La vicepresidenta de Ecuador denuncia a Daniel Noboa por violencia política
La política asegura que sus compañeros están llevando a cabo un plan estratégico para forzar su dimisión
Verónica Abad, vicepresidenta de Ecuador, ha denunciado al presidente Daniel Noboa por violencia política y de género. La querella, presentada ante el Tribunal Contencioso Electoral, ha sido presentada en un momento de máxima tensión entre los políticos tras las elecciones presidenciales de 2023, que obligaron a los ecuatorianos a acudir de nuevo a las urnas ante la falta de apoyos de los más votados. Una vez electos, no volvieron a mantener ningún tipo de relación a pesar de la cercanía de sus cargos, según explicó la vicepresidenta en una entrevista recogida por El País.
Una de las primeras decisiones tomadas por Noboa tras su llegada al poder fue la de designar a Abad como embajadora de la paz en Israel, sabiendo que Ecuador no tiene la suficiente influencia o relación con los países en conflicto como para poder frenarlo. Abad calificó de «inútil» el nombramiento del presidente y lo culpó de vulnerar sus derechos mediante la puesta en marcha de una serie de medidas que, según ella, tenían como objetivo dañar su imagen y presionarla para que dejase el cargo.
Otros cargos implicados
La denuncia puesta por Abad no solo incluye a Noboa, sino a otros cargos cercanos a su entorno que participaron activamente en su intento por forzar su dimisión. La demanda incluye a Gabriela Sommerfeld, ministra de Relaciones Exteriores; Esteban Torres, viceministro de Gobierno; y a Diana Jácome, asesora presidencial. Según asegura Abad, esta última no ha autorizado sus solicitudes de vacaciones y la ha criticado públicamente.
Por su parte, Esteban Torres, dio una rueda de prensa para hablar sobre el caso «Nene», por el que se investiga al hijo de la vicepresidenta por tráfico de influencias. Además, el político declaró que «sería nefasto para el país que Verónica Abad asuma el poder».
Una estrategia para dañar su imagen
La denunciante ha asegurado que el Gobierno del que forma parte ha llevado a cabo una estrategia para dañar su imagen y la de sus familiares. Entre los ejemplos de acciones llevadas a cabo por sus compañeros, destacan el cuestionamiento de su maternidad. La asesora presidencial se ha referido a su compañera como «una enemiga respaldada por grupos políticos que quieren atacar al Gobierno».