Un ataque ruso en Odesa con drones y misiles daña edificios portuarios y almacenes de grano
Esta región del sur de Ucrania domina el mar Negro y alberga infraestructuras portuarias vitales para el comercio
Un nuevo ataque ruso con 19 drones y 14 misiles impactó la región ucraniana de Odesa (sur), lo que dejó una mujer herida y daños en una infraestructura portuaria, informó el lunes temprano el gobernador local, Oleg Kiper. Moscú «atacó la región de Odesa con drones ofensivos y dos tipos de misiles», explicó Kiper en Telegram, mencionando varios «golpes», entre ellos el ataque a una «infraestructura portuaria». Una mujer civil «resultó herido por una onda expansiva», añadió, al precisar que la víctima había sido trasladada al hospital.
Según el ejército ucraniano, Rusia dirigió el asalto con 19 drones Shahed de fabricación iraní, dos misiles supersónicos Onyx y otros 12 Kalibr. También se movilizó un submarino, precisó la misma fuente, según recoge AFP.
Todos los drones y 11 misiles Kalibr fueron derribados por las defensas antiaéreas, explicó el ejército, añadiendo que el balneario costero de Odesa había sufrido daños «importantes» y que se había generado un incendio, rápidamente extinguido, en un edificio hotelero.
Los proyectiles Onyx destruyeron almacenes de grano sin causar víctimas, continuó el ejército, que informó de almacenes y comercios dañados por la caída de escombros en los suburbios de Odesa.
Dos de los 11 misiles Kalibr destruidos sobrevolaban las regiones de Mikolaiv (sur) y Kirovograd (centro), pero la «gran mayoría» estaban sobre la región de Odessa, según el ejército.
La ciudad de Krivói Rog, en la región de Dnipropetrovsk, también fue atacada en la noche del domingo, informaron las autoridades locales. El gobernador Serguiï Lysak escribió en Telegram que la defensa antiaérea disparó contra drones enemigos. El jefe de la administración militar de Krivói Rog, Oleksandre Vilkul, habló de «un dron derribado», cuyos restos provocaron un incendio que no causó víctimas.
Las fuerzas rusas atacan regularmente esta región del sur de Ucrania, que domina el mar Negro y alberga infraestructuras portuarias vitales para el comercio marítimo. Los ataques han aumentado desde julio, cuando se abandonó el acuerdo sobre cereales que permitía a Ucrania exportar libremente su producción.
Por su lado, el Ministerio de Defensa ruso afirmó en Telegram que cuatro drones ucranianos fueron destruidos en la península anexionada de Crimea y el noroeste del mar Negro. Otros dos drones fueron derribados sobre la región de Kursk, según la misma fuente. «No hubo víctimas», pero un edificio administrativo resultó dañado, declaró el gobernador regional Roman Starovoyt.
En la vecina región de Briansk, justo al norte, el gobernador Alexandre Bogomaz contabilizó tres drones aéreos ucranianos derribados, sin mencionar víctimas ni daños.