Un italiano de 81 años dedica una serenata desde la calle a su esposa hospitalizada por coronavirus
El amor en tiempos de coronavirus[contexto id=»460724″] da lugar a escenas únicas. Stefano Bozzini es un hombre de 81 años que, debido a las restricciones impuestas, no le permitían visitar a su mujer, Carla Sacchi, ingresada de coronavirus en el hospital de Castel San Giovanni, situado en la norteña región italiana de Emilia Romaña. Bozzini, quien no quería dejar de hacer compañía a su esposa, se las ha ingeniado y ha tocado con un acordeón bajo la ventana durante una hora ante los ojos de decenas de personas, que se han asomado para seguir el recital.
Por qué te lo contamos: Bozzini lleva casado con Sacchi desde 1973. El anciano ha explicado a la radio pública italiana que «nunca» habían estado tanto tiempo separados en sus 47 años de matrimonio. «Para nosotros ha sido el primer momento en que estábamos separados y se me cayó el mundo encima. Hubiera hecho cualquier cosa para verla».
Esta historia ha sido relatada por uno de los hijos del italiano, Mauricio, quien ha compartido un vídeo a través del perfil de Facebook de su amigo Valerio Marangon. «Hola Maurizio, lo que has hecho por mamá ha sido un bonito gesto y también muy emocionante. Quiero compartirlo con todos los amigos y publicarlo con inmenso placer».
En el vídeo se puede ver a Bozzini con un suéter rojo, un sombrero de plumas y una mascarilla, sentado al frente del hospital mientras su esposa junto a otras dos personas, lo miran desde arriba. «Como sabéis, no es posible entrar ni siquiera para una visita», continúa la publicación. «Pregunté a algunas enfermeras (gente muy amable) si era posible estar 5-10 minutos en un patio fuera del hospital para tocar 2-3 canciones a mi madre (…). Y así fue».
Bozzini, además, ha denunciado en la radio pública de Italia la soledad a la que están siendo sometidos los más mayores durante la pandemia[contexto id=»460724″]. Una soledad que, como ha relatado, fue especialmente dura en aquellos 10 días en los que ha estado separado de su mujer. Por suerte, Sacchi ya ha sido dada de alta y ahora Bozzini puede volver a dedicarle serenatas desde casa.