La Fiscalía estadounidense rechaza conmutar la condena a cadena perpetua de Pablo Ibar
El español se encuentra en prisión tras haber logrado evitar la pena de muerte en varios procesos judiciales. Ahora confía en alcanzar la libertad
El abogado de Pablo Ibar, Joe Nascimento, ha puesto en cuestión este martes ante el Tribunal de Apelaciones del 4º Distrito Judicial de Florida, con sede en West Palm Beach, el valor de las pruebas que se utilizaron en el último juicio en el que Ibar fue condenado a cadena perpetua, por lo que no considera que haya pruebas «sólidas» para mantener la condena. Sin embargo, la Fiscalía se ha opuesto a estos argumentos solicitando la confirmación de la misma.
Nascimento ha solicitado a los tres magistrados que conforman la Sala la anulación de la sentencia que desde 2019 recae sobre Ibar y la celebración de un nuevo juicio con «todas las garantías legales».
Por contra, la Fiscalía española se ha opuesto a la petición de la defensa y ha solicitado la confirmación de la sentencia, según ha informado la Asociación Pablo Ibar-Juicio Justo en un comunicado recogido por Europa Press.
Ibar se encuentra actualmente sentenciado a permanecer recluido de por vida, después de que en 2019 fuese declarado culpable de un triple asesinato en Estados Unidos, cuya autoría siempre ha negado.
Los doce motivos de la defensa de Ibar
La vista ha comenzado a las dos de la tarde hora local en el estado de Florida (20.00 horas en España) y se ha desarrollado por videoconferencia, en la que la defensa de Ibar ha sustentado su solicitud de anulación de la sentencia en doce motivos, entre los que ha destacado las irregularidades que se cometieron durante el proceso que terminó con la condena de Ibar hace tres años, así como las decisiones de «absoluta parcialidad» en las que incurrió el juez Dennis Bailey, quien dirigió la vista.
Entre estos doce motivos expuestos, el letrado ha cuestionado precisamente la existencia de una «minúscula» muestra de ADN perteneciente a Pablo Ibar en una camiseta que fue hallada en el escenario de los hechos y que era portada por uno de los autores del delito y que Fiscalía incorporó «de manera inesperada» antes del inicio del último juicio. Hasta ese instante, todos los análisis efectuados habían dado negativo respecto a restos vinculados a Ibar.
Al respecto, Nascimento ha indicado que la cadena de custodia fue «muy defectuosa» y que el laboratorio de análisis había recibido la camiseta en una bolsa con el precinto parcialmente abierto.
De la misma manera, el abogado ha puesto en duda ante la sala la veracidad del testimonio de un residente de la zona donde se perpetraron los delitos llamado Gary Foy, que resultó clave para la Fiscalía tras manifestar que vio a Ibar sentando en el asiento del copiloto del coche de la marca Mercedes de Casimir Sucharski.
Además, el letrado ha incidido en que los agentes de policía fueron los que condujeron al testigo a una «probabilidad sustancial de identificación errónea» mediante una fotografía, por lo que ha considerado que se trata de una prueba «nada fiable».
El letrado también se ha referido a la actuación del magistrado Dennis Bailey, que dirigió el último juicio en Broward County, y al que acusa de «abusar de su discrecionalidad». Ha criticado al juez por apartar del jurado a uno de sus miembros, que denunció haber sufrido presiones por parte de sus compañeros, un hecho que lo hizo público en las redes sociales. «Debería al menos haber indagado si hubo abuso o presión real o si meramente se trataba de las vehemencias normales en la discusión en un jurado», ha afirmado.
Tras Nascimento ha tomado la palabra la representante de la Fiscalía, Deborah Koenig, quien ha sostenido que el proceso judicial se ajustó «en todo momento» a la legalidad. Asimismo, ha argumentado que en el caso del jurado expulsado, el juez había tomado la decisión correcta y que los tribunales no deben intervenir en lo que son las discusiones internas de un jurado.
Tras la vista de apelación, se abre un periodo de deliberación entre los miembros del tribunal. Una fase que se puede prolongar varios meses e incluso no se descarta que el fallo tarde en conocerse un año. En el caso de que la apelación no prospere en esta instancia, la defensa acudirá al Tribunal Supremo de Florida.
La condena del español
Ibar ha sido trasladado recientemente desde el centro penitenciario de Okeechobee (Florida), donde permanecía desde que le fue conmutada la pena de muerte por la de perpetua, a otra instalación privada, en la que desarrolla diversas actividades y ha iniciado un curso de soldador.
Pablo Ibar fue declarado culpable del triple crimen que en junio de 1994 acabó con las vidas de Casimir Sucharski, dueño de un local nocturno y propietario del chalet donde se perpetraron los delitos, y de las jóvenes Sharon Anderson y Marie Rogers.
Los tres fueron asesinados por dos individuos que irrumpieron en la vivienda. La secuencia de los hechos fue grabada por una cámara de vídeo situada en el salón de la casa, que, en un momento determinado, capta el rostro de un joven con rasgos latinos que la Policía identificó con Pablo Ibar.
Sin embargo, en el último juicio celebrado en 2018-2019 quedó acreditado, incluso por peritos de la acusación, que este vídeo no tenía la calidad de imagen suficiente para realizar ninguna identificación.