Por qué me repite el ajo, remedios caseros para que no pase y cuáles son sus propiedades
Desde la antigüedad, se utiliza para tratar una amplia gama de dolencias, desde resfriados hasta enfermedades graves
El ajo, un bulbo compuesto por varios dientes blancos, ha sido utilizado por la humanidad durante miles de años como condimento, remedio natural y elemento cultural. Su aroma y sabor distintivos lo han convertido en un ingrediente esencial en cocinas de todo el mundo, desde la mediterránea hasta la asiática. Sin embargo, también es un alimento que puede provocarnos sensaciones desagradables. Cuando repite el ajo, después de comerlo.
Más allá de su uso culinario, el ajo también ha sido valorado por sus propiedades medicinales. Desde la antigüedad, se ha utilizado para tratar una amplia gama de dolencias, desde resfriados comunes hasta enfermedades más graves. Estudios científicos modernos han confirmado algunas de estas propiedades beneficiosas, revelando que el ajo contiene una serie de compuestos bioactivos que pueden contribuir a la salud y el bienestar.
Sus propiedades
El ajo, esa pequeña maravilla de la naturaleza, esconde en su interior un arsenal de propiedades que lo convierten en un aliado invaluable para la salud.
Antibacterianas y antivirales
- El ajo contiene alicina, un compuesto azufrado que combate eficazmente las bacterias, virus y hongos.
- Es un excelente remedio natural para combatir resfriados, gripes, infecciones de oído y otras infecciones comunes.
Propiedades antiinflamatorias
- La alicina también posee propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación en el cuerpo.
- Esto puede ser beneficioso para una amplia gama de afecciones, como artritis, dolor de articulaciones y enfermedades autoinmunes.
Antioxidantes
- El ajo es rico en antioxidantes, que combaten los radicales libres y protegen las células del daño oxidativo.
- Los antioxidantes del ajo pueden ayudar a prevenir enfermedades crónicas como el cáncer, las enfermedades cardíacas y la enfermedad de Alzheimer.
Anticoagulantes
- El ajo ayuda a fluidificar la sangre y prevenir la formación de coágulos sanguíneos.
- Esto puede ser beneficioso para personas con riesgo de trombosis o accidentes cerebrovasculares.
Propiedades para la salud cardiovascular
- El ajo puede ayudar a reducir el colesterol LDL («malo») y aumentar el colesterol HDL («bueno»).
- También puede ayudar a bajar la presión arterial y mejorar la circulación sanguínea.
Salud digestiva
- El ajo puede ayudar a estimular la digestión y prevenir la acidez estomacal.
- También puede ayudar a combatir las bacterias intestinales dañinas y promover el crecimiento de bacterias beneficiosas.
La salud mental
- Algunos estudios sugieren que el ajo puede tener propiedades antidepresivas y ansiolíticas.
- También puede ayudar a mejorar la memoria y la función cognitiva.
¿Por qué el ajo repite?
Esa sensación incómoda cuando nos repite el sabor del ajo después de comerlo, y los eructos frecuentes que provoca, se deben a dos razones principales:
La alicina
- El ajo contiene un compuesto llamado alicina, que se forma cuando picamos o machacamos los dientes de ajo.
- La alicina es responsable del fuerte aroma y sabor característico del ajo, y también es la causante de que nos repite.
- Una pequeña parte de la alicina también llega al estómago, donde puede irritar el revestimiento y provocar eructos.
Los compuestos de azufre
- El ajo también es rico en otros compuestos de azufre, como el sulfuro de alilo y el metilalilo.
- Estos compuestos también son volátiles, lo que significa que se evaporan fácilmente y pueden llegar a los pulmones, contribuyendo al mal aliento.
- Además, estos compuestos de azufre pueden estimular la producción de ácido estomacal, lo que puede provocar indigestión y eructos. Por eso, el azufre que compone el ajo nos repite.
¿Qué podemos hacer para evitarlo?
Si bien el ajo es un alimento muy saludable, es comprensible que queramos evitar la incómoda sensación de repetición del sabor.
Aquí hay algunos consejos:
- Cocinar el ajo: el calor ayuda a descomponer la alicina, lo que reduce su impacto en el aliento y la digestión.
- Consumir ajo con moderación: cuanto más ajo comamos, más probabilidades hay de que experimentemos estos efectos secundarios.
- Comer otros alimentos con el ajo: algunos alimentos, como el pan, el yogur o la leche, pueden ayudar a neutralizarlo.
- Beber mucha agua: beber agua ayuda a eliminar la alicina del cuerpo y reduce el mal aliento.
- Masticar bien el ajo: ayuda a liberar la alicina de manera más uniforme y reduce su impacto en el estómago.
- Evitar el ajo crudo: si eres especialmente sensible a los efectos del ajo, puedes intentar evitarlo crudo y consumirlo cocinado.
Remedios caseros con ajo
Para el resfriado y la gripe
- Jarabe de ajo: pica 4-5 dientes de ajo y mézclalos con miel. Deja reposar la mezcla durante algunas horas y consume una cucharada varias veces al día.
- Inhalaciones: hierve agua con ajo picado durante unos minutos. Retira del fuego, tapa la olla y respira el vapor durante 5-10 minutos.
Dolor de oído
- Gotas para los oídos: mezcla aceite de oliva tibio con unas gotas de jugo de ajo. Coloca 2-3 gotas en el oído afectado dos veces al día.
Para el acné
- Mascarilla facial: tritura un diente de ajo y mézclalo con yogur natural. Aplica la mezcla en el rostro, deja actuar durante 15-20 minutos y lava con agua tibia.
Hongos en las uñas
- Tratamiento tópico: tritura un diente de ajo y aplícalo sobre la uña afectada. Cubre con un vendaje y deja actuar durante la noche. Repite el proceso diariamente hasta que la infección desaparezca.
Para mejorar la digestión
- Infusion de ajo: hierve agua con un diente de ajo picado durante unos minutos. Cuela la infusión y bébela después de las comidas.
¿Qué beneficios tiene?
Más allá de ser un condimento esencial en la cocina, el ajo se ha ganado un lugar destacado en la medicina tradicional y natural debido a la gran cantidad de compuestos bioactivos que contiene.
A continuación, se presentan algunos de los beneficios más destacados del ajo para la salud:
Refuerza el sistema inmunológico
- El ajo es un potente estimulante del sistema inmunológico gracias a su alto contenido en alicina, un compuesto azufrado con propiedades antibacterianas, antivirales y antifúngicas.
- La alicina ayuda al organismo a combatir infecciones de diversa índole, como resfriados, gripes, infecciones de oído e incluso algunas infecciones más graves.
Protege el corazón
- El ajo ha demostrado ser un aliado para la salud cardiovascular.
- Ayuda a reducir el colesterol LDL («malo») y disminuye la presión arterial.
- Estas propiedades ayudan a prevenir enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y otras afecciones relacionadas con el sistema cardiovascular.