Pekín y Washington elevan el tono tras unas declaraciones "ridículas y difamatorias" de la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos

Laura Richardson afirmó que «los adversarios están infiltrando los sistemas de computadoras, robando información sensible y lavando dinero en el ciberespacio»

La Embajada de China en Ecuador calificó de «ridículas y difamatorias» las declaraciones realizadas sobre su país por la comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, quien señaló a la nación asiática como una amenaza para la ciberseguridad y el medioambiente.

En un comunicado publicado este jueves, la misión diplomática de China en Quito afirmó que no acepta y se opone «firmemente» a las expresiones brindadas por Richardson durante la inauguración de la Conferencia de Defensa Sudamericana (Southdec), que se celebra en la capital ecuatoriana.

Para la Embajada de China, la general del Ejército estadounidense trató de «confundir la opinión pública, y de difamar y atacar sin ningún fundamento».

En su intervención realizada el miércoles durante la Southdec, Richardson afirmó que «los adversarios están infiltrando los sistemas de computadoras, robando la información sensible de las personas, datos y lavando dinero en el ciberespacio«.

En Sudamérica, «China está jugando ajedrez y Rusia está jugando damas», dijo al agregar que «sus acciones multifacéticas combinadas están desestabilizando la región, empoderando el autoritarismo y socavando los principios democráticos».

«Las organizaciones vinculadas a China tienen bases en Suramérica, que pueden usar para uso militar o para, potencialmente, acceder a información sensible de ciudadanos suramericanos y estadounidenses», resaltó Richardson.

Ante altos mandos militares de varios países de Sudamérica, Richardson también recordó que cada año cientos de embarcaciones chinas operan en labores de pesca cerca de las Islas Galápagos y otras zonas económicas exclusivas cerca de Sudamérica.

Asimismo, remató con que «muchos de los megaproyectos financiados por China están causando erosión en los ríos contaminando el agua, destruyendo el terreno fértil y desestabilizando los delicados ecosistemas«.

Frente a estas declaraciones, la Embajada de China afirmó que la militar norteamericana «está tratando de echarle la culpa y difamar a China sin proporcionar ninguna evidencia, práctica que no es profesional ni responsable».

Sobre las operaciones mineras de empresas chinas en territorio ecuatoriano, la misión diplomática aseveró que se realizan «sobre la base de igualdad y beneficio mutuo, aplicando estrictas normas de protección del medio ambiente y contribuyendo positivamente a la economía local, al bienestar social y al desarrollo sostenible».

Respecto a la flota china de pesca, respondió que el Gobierno de China mantiene con el de Ecuador «una estrecha comunicación y realizan diálogos y coordinación a través de canales diplomáticos para proteger conjuntamente el ecosistema marino».

También aprovechó para señalar que «Ecuador es el tercer mayor receptor de residuos sólidos plásticos procedentes de Estados Unidos en América Latina» y acusó a Estados Unidos de lanzar «ataques cibernéticos contra la Universidad Politécnica del Noroeste (NPU) de China y robar datos técnicos fundamentales».

La Embajada de China continuó con que «Estados Unidos también ha llevado a cabo durante mucho tiempo una vigilancia de audio indiscriminada contra usuarios de teléfonos chinos y ha robado ilegalmente mensajes de texto de usuarios de teléfonos móviles y los ha localizado inalámbricamente».

A ello añadió que, como «país que posee las tecnologías y capacidades cibernéticas más poderosas, Estados Unidos debería dejar inmediatamente de utilizar sus propias ventajas para realizar robos y ataques contra otros países«.