Downing Street admite que Johnson sabía de la conducta sexual inapropiada de un diputado
El portavoz oficial del primer ministro ha reconocido que el «premier» tenía conocimiento de las «conjeturas» que rodeaban el comportamiento de Pincher
El Gobierno británico ha confirmado este lunes que el primer ministro, Boris Johnson, tenía constancia de que existía malestar dentro del partido sobre la conducta indebida del exdiputado «tory» Chris Pincher, acusado de manoseos a colegas, cuando en febrero fue nombrado responsable de disciplina de la formación.
Un portavoz de Downing Street -despacho del jefe del Ejecutivo- ha admitido que Johnson sabía que había habido acusaciones contra Pincher por comportamiento sexual inapropiado, que o bien se habían resuelto o no habían generado ninguna queja formal, pero que en ese momento no se consideró necesario bloquear su nombramiento.
El nombre de Pincher ha sido noticia en los últimos días en el Reino Unido tras verse forzado la pasada semana a dimitir como responsable de disciplina «tory», después de que se filtrara que manoseó a dos hombres en un club privado del Partido Conservador.
Posteriormente, el partido gobernante le suspendió de afiliación, con lo que ahora es un diputado independiente, mientras es investigado por el Parlamento.
El pasado fin de semana se destaparon además nuevas acusaciones de otros hombres que revelaron casos de conducta sexual inapropiada protagonizados por Pincher en distintas ocasiones que se remontan, en algunos casos, a hace una década.
El portavoz oficial de Johnson ha reconocido hoy que el «premier» tenía constancia de las «conjeturas» que rodeaban el comportamiento de Pincher a lo largo de varios años, incluso en el momento en que el partido lo nombró encargado de disciplina el pasado febrero.
«No puedo entrar en demasiados detalles pero (Johnson) tomó nota sobre algunas de las alegaciones que se hicieron, si bien no hubo quejas oficiales en aquel momento y se consideró que no era apropiado frenar un nombramiento simplemente por acusaciones sin sustancia», ha explicado el portavoz.
Agregó que Johnson «tuvo constancia de que se había hablado y había especulación a lo largo de los años sobre esta persona, pero que no había acusaciones específicas». «No hubo quejas formales en aquel momento», ha finalizado.