Lenín Moreno traslada el Gobierno de Ecuador de Quito a Guayaquil por las protestas

El Gobierno de Ecuador ha sido evacuado del Palacio presidencial y ha trasladado su sede a Guayaquil debido al recrudecimiento de las protestas con la llegada de miles de manifestantes indígenas a Quito.

El país vive una crisis institucional y política desde que la semana pasada el Gobierno anunció varios recortes y medidas, entre las que se encontraba la anulación del subsidio a los combustibles, que dieron lugar a paros de transporte, huelgas y disturbios en todo Ecuador.

El lunes, las calles del centro histórico de Quito se convirtieron de nuevo en un campo de batalla entre los manifestantes y la Policía. Durante las protestas se produjeron quemas de neumáticos, lanzamientos de piedras y cócteles molotov y se destruyeron numerosas propiedades públicas.

A las protestas, en las que han participado grupos de izquierda, sindicalistas y jóvenes de distintas afiliaciones políticas de la oposición, se han sumado los indígenas que han llegado ya a Quito para sumarse a las protestas convocadas el miércoles junto a otras organizaciones sociales.

Las protestas comenzaron poco después de que fuerzas militares evacuaran el Palacio de Carondelet y trasladaran a Guayaquil al presidente Lenín Moreno.

Desde esa ciudad, el mandatario ha pedido calma y tender la mano a los grupos sociales, a la vez que ha acusado al expresidente Rafael Correa de un «intento de golpe de Estado». Moreno ha calificado de “corruptos” a los correístas y ha dicho que “ellos son quienes están detrás de este intento y están usando e instrumentalizando algunos sectores indígenas, aprovechando su movilización para saquear y destruir a su paso”.

Además, Moreno ha acusado al mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, de querer desestabilizar su Gobierno. “El sátrapa de Maduro ha activado junto con Correa su plan de desestabilización”, ha dicho en un mensaje emitido por radio y televisión desde el puerto de Guayaquil.