Reactivadas las sanciones de la ONU contra Irán por su programa nuclear
El mecanismo conocido como ‘snapback’ está en vigor con el objetivo «de que Irán nunca desarrolle un arma nuclear»

El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, junto con el secretario general de ONU, António Guterres. | Europa Press
Alemania, Francia y Reino Unido -grupo de países que conforman el E3- han dado luz verde a la reimposición de sanciones contra Irán para evitar el desarrollo de su programa nuclear tras más de una década paralizadas debido al histórico acuerdo nuclear de 2015.
«Dado que Irán incumplió reiteradamente sus compromisos, el E3 no tuvo más remedio que activar el procedimiento de restitución rápida, tras el cual dichas resoluciones volvieron a entrar en vigor», reza una declaración conjunta emitida por los tres países europeos.
El mecanismo conocido como ‘snapback’ está en vigor desde este 28 de septiembre a las 2.00 horas (hora peninsular) con el objetivo «fundamental de que Irán nunca busque, adquiera ni desarrolle un arma nuclear».
Los países del E3 han acusado a Irán de superar «todos los límites» comprometidos por la misma república islámica en el Plan de Acción Conjunto (PAIC), asegurando que posee 48 veces más de uranio enriquecido a lo establecido en el acuerdo y diez veces más de uranio altamente enriquecido.
«Es decir, diez veces la cantidad aproximada de material nuclear para el cual no se puede descartar la posibilidad de fabricar un dispositivo explosivo nuclear. Irán no tiene ninguna justificación civil creíble para sus reservas de uranio altamente enriquecido. Ningún otro país sin un programa de armas nucleares enriquece uranio a tales niveles y a esta escala», han sostenido los tres países europeos.
Instan a Irán a evitar una «escalada»
El E3 ha asegurado haber hecho «todo lo posible» para evitar la situación; sin embargo, Irán «no tomó las medidas necesarias para abordar nuestras preocupaciones ni para cumplir con nuestras solicitudes de prórroga». A pesar de esto, mantienen abiertas las «vías diplomáticas y negociaciones», asegurando que las sanciones no suponen el «fin de la diplomacia».
«Instamos a Irán a abstenerse de cualquier escalada y a volver a cumplir con sus obligaciones de salvaguardias legalmente vinculantes. El E3 seguirá trabajando con todas las partes para lograr una nueva solución diplomática que garantice que Irán nunca obtenga un arma nuclear», concluye la nota emitida por Alemania, Reino Unido y Francia.
Ya este sábado, las autoridades iraníes llamaron a consultas a sus embajadores en Alemania, Francia y Reino Unido ante el movimiento «ilegal» e «inmoral» de estos tres países para reactivar las sanciones contra Teherán.
«Teherán deberá rendir cuentas»
Por su parte, la Casa Blanca ha celebrado la iniciativa tripartita y ha aplaudido la robustez y el aplomo de los firmantes, y de su «acto de decidido liderazgo global» ante el «continuo incumplimiento significativo por parte de Irán de sus compromisos nucleares», demandando al país que asuma la responsabilidad por sus acciones.
«Esta tarde, la ONU impuso la reimposición de sanciones contra Irán. Felicitamos a Francia, Alemania y el Reino Unido por su firmeza y determinación», ha escrito el secretario del Departamento de Estado estadounidense, Marco Rubio, en una publicación en X.
Para el secretario de Estado, la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU de restablecer estas restricciones «envía un mensaje claro» a las autoridades iraníes: «El mundo no aceptará amenazas ni medidas a medias, y Teherán deberá rendir cuentas».
Entre las implicaciones más relevantes de esta medida, Rubio ha subrayado que -mediante la reactivación de seis resoluciones de la ONU- «prohíbe el enriquecimiento nuclear iraní y restablece las restricciones a los programas nucleares y de misiles balísticos, así como al comercio de armas de Irán».
No obstante, desde el Despacho Oval no cierran la puerta al diálogo, pues consideran que «un acuerdo sigue siendo el mejor resultado para el pueblo iraní y el mundo». Sin embargo, para que esto sea posible, reclaman a Irán que acepte «conversaciones directas, celebradas de buena fe, sin dilaciones ni ofuscaciones».
«De no lograrse dicho acuerdo, corresponde a los socios implementar de inmediato la reimposición de sanciones para presionar a los líderes iraníes a que hagan lo correcto para su nación y lo mejor para la seguridad mundial», ha sentenciado el secretario de Estado.
El Consejo de Seguridad de la ONU votó el pasado viernes en contra de ampliar por otros seis meses la exención de sanciones contra Irán. El texto, que buscaba retrasar hasta el 26 de abril de 2026 las sanciones, no fue aprobado, si bien ha contado con el voto a favor de Rusia, China, Pakistán y Argelia.