La sangre de donantes jóvenes puede ser un tratamiento contra el Alzheimer
Un grupo de científicos de la Universidad de Stanford han anunciado los primeros resultados de un novedoso estudio en el que han utilizado la sangre de donantes jóvenes para intentar tratar los síntomas del Alzheimer. El estudio, que se basa en una técnica llamada parabiosis, se está probando en humanos tras haber tenido éxito en ratones.
Un grupo de científicos de la Universidad de Stanford han anunciado los primeros resultados de un novedoso estudio en el que han utilizado la sangre de donantes jóvenes para intentar tratar los síntomas del Alzheimer. El estudio, que se basa en una técnica llamada parabiosis, se está probando en humanos tras haber tenido éxito en ratones.
Los primeros estudios utilizaron la parabiosis en ratones. A través de este proceso, ratones jóvenes y mayores fueron conectados al mismo sistema sanguíneo. Los ratones jóvenes empezaron a mostrar signos de un metabolismo más anciano, así como enfermedades crónicas. En el siguiente estudio, los ratones mayores recibieron transfusiones de sangre de los más jóvenes y comenzaron a mostrar una mejora de la memoria.
Estos resultados llevaron a otro grupo de científicos de la misma universidad a probar este proceso en personas que sufren Alzheimer y se encuentran en las primeras fases. Nueve voluntarios han recibido una transfusión de sangre de un donante joven durante cuatro semanas o una solución de placebo. Seis semanas más tarde, los participantes en el ensayo clínico recibieron una transfusión durante cuatro semanas de plasma o placebo, lo que no recibieran la vez anterior.
Aquellos que recibieron el plasma mostraron mejoras significativas en aspectos relacionados con su independencia, como su habilidad para comprar solos o controlar sus finanzas. El estudio, sin embargo, no ha analizado cambios en las funciones cognitivas como la memoria y en los marcadores del Alzheimer.
Aunque no está claro cómo mejora el plasma de gente joven las habilidades cognitivas de las personas con Alzheimer, la directora de la investigación, Sharon Sha, cree que es posible que esta sangre tenga factores regenerativos y ayude a las células y a los tejidos, incluyendo los del cerebro, a mantenerse jóvenes.
El siguiente paso es replicar estos resultados en un grupo más grande de personas para poder verificar los descubrimientos realizados con este ensayo clínico. Sin embargo, el director de programas científicos en la Asociación del Alzheimer, Keith Fargo, considera que los investigadores deben descubrir qué factores en el plasma joven son los que lo hacen efectivo y crear medicamentos basados en ellos, pues no ve “un futuro en el que la gente coja plasma joven de la estantería para hacerse transfusiones”.