EEUU advierte a Rusia de que impondrá «costes» si no da pasos para la paz en Ucrania
El Secretario de Guerra, Pete Hegseth, asegura que la guerra terminará durante el mandato de Donald Trump

El secretario de Defensa de EEUU, Pete Hegseth, en declaraciones en la sede de la OTAN. | Wiktor Dabkowski (Zuma Press)
El secretario de Guerra, Pete Hegseth, ha señalado este miércoles en un mensaje a Rusia que la guerra debe acabar en Ucrania, avisando de que, si no da pasos en el corto plazo, Washington tomará medidas para «imponer costes» al Kremlin.
«Ahora es el momento de poner fin a esta trágica guerra, detener el derramamiento de sangre innecesario y sentarse a la mesa de negociaciones», ha insistido el secretario estadounidense en declaraciones en la reunión del Grupo Contacto para Ucrania, con el que unos 50 países afines a Ucrania suministran ayuda militar a Kiev.
Hegseth ha indicado que si la guerra no termina y si «no hay un camino hacia la paz a corto plazo», Estados Unidos está listo para, de la mano de sus aliados, «tomar medidas necesarias para imponer costes a Rusia por su continua agresión». El jefe del Pentángono ha insistido en que su Departamento está preparado para «hacer su parte» respecto a cuestiones que «solo Estados Unidos puede hacer», en una referencia a reforzar la OTAN y al Ejército ucraniano ante la invasión rusa del país vecino.
Después del acuerdo de paz en Gaza logrado por el presidente estadounidense, Donald Trump, la Administración norteamericana ha insistido en su enfoque de lograr la paz «mediante la fuerza», también en el escenario de Ucrania. Hegseth ha reivindicado a Trump, asegurando que «sabe cómo forjar la paz, crear oportunidades en situaciones y escenarios en los que la paz parece lejana». «Esta no es una guerra que comenzó bajo el mandato de Trump, pero terminará bajo su mandato», ha apostado, urgiendo a aprovechar el momento para poner fin al conflicto en Ucrania.
El mensaje de Hegseth llega en un momento de renovadas tensiones en el frente oriental, tras el avance de las tropas rusas en la región de Járkov y los bombardeos sobre infraestructuras energéticas ucranianas en los últimos días. Kiev ha reclamado públicamente un aumento urgente de la ayuda militar y, en particular, del suministro de sistemas antiaéreos, ante lo que considera un intento de Moscú por forzar negociaciones desde una posición de fuerza antes del invierno.
En paralelo, la advertencia del Pentágono coincide con el creciente debate dentro de la OTAN sobre la sostenibilidad del apoyo a Ucrania a largo plazo, en un contexto marcado por el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y su política exterior más transaccional. Varios aliados europeos observan con cautela el tono de Washington, temiendo que una estrategia de presión sobre Rusia sin garantías diplomáticas claras pueda derivar en una escalada imprevisible en el continente.