Milei envía policías a Caracas para proteger la Embajada ante las coacciones de Maduro
El Gobierno venezolano ha cortado el suministro eléctrico a la sede argentina por acoger a opositores al régimen
El Gobierno de Argentina ha ordenado este miércoles el traslado de al menos dos agentes de la Gendarmería Nacional a territorio venezolano con la misión de custodiar la Embajada argentina en Caracas, donde se refugian varios disidentes cercanos a la líder opositora María Corina Machado.
Esta decisión se produce después de que las autoridades argentinas denunciaran esta noche que la Embajada había sufrido una interrupción en el suministro eléctrico tras acoger a los opositores en las horas anteriores al cierre del registro de candidaturas para las elecciones presidenciales del próximo julio.
Así, uno de los gendarmes se apostará frente a la Embajada argentina en Caracas, y el otro se encargará de custodiar la residencia oficial del representante diplomático argentino, donde a día de hoy la seguridad corre a cargo de dos militares de la Guardia Bolivariana.
Esta decisión ha sido adoptada por la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, a instancias de la ministra de Asuntos Exteriores, Diana Mondino, y aún depende de que el Gobierno venezolano de Nicolás Maduro dé su visto bueno, según han adelantado fuentes de la Presidencia de Argentina al diario Clarín.
Otra fuente consultada por el mencionado periódico ha detallado que el expresidente Alberto Fernández ordenó durante su mandato (2019-2023) la retirada de los gendarmes desplegados en las sedes diplomáticas argentinas en Venezuela como una forma de acercamiento al régimen de Maduro.
Las autoridades argentinas han confirmado que varios disidentes venezolanos se encuentran refugiados en su Embajada en Caracas en medio de las tensiones a nivel político en un país que a finales de julio celebrará unas elecciones en las que la oposición ha denunciado no poder inscribir a su candidato.
Machado se impuso en las primarias opositoras y fue designada como candidata a las elecciones, pero fue inhabilitada por la Justicia venezolana. Fue entonces cuando se escogió a Corina Yoris como aspirante disidente, pero el programa de inscripción de candidatos impidió su registro.
Tras las denuncias de la oposición de que el Gobierno de Maduro había impedido la candidatura de la Plataforma Unitaria Democrática, la autoridad electoral confirmó que Eduardo González Urrutia se había inscrito como aspirante de Mesa de la Unidad Democrática, absorbida por la PUD, tras una prórroga ante las denuncias de irregularidades.