La ciudad italiana de Turín deja de registrar a los hijos de parejas homosexuales
Desde 2018, la ciudad ha registrado un total de 79 niños gracias a la decisión de la por entonces alcaldesa Chiara Appendino
El alcalde de Turín, Stefano Lo Russo. | Alberto Gandolfo (NurPhoto)
La ciudad italiana de Turín (en el noroeste del país) deberá dejar de inscribir en su registro civil a los hijos de parejas homosexuales, una práctica burocrática comenzada en 2018 a pesar de que en el país no se reconoce la paternidad a esas familias.
El alcalde, Stefano Lo Russo, se ha visto obligado a suspender este tipo de registros después de que así se lo solicitara el delegado del Gobierno, Raffaele Ruberto, por constituir una «violación de la ley», según recoge el diario turinés La Stampa. «Lo hago con gran amargura, obedecer me cuesta muchísimo«, ha declarado el regidor, en declaraciones recogidas por el rotativo.
Turín se convirtió en abril de 2018 en la primera ciudad del país en permitir a las parejas homosexuales el registro de un hijo o hija común, que hasta entonces sólo se reconocía al progenitor biológico.
Al contrario que en la mayoría de los países de la Europa occidental, Italia no reconoce los matrimonios homosexuales, solo las «uniones civiles» gracias a una ley de 2016, pero por ejemplo no se permite la adopción del hijo biológico de una parte de la pareja.
Desde 2018 Turín ha registrado un total de 79 hijos de parejas de homosexuales, gracias a la decisión de la por entonces alcaldesa Chiara Appendino, del Movimiento Cinco Estrellas, mantenida hasta ahora por su sucesor, Lo Russo, del Partido Demócrata.
Appendino inauguró esta práctica meramente burocrática sin consultar el parecer de los tribunales, que han seguido aplicando la ley vigente.
El pasado año un tribunal turinés rechazó el recurso de una pareja de lesbianas para dar el apellido de ambas a una hija nacida por fecundación heteróloga, practicada con gametos masculinos procedentes de un donante.
