La UE da luz verde a los insectos para el consumo humano: el objetivo, "frenar el cambio climático y la extinción de especies"
Expertos señalan que hay que buscar «prácticamente todas las vías de solución» a la creciente demanda de productos ganaderos
Expertos señalan que hay que buscar «prácticamente todas las vías de solución» a la creciente demanda de productos ganaderos
La Unión Europea ha aprobado la venta de dos insectos para el consumo humano. Por un lado, las larvas de gusano en polvo, congeladas, en pasta y deshidratadas; y por otro, los grillos, que pueden venderse en polvo parcialmente desgrasado.
El objetivo, según la Comisión Europea, es reducir “la contaminación producida por los gases de efecto invernadero y, de esta manera, frenar el cambio climático y la extinción de especies”, pero aclara que, por el momento, nadie se verá obligado a comer dichos insectos.
“Es un reto enorme hacer frente a la creciente demanda de productos ganaderos”, asegura Tim Searchinger, director técnico del programa de alimentación del Instituto de Recursos Mundiales, una organización estadounidense de investigación medioambiental. “Prácticamente tenemos que buscar todas las vías de solución”.
La ONU lleva haciendo campaña para que la gente consuma insectos para hacer frente a la “inseguridad alimentaria” desde que publicó su informe de 2013 Insectos comestibles, y poco a poco normalizar esta dieta que en países como México o Tailandia está a la orden del día.