa muy pequeña de ingresos hospitalarios.
Sólo el 1,7% de los casos identificados de Covid-19 ingresaron en el hospital en la segunda semana de infecciones de la variante ómicron, en comparación con el 19% en la misma semana en la que llegó la variante delta.
«En comparación con las anteriores olas, la media semanal de hospitalizaciones definitivamente es mucho más baja que en la tercera ola (a mediados de este año, impulsada por la variante delta)», señaló el funcionario.
«En cifras absolutas», según Phaala, Sudáfrica está aún en un «nivel bastante bajo» de casos de gravedad e incluso entre los pacientes hospitalizados, donde la mayoría presentan cuadros «más suaves» que en otros puntos de la pandemia.
Lo mismo ocurre con las muertes, que si bien aumentaron en los últimos días, se mantienen menos numerosas que en los periodos comparables de las olas previas.
Como dato esperanzador, en la provincia de Gauteng -donde están Johannesburgo y Pretoria y considerada el gran epicentro de la ola de ómicron-, tanto el número de casos como la tasa de positividad de los test realizados muestran señales tempranas de haber empezado a disminuir y, por tanto, de que el pico de infecciones podría haber quedado atrás, si bien es pronto para ofrecer conclusiones firmes.
Sudáfrica se mantiene como el gran epicentro de la pandemia en África y acumula unos 3,25 millones de contagios y algo más de 90.000 muertes.