"Luchar a muerte": los demócratas estadounidenses se movilizan para proteger el aborto en el país
Gobernadores y legisladores prometen que intentarán blindar esta práctica ante la probabilidad de que el Tribunal Supremo de revocarlo
Gobernadores y legisladores prometen que intentarán blindar esta práctica ante la probabilidad de que el Tribunal Supremo lo revoque
Los demócratas en varios estados han prometido plantar batalla para proteger el aborto en EE.UU., tras la filtración del borrador de un fallo del Tribunal Supremo que lo revocaría y al tener las manos atadas en el Congreso federal.
A raíz de la filtración, una miríada de gobernadores y legisladores demócratas estatales ha prometido blindar el aborto ante la probabilidad de que la máxima instancia judicial del país, con una mayoría conservadora, lo limite o revoque en junio.
La gobernadora de Michigan, la progresista Gretchen Whitmer, resumió en un mensaje en Twitter el sentir de los demócratas en los estados, lejos de los centros de poder federal: «Quiero que todos los michiguenses, independientemente de lo que pase en DC (Distrito de Columbia), sepan que voy a luchar a muerte para proteger el acceso al aborto seguro, legal… en Michigan», dijo la gobernadora en un video dirigido a los ciudadanos.
La protección del aborto recae en los demócratas de los estados
Y es que desde el Distrito de Columbia, donde se ubica Washington, la capital del país, poco se podrá hacer si el aborto es revocado por el Supremo, dado que cualquier iniciativa de la Casa Blanca o del liderazgo demócrata en el Congreso para amparar ese derecho se va a topar con el «filibusterismo».
Este mecanismo legislativo se ha convertido en la principal arma empleada por los republicanos de las dos cámaras, controladas por los demócratas, para obstaculizar los proyectos de los progresistas y del presidente Joe Biden, que ha visto naufragar la financiación de su agenda social por el filibusterismo, que obliga a contar con 60 votos a favor en el Senado para aprobar cualquier borrador.
En consecuencia, los progresistas se están preparando para hacer que los estados en los que tienen el poder se conviertan en «santuarios» del acceso al aborto.
La gobernadora demócrata de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, señaló en Twitter que, de producirse un fallo en el Supremo contrario al aborto, «las ramificaciones» podrían ser devastadoras para las mujeres de su estado. «Hoy y cada día, las acciones que hemos adoptado para proteger el derecho al aborto en Nuevo México son más importantes que nunca. El acceso al aborto es acceso a la atención sanitaria, y eso no cambiará aquí», zanjó.
En previsión de una resolución en el Supremo que restrinja o vete el aborto, varios estados dominados por los progresistas, como Colorado, Nueva Jersey y Washington, han aprobado este año legislación para ampararlo y actualmente hay 16 estados, más el Distrito de Columbia, que cuentan con normas que protegen ese derecho.
A rasgos generales esos 16 estados están en la costa este y oeste del país, como California, Nevada, Oregón, Maryland o Nueva York, aunque entre ellos figuran Colorado y Illinois, en el centro y el medio oeste, respectivamente.
Illinois, uno de los posibles destinos para abortar
Por ejemplo, en Illinois, que se espera que pase a ser uno de los destinos de muchas mujeres que quieren abortar y que no puedan hacerlo en sus propios estados por las limitaciones, el Legislativo aprobó en 2021 una norma que anula el requisito de notificar a los padres cuando una menor de edad quiere interrumpir su embarazo.
En California, después de la filtración, el gobernador Gavin Newsom, prometió el martes blindar el aborto en la Constitución del estado; y en Colorado, el gobernador Jared Polis, rubricó una ley el mes pasado que blinda el acceso sin restricciones al aborto en este estado.
Según el centro de estudios Guttmacher Institute, si la sentencia de 1973 en el caso «Roe contra Wade» por la que el Supremo reconoció el derecho al aborto en EE.UU. es revocada a través de un nuevo fallo de esta corte en una causa relativa al estado de Misisipi, en EE.UU. habría un total de 26 estados donde estaría vetado o con posibilidad de serlo.
Básicamente estos son territorios en manos de los republicanos, del centro, el norte, el medio oeste y el sur del país, como Alabama, Georgia, Misisipi, Misuri, Texas, Dakota del Sur, Ohio y Oklahoma.
La gobernadora de Alabama reza por veto al aborto
De hecho, la gobernadora de Alabama, la conservadora Kay Ivey, calificó en Twitter la filtración del borrador de «preocupante, escandalosa y de intento flagrante de manipular los procesos sagrados del Tribunal Supremo» y aseguró que dirige sus «oraciones» para que «Roe contra Wade» sea revocado y «la vida prevalezca».
En la misma línea se manifestó el gobernador de Georgia, el también republicano Brian Kemp, quien afirmó en un comunicado que su estado continuará «valorando la vida» en todas sus etapas y que seguirá luchando por «la ley provida más fuerte» del país.
Así las cosas lo cierto es que las encuestas apuntan que la mayoría de los estadounidenses, un 54 %, considera que el Supremo debe mantener «Roe contra Wade».
Un gran sondeo, encargado por el Washington Post y la cadena ABC, cuyos datos se recopilaron la semana pasada, días antes de conocerse la filtración de un borrador, indica que el 54 % de los estadounidenses piensa que «Roe contra Wade» debe continuar; mientras que el 28 % cree que debe ser revocada.
Fuente: EFE