Hamás asegura estar dispuesta a implementar «de inmediato» el plan de alto el fuego de Biden
El Movimiento de Resistencia Islámica rechaza «cualquier nueva condición a este acuerdo por cualquiera de las partes»
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha mostrado este miércoles su disposición a implementar «inmediatamente» el plan de alto el fuego y liberación de rehenes presentado en mayo por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y que constaba de tres fases.
«Confirmamos nuestra disposición a implementar de inmediato el acuerdo de alto el fuego basado en el anuncio del presidente Biden del 31 de mayo y en la resolución 2735 del Consejo de Seguridad de la ONU y lo acordado previamente, especialmente en los acuerdos del 2 de julio, sin establecer nuevas demandas, al tiempo que rechazamos cualquier nueva condición a este acuerdo por cualquiera de las partes«, ha expresado Hamás en un comunicado recogido por el diario palestino Filastín, afín al grupo, según recoge Europa Press.
Tras ello, ha vuelto a rechazar cualquier negociación relacionada con el escenario post-conflicto, afirmando que se trata de «un asunto interno palestino» para el que ya se ha firmado un acuerdo de unidad nacional por parte de numerosas facciones palestinas, entre ellas Hamás y Al Fatá.
El grupo islamista también ha informado de que una de sus delegaciones negociadoras se ha reunido a lo largo de la jornada con el primer ministro de Qatar, el jeque Mohamed Abdulrahmán al Thani, y con el jefe de la Inteligencia de Egipto, Abbas Kamel. Durante el encuentro, Hamás ha resaltado su «flexibilidad» y su «positividad» de cara a lograr un acuerdo de alto el fuego y la completa retirada de las fuerzas isralíes de la Franja de Gaza.
El plan presentado por Biden para una tregua se desarrolla en torno a tres frases, la primera de las cuales se prolongaría durante seis semanas. En este plazo, las fuerzas israelíes se retirarían de las zonas pobladas de Gaza y se produciría la liberación de varios presos palestinos a cambio de la entrega de rehenes vulnerables.
En una segunda etapa, serían liberados el resto de rehenes, en el marco de un final ya permanente de las hostilidades, mientras que la tercera y última fase consistiría en el inicio de la reconstrucción de la Franja y en la entrega de los cuerpos de los secuestrados ya fallecidos.