Estos alimentos actúan como protector solar para la piel
Proteger nuestra piel del sol durante todo el año es crucial para mantenerla saludable y prevenir daños a largo plazo
Cuando pensamos en proteger nuestra piel de los dañinos rayos ultravioleta (UV), solemos recurrir a protectores solares o accesorios como gorras o sombreros. Sin embargo, ¿sabías que ciertos alimentos pueden actuar como protectores solares naturales?
¿Qué alimentos son estos?
Según Andrea Crespo, experta en nutrición, estos alimentos, ricos en antioxidantes y otros compuestos beneficiosos, pueden ayudar a proteger nuestra piel desde el interior.
- Tomates: ricos en licopeno, un potente antioxidante que protege la piel contra el daño causado por los rayos UV.
- Pimientos: altos en vitamina C y otros antioxidantes que ayudan a proteger la piel y reducir el daño solar.
- Nueces: ricas en vitamina E, que protege la piel de los daños del sol y mejora su salud general.
- Aguacate: contiene vitamina E y antioxidantes que ayudan a proteger y reparar la piel.
- Moras y cítricos: altos en vitamina C y antioxidantes, que ayudan a reparar el daño de la piel causado por el sol.
- Zanahorias: contienen beta-caroteno, que puede ayudar a proteger la piel del daño UV y mejorar su salud en general.
- Pescados grasos: ricos en ácidos grasos omega-3, que tienen propiedades antiinflamatorias y pueden proteger la piel del daño UV.
- Té verde: contiene catequinas, que poseen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, ayudando a proteger la piel contra los daños UV.
- Chocolate negro: contiene flavonoides que mejoran la protección de la piel contra los daños del sol.
Incorporar estos alimentos en tu dieta diaria no solo puede ayudar a proteger tu piel del daño solar, sino que también contribuirá a su salud general.
No obstante, es fundamental recordar que aunque estos alimentos pueden ofrecer una protección adicional, no sustituyen el uso de protector solar y otras medidas de protección, como usar ropa adecuada y evitar la exposición al sol durante las horas pico.
Platos para combinar estos alimentos
La nutricionista Andrea Crespo aconseja algunas combinaciones con estos alimentos que no solo están ricas en sabor, sino que también mejoran la protección solar:
- Ensalada de espinacas con fresas y nueces: una mezcla de espinacas frescas, fresas en rodajas y nueces, aderezada con un toque de aceite de oliva, proporciona una potente dosis de antioxidantes.
- Salmón a la parrilla con guacamole: disfruta de salmón a la parrilla acompañado de guacamole casero, una combinación rica en ácidos grasos omega-3 y vitamina E.
- Batido de zanahoria y mango: mezcla zanahorias, mango, espinacas y un poco de yogur para obtener un batido nutritivo y protector.
¿Por qué debemos cuidarnos del sol?
Es fundamental proteger tu piel del sol debido a las radiaciones que emite, las cuales pueden ser perjudiciales. Una protección solar inadecuada puede provocar quemaduras solares, manchas, envejecimiento prematuro e incluso cáncer de piel.
Estos son los diferentes tipos de radiaciones solares que afectan a la piel:
- Radiación UV-A: estos rayos ultravioleta de tipo A no son filtrados por la capa de ozono y penetran profundamente en la piel. Son responsables del envejecimiento prematuro, la aparición de manchas y el riesgo de cáncer de piel.
- Radiación UV-B: aunque la capa de ozono filtra alrededor del 90% de estos rayos, el 10% que llega a la superficie tiene más energía que los UV-A, provocando quemaduras, enrojecimiento y también contribuyendo al cáncer de piel.
- Radiación IR-A: la radiación infrarroja de tipo A penetra en las capas más profundas de la piel, afectando su hidratación, generando radicales libres y dañando las fibras de colágeno. Esto acelera el envejecimiento de la piel.
Consejos para una buena protección
Proteger nuestra piel del sol es crucial para mantenerla saludable y prevenir daños a largo plazo. Con la llegada del verano y el aumento de las actividades al aire libre, es más importante que nunca seguir buenas prácticas de protección solar.
- Usa protector solar todo el año: aplícalo siempre que realices actividades al aire libre, incluso en días nublados, ya que las nubes no bloquean completamente la radiación solar.
- Usa gafas de sol homologadas: asegúrate de que las gafas sean aprobadas por la Unión Europea y preferiblemente de tipo envolvente para proteger bien los ojos y la piel circundante.
- No reutilices protector solar del año pasado: los protectores solares pierden efectividad con el tiempo, así que usa uno nuevo cada temporada.
- Evita el sol en las horas pico: limita la exposición entre las 12 y las 16 horas, cuando los rayos solares son más intensos.
- Aplica el protector solar 30 minutos antes: esto permite que el producto penetre en la piel y ofrezca una protección efectiva.
- Reaplica cada dos horas: si te bañas o sudas, vuelve a aplicarlo después de secarte, incluso si no han pasado dos horas.
- No olvides zonas especiales: aplica protector solar en áreas a menudo olvidadas, como labios, orejas y empeine de los pies.
- Elige el fotoprotector adecuado para tu tipo de piel: usa un SPF alto (50+) para pieles claras y uno menor (como SPF 30) para pieles más oscuras.
- Cubre tu cabeza: usa gorra, sombrero o gorro para proteger tu cabeza, rostro y cuello del sol directo.