Los cepillos de limpieza facial que no puedes obviar en tu rutina de belleza diaria

Hasta hace unos años los aparatos de belleza eran algo exclusivo de los centros de estética. Sin embargo, las firmas especializadas han desarrollado una tecnología más asequible permitiendo que cualquiera podamos disfrutar de los beneficios de estos dispositivos en nuestra propia casa. Unos de los más conocidos y utilizados son los cepillos utilizados para llevar a cabo la limpieza facial.

La limpieza de la piel del rostro es el primer paso en cualquier buena rutina de belleza. Para los dermatólogos, se trata de la fase más importante para mantener una piel sana. Para conseguirlo con nota es necesario utilizar cosméticos de limpieza que se adecuen a nuestro tipo de piel y, sobre todo, ser muy constante, tanto en la rutina de la mañana como en la de la noche. Utilizar un cepillo, ya sea manual o eléctrico, como aliado es una sabia decisión.

Si ya cuentas con los cosméticos de limpieza y desmaquillantes necesarios, ahora es el momento de dar un paso más y hacerte con una de estas herramientas de belleza. Estos cepillos facilitan el trabajo porque la hacen más eficaz y rápida así que estaremos venciendo a la pereza que muchas veces nos lleva a saltarnos la limpieza facial. Además, estos instrumentos no sólo ayudan en la limpieza, también tienen otros objetivos como combatir la grasa, minimizar los poros o reactivar la circulación sanguínea.

Desde THE OBJECTIVE te contamos todas los beneficios de los cepillos de limpieza facial y la mejor manera de utilizarlos para sacar de ellos el máximo rendimiento. Además te ofrecemos las mejores propuestas que puedes encontrar en el mercado para que elijas el que mejor se adapte a tu día a día.

Los cepillos de limpieza facial

Para cuidar la piel del rostro debemos de ser muy constantes en nuestra rutina diaria de limpieza, tonificación y nutrición. La falta de tiempo o la pereza hace que muchas veces caigamos en dos de los grandes errores de los cuidados de belleza: no desmaquillarse o pensar que es suficiente con usar el limpiador y la crema hidratante.

El cepillo facial es un gadget de belleza que no podemos pasar por alto a la hora de llevar a cabo nuestra limpieza facial. Su función es trabajar en las capas más superficiales de la piel y, gracias a movimientos circulares, ir eliminando con total eficacia la suciedad que hayamos acumulado. Además, con el masaje, estaremos reactivando la circulación sanguínea de la zona. Estas funciones darán como resultado la eliminación de las impurezas de la piel y su renovación y reafirmación.

Esta herramienta se puede encontrar eléctrica o manual y es un aliado perfecto para lograr una piel sana e iluminada. La clave de su exfoliación se encuentra en el tipo de cerdas que utilizan estos cepillos. Existen modelos con cerdas más suaves que hacen que hasta las pieles más sensibles puedan utilizar los cepillos de limpieza. Cada piel es diferente y tiene sus necesidades así que, al igual que utilizas una hidratante o un sérum adaptado a tu tipo de piel, también deberás de elegir el cepillo que mejor se adapte a lo que tu rostro necesite.

Los beneficios de una limpieza facial

Según los expertos, el uso de este tipo de cepillos logran una limpieza diez veces más profunda que la habitual que podemos llevar a cabo con nuestras propias manos. Estas herramientas limpian la piel eliminando las toxinas y realizan una exfoliación que hace que los poros estén más limpios y menos visibles. Esto se traduce en una piel más radiante, lisa y luminosa.

Los cepillos no solo realizan una limpieza más profunda sino que también son capaces de purificar la piel y estimular la circulación sanguínea. De esta manera, se prepara la piel de tal manera que conseguiremos que los cosméticos que utilicemos a continuación penetren mucho mejor y sean más efectivos.

Otra de sus ventajas es que no realizan una exfoliación agresiva, sólo arrastran las células muertas que ya están desprendidas. Eso evita que llevemos a cabo una limpieza demasiado fuerte con la que solo conseguiríamos alterar el manto de nuestra piel y volverla más sensible.

Estas herramientas de limpieza van evolucionando con el paso de los años y los de última generación realizan un masaje simultáneo que aportan beneficios extra porque relajan y consiguen reafirmar la piel. Además de aumentar la luminosidad y el brillo, se potencia la regeneración celular que retrasará la aparición de signos de envejecimiento como las arrugas.

Y no podemos terminar de repasar sus ventajas sin hacer mención a su comodidad. El uso de estos dispositivos llevan aproximadamente un minuto. En estos pocos segundos son capaces de eliminar todos los restos de suciedad o grasa de la piel. Además, gracias a sus filamentos, los productos desmaquillantes penetran mejor en los poros logrando facilitar también la tarea de acabar con el maquillaje.

Así debes de utilizarlos

Lo primero que debemos de identificar es si nuestro dispositivo sirve para desmaquillar o no. En el caso de que su finalidad sea solo la de la limpieza, deberemos de retirar primero el maquillaje. Otra de las características en las que fijarnos es si nuestro cepillo se puede usar a diario o no. Aún así, cuando empieces a utilizarlo, lo mejor es hacerlo de manera paulatina para ver cómo reacciona tu piel y que se vaya acostumbrando poco a poco. A pesar de que hay propuestas diseñadas especialmente para pieles sensibles, siempre es mejor prevenir. Además, si sufres de algunas alteraciones como rosácea, dermatitis o acné, es mejor que primero consultes con tu dermatólogo.

Con la piel limpia de maquillaje, lo primero que debemos de hacer es lavar la cara con abundante agua para que el rostro quede húmedo. Además, humedeceros también el cabezal de nuestro cepillo. Después, aplicaremos una pequeña cantidad de nuestro cosmético limpiador en el rostro. ¡Ojo! Estos cepillos se utilizan con productos limpiadores, nunca con exfoliantes.

Los expertos suelen recomendar utilizar el cepillo durante 60 segundos y nunca superar los dos minutos. Durante este tiempo, deberemos de ir repasando las distintas zonas del rostro realizando movimientos circulares. Te recomendamos dividir el rostro en seis áreas y dedicar a cada una de ellas diez segundos. La ruta puede ser una mejilla, la otra mejilla, la nariz, el mentón, y cada una de las mitades de la frente. Existen algunos modelos que cuentan con un temporizador incorporado que te irá avisando cuándo sea el momento de cambiar de zona.

No es necesario presionar, basta con deslizarlo suavemente porque ejercer fuerza no va a mejorar los resultados. Cuando hayas terminado de usarlo, limpia tu cepillo con agua tibia y jabón. Así eliminarás cualquier resto de suciedad que haya podido quedar en él.

Dispositivos eléctricos

Llega el momento de elegir tu cepillo facial y lo primero que tendrás que decidir es si quieres uno eléctrico o manual. Después, tienes que tener en cuenta que estos aparatos son de uso personal. Al igual que un cepillo de dientes o una esponja, no se pueden compartir con más personas. Si quieres compartir, la solución será elegir una propuesta eléctrica que cuente con diferentes cabezales. Además, recuerda tener en cuenta tu tipo de piel para elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.

Natcare es una firma de belleza española que apuesta por la calidad y la elegancia de sus dispositivos.  Nos proponen tres aparatos para la limpieza del rostro que pueden usar hasta la dermis más sensible. Amber y Pearl están creados para limpiar el rostro en profundidad sin dañar la piel. Están elaborados con silicona y cuentan con tres intensidades para ajustarse a las necesidades de cada momento. Además cuentan con Opal que es un limpiador que también funciona como masajeador de la zona ocular, combatiendo la hinchazón y la sequedad del ojo.

Quizás la firma que más rápido asociamos con los cepillos faciales sea Foreo. Su limpiador Luna 3 deja la piel perfecta usándolo un minuto por la mañana y por la noche. Proporciona una limpieza mucho más profunda que la que se obtiene al lavarse la cara con las manos porque es capaz de eliminar también las bacterias presentes en el sudor, la suciedad, la grasa y las células muertas. La superficie de limpieza cuenta con dos tipos diferentes de filamentos que garantizan llegar a todas las zonas del rostro.

Ahora cuenta con un renovado diseño que incluye unas cerdas más largas y suaves y podemos elegir entre 16 niveles diferentes de intensidad. Además, este dispositivo se puede sincronizar con la app de Foreo para elegir masajes personalizados.

Dispositivos manuales

Aunque los cepillos eléctricos sean más cómodos, hay expertos que recomiendan las alternativas manuales porque con ellas se puede ejercer la precisión deseada y es el sistema más natural y sostenible.

Cleansing Face Brush de Kiko Milano es un cepillo suave que ha sido diseñado para ser usado tanto con limpiadores espumosos como con limpiadores cremosos. Gracias a sus cerdas sintéticas y flexibles con discos especiales de silicona, elimina las impurezas y masajea la piel, estimulando la microcirculación y su renovación.

Make A Wish de You Are The Princess es un cepillo dos en uno. Por un lado, tiene unos filamentos de nailon que limpian en profundidad a la vez que hacen un agradable masaje. Por el otro, dispone de un cepillo exfoliante de silicona con filamentos flexibles que limpia en profundidad y elimina los restos de maquillaje.

El limpiador de la línea Pore Cleanser de Belif, de venta en Sephora, es un cepillo que tiene más de 140.000 pelos en su cabezal para eliminar los puntos negros y las células muertas. Se compra junto a un gel con carbón activo, carbón de bambú e ingredientes derivados del coco, que ayudan en la limpieza y exfoliación y reducen la irritación en la piel.

Si quieres perfeccionar tu rutina de limpieza facial, ya sabes cuál es la herramienta que no puede faltar en tu baño.