Estados Unidos paraliza las sanciones contra Siria para permitir el envío de ayuda humanitaria
El Departamento del Tesoro afirma que no supone un apoyo al régimen de Al Assad y mantendrán la vigilancia de los fondos
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha autorizado este jueves una exención de las sanciones impuestas a Siria para permitir todas las transacciones relacionadas con el envío de ayuda por los terremotos que han devastado parte del norte del país.
El Gobierno estadounidense ha emitido una licencia general por un plazo de 180 días que autoriza a las instituciones financieras a que procesen de inmediato «todas las transacciones» de ayuda por los seísmos, mientras que ha reafirmado su negativa a que las sanciones «inhiban la asistencia necesaria para salvar vidas después de este desastre», según ha informado el Tesoro en un comunicado.
«A medida que los aliados internacionales y los socios humanitarios se movilizan para ayudar a los afectados, quiero dejar muy claro que las sanciones de Estados Unidos en Siria no se interpondrán en el camino de los esfuerzos para salvar vidas del pueblo sirio», ha aseverado en la misiva el subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo.
Si bien Estados Unidos ha recalcado que sus sanciones a Siria no tienen como objetivo «la asistencia humanitaria legítima», incluidos los esfuerzos de socorro en caso de desastres causados por terremotos, esta autorización amplía el envío de ayuda al país de Oriente Próximo.
Estados Unidos vigila a Siria
No obstante, el alivio de las sanciones por sí «no puede revertir los desafíos estructurales de larga data y las tácticas brutales del régimen de Al Assad», según ha recalcado Washington.
«Esta licencia general refleja el compromiso de Estados Unidos de apoyar al pueblo de Siria durante la crisis del terremoto en curso (…) Nuestro más sentido pésame al pueblo de Turquía y Siria por la trágica pérdida de vidas y la destrucción a raíz de los devastadores terremotos», se lee en el texto.
Con todo, el Departamento del Tesoro ha anunciado que continuará monitorizando la situación en Siria y se relacionará con «las partes interesadas clave» en la asistencia humanitaria y en casos de desastre.