Florida aprueba la ley «No digas gay», que prohíbe tratar la identidad sexual en las aulas hasta tercero
Tampoco podrán tratarse temas relacionados con la sexualidad y los padres podrán denunciar a los centros que incumplan la norma
El gobernador de Florida (Estados Unidos), el republicano Ron DeSantis, ha aprobado la polémica ley que popularmente ha sido bautizada como «Don’t Say Gay» («No digas gay»), que prohíbe hablar en las escuelas de sexualidad e identidad sexual hasta el tercer curso.
Un día después de ser motivo de burla en la ceremonia de los Premios Óscar por la ley ahora promulgada, DeSantis ha subrayado en una rueda de prensa tras poner su firma en la normativa que no le «importa» lo que digan ni Hollywood, ni los medios, ni las corporaciones.
La ley oficialmente llamada «Derechos de los padres en la educación» impide que los maestros aborden la identidad de género y la orientación sexual en las clases con alumnos de jardín de infancia y primero y segundo grados, que tienen edades de hasta 7 u 8 años. A partir de tercer grado de educación primaria, ambas cuestiones pueden ser abordadas de una forma «apropiada para la edad».
Según la ley promulgada hoy, los padres podrán presentar demandas judiciales contra el distrito escolar y recibir una indemnización por daños y perjuicios si incumplen esta disposición.
En Twitter, el presidente de EEUU, Joe Biden, afirmó este lunes que la actual Administración «continuará luchando por la dignidad y la oportunidad de cada estudiante y familia, en Florida y en todo el país».
«Todos los estudiantes merecen sentirse seguros y bienvenidos en el salón de clases. Nuestros jóvenes LGBTQI+ merecen ser afirmados y aceptados tal como son«, ha señalado Biden.
Disney carga contra la ley
El gobernador, que busca ser reelegido para cuatro años más en las elecciones del próximo noviembre y es visto como un posible candidato a la nominación republicana en las presidenciales de 2024, ha afirmado por su parte que seguirá firme en la defensa del derecho de los padres a decidir lo que quieren para sus hijos en materia educativa.
«Esta ley viene a corregir algo que está pasando en EEUU y es que se ignora a los padres en decisiones escolares que tienen que ver con educación sexual e identidad de género», ha explicado DeSantis, quien ha firmado la normativa en una escuela en Spring Hill, en el oeste de Florida, sin haberlo anunciado previamente.
«Es inapropiado para los niños de preescolar y de primero y segundo grados. Los padres no quieren que esto pase en nuestras escuelas«, ha añadido el gobernador, que en medio de la campaña electoral tiene también sobre la mesa para firmar una ley restrictiva del derecho al aborto y otras normas ultraconservadoras.
Entre las primeras reacciones tras la firma de la ley está la de la compañía Disney, que es la empresa que tiene más empleados en Florida y una importante donante de fondos a políticos conservadores como DeSantis.
«Nunca debió ser aprobada ni convertida en ley«, ha señalado Disney en un comunicado en el que se declara «dedicada» a apoyar los derechos y la seguridad de sus empleados LGBTQ+ y a los esfuerzos de organizaciones que a nivel estatal y nacional luchan por lograr que esta ley sea frenada en el poder legislativo o en los tribunales.
Presionada por sus empleados LGTBQ+, Disney, que había mantenido su silencio hasta entonces, se vio obligada a criticar la polémica ley cuando fue aprobada a comienzos de marzo por el congreso de Florida. Eso le costó una polémica con DeSantis, quien atacó a la compañía de entretenimiento y parques temáticos por sus negocios con China.