Los rebelde sirios, a las puertas de Homs mientras Rusia aconseja abandonar el país
Jordania cierra su frontera con la nación vecina e Israel la refuerza ante los avances de la insurgencia yihadista
Las fuerzas gubernamentales de Siria habrían iniciado su retirada de Homs, situada en el centro del país y de importancia estratégica, ante el avance de yihadistas y rebeldes en el marco de la ofensiva desatada la semana pasada. Los insurgentes ya se encuentran a un kilómetro de esta ciudad clave en el conflicto por su relevancia logística y su cercanía a la capital. Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, «las fuerzas del régimen se han retirado del interior de la ciudad de Homs y se han trasladado a la carretera entre Homs y Tartús al no recibir apoyo de Hezbolá y las milicias proiraníes», uno de los principales respaldos sobre el terreno de las tropas de Damasco.
Sin embargo, el Ministerio de Defensa sirio ha afirmado en su cuenta en la red social Facebook que «las noticias en páginas de terroristas sobre la retirada del Ejército de Homs no son ciertas», desmentido similar a los emitidos previamente respecto a Alepo y Hama, en las que al final sí se produjo la entrada de yihadistas y rebeldes. «El Ejército sirio está presente en Homs y sus alrededores y desplegado en líneas defensivas fijas y sólidas que han sido reforzadas por un gran número de fuerzas equipadas con diferentes tipos de equipamiento y armas. Nuestras fuerzas están preparadas para repeler cualquier ataque terrorista», ha zanjado.
La caída de Homs supondría un duro golpe para Siria y sus aliados, ya que implicaría partir los territorios bajo control de las tropas gubernamentales y cortar la carretera entre Líbano e Irak, usada por Hezbolá para obtener armamento enviado por Irán. Las facciones armadas, encabezadas por Hayat Tahrir al Sham (HTS), habían logrado acercarse a primera hora del día a una distancia de cinco kilómetros de Homs en el marco de un fulgurante avance durante los últimos nueve días, en medio de un repliegue constante de las tropas gubernamentales.
En este contexto, el Observatorio ha indicado además que el Ejército ha empezado a trasladar tropas desde el este del país hacia Damasco para reforzar allí sus posiciones, lo que ha llevado a las fuerzas kurdas a adoptar «medidas» ante la posibilidad de que el grupo yihadista Estado Islámico aproveche estos vacíos de seguridad. La ofensiva, que en realidad son dos combinadas –‘Disuadir la Agresión, lanzada por HTS, y ‘Amanecer de Libertad’, encabezada por rebeldes sirios– es la primera a gran escala desde que los presidentes de Turquía y Rusia, Recep Tayyip Erdogan y Vladimir Putin, respectivamente, pactaran en 2020 un alto el fuego tras meses de combates. Líbano ha cerrado la frontera con la nación vecina, Israel la ha reforzado y Rusia, aliado del régimen de Al Assad que tiene una base militar en el terreno y ya ha desplegado a su aviación, ha aconsejado a sus ciudadanos que abandonen Siria de inmediato.