Jaime Botín, condenado a 18 meses de prisión y una multa de 52 millones de euros por el contrabando de un Picasso
La multa establecida es el doble de la tasación de la obra que Botín intentó sacar del territorio nacional
El juzgado de lo Penal número 27 de Madrid ha condenado a Jaime Botín a 18 meses de prisión, así como a una multa de 52,4 millones de euros, por intentar sacar de España sin permiso el cuatro de Pablo Picasso Cabeza de mujer joven, según ha informado este jueves el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. En la sentencia, se establece que la propiedad del cuadro sea del Estado, en aplicación del artículo 29 de la Ley de Patrimonio Histórico Español.
La multa establecida es el doble de la tasación de la obra que Botín intentó sacar del territorio nacional, que fue incautada en en 2015 en el barco del condenado en Córcega, Francia. Además, Botín ha sido condenado al pago de las costas procesales, incluidas las de la Abogacía del Estado.
La jueza ha declarado probado que Jaime Botín adquirió en 1977 la obra original de Pablo Picasso ‘Cabeza de mujer joven’, pintada en 1906, y, con ocasión de tenerla en su domicilio de Pozuelo de Alarcón (Madrid), se puso en contacto con la empresa Christie’s para vender el cuadro en una subasta programada para el 6 de febrero de 2013 en Londres.
Además, señala que el personal de Christie’s le informó de que debido a la antigüedad debía pedir autorización al Ministerio de Cultura para su exportación. El director general de Bellas Artes denegó el 19 de diciembre de 2012 la solicitud para la exportación del cuadro, y nueve días más tarde el Ministerio de Cultura declaró su inexportabilidad, todo lo cual fue notificado a Christie’s y al acusado.
«Pese a ser plenamente consciente de la prohibición administrativa, el acusado trasladó el cuadro a la goleta Adix de su propiedad cuando estaba atracada en el puerto de Valencia, con la finalidad de sacarlo de España, dando instrucciones a su capitán para que lo ocultara a las autoridades», narra la jueza.
En noviembre, la subdirectora general de Patrimonio Histórico del Ministerio de Cultura, Elisa Cabo de la Vega, defendió en el juicio que el cuadro que el expresidente de Bankinter intentó vender en Londres y que fue incautado cuando iba a llevarlo en avión a Suiza «pertenece al patrimonio histórico español«. La Fiscalía pedía cuatro años de prisión y una multa de 100 millones de euros.