Cómo ver un eclipse de forma segura sin dañar la vista, según el óptico Juan Almagro

Durante unos minutos, la Luna se interpone entre la Tierra y el Sol, creando un fenómeno que ha fascinado a la humanidad desde tiempos inmemoriales. Antiguas civilizaciones lo interpretaban como señales divinas o presagios de cambios importantes, mientras que en la actualidad, gracias a los avances científicos, comprendemos mejor su origen y efectos. Sin embargo, más allá de su belleza y el interés que despierta, un eclipse solar representa un riesgo considerable para la salud visual si no se toman las precauciones adecuadas. La luz del Sol, incluso cuando está parcialmente cubierta, emite una intensidad que puede dañar de manera irreversible la retina en cuestión de segundos. Por eso, es fundamental conocer los métodos correctos para su observación y evitar cualquier daño ocular.

En este contexto, Juan Almagro Coco, óptico optometrista en Óptica y Audiología Universitaria, nos ofrece información esencial sobre cómo disfrutar de este evento astronómico sin comprometer la salud visual. A lo largo de los años, expertos en oftalmología y astronomía han desarrollado técnicas seguras para contemplar un eclipse sin riesgo, permitiéndonos maravillarnos con este fenómeno sin consecuencias negativas. Pero, ¿qué métodos son realmente seguros? ¿Qué errores comunes deben evitarse?

La importancia de los filtros adecuados

Según Juan Almagro Coco, para ver un eclipse de manera segura es fundamental utilizar filtros solares específicos que cumplan con los estándares de seguridad internacionales. Estos filtros deben cumplir la norma ISO 12312-2, que regula los requisitos para la observación solar segura. Los filtros solares convencionales, como las gafas de sol homologadas, filtran aproximadamente el 99.9% de los rayos UV, lo que es suficiente para la protección diaria, pero no para mirar directamente al sol durante un eclipse. Para una protección efectiva, es necesario un filtro que bloquee el 99.999% de la luz visible y el 99.9% de la radiación UV. Las gafas para eclipses deben ser adquiridas en comercios de confianza y estar certificadas por organismos internacionales de seguridad.

Además, existen filtros especiales para telescopios y binoculares que permiten la observación segura. Estos filtros deben colocarse en la parte frontal del instrumento óptico para bloquear la radiación antes de que entre en el dispositivo, evitando así cualquier riesgo de daño ocular.

¿Qué no hacer al observar un eclipse?

Juan Almagro Coco advierte que es extremadamente peligroso mirar al sol directamente sin la protección adecuada, ya que la intensidad lumínica puede provocar quemaduras en la retina. Este tipo de daño, conocido como retinopatía solar, es irreversible y puede causar pérdida permanente de la visión central. Entre los errores comunes que la gente comete al observar un eclipse, se incluyen:

• Uso de gafas de sol convencionales, que no bloquean la radiación infrarroja ni filtran suficientemente la luz visible intensa.
• Utilización de radiografías, negativos de carrete fotográfico y vidrios ahumados, materiales que no están diseñados para bloquear las longitudes de onda nocivas de la luz solar.
• Mirar el eclipse a través de dispositivos de aumento (telescopios, binoculares o cámaras) sin filtros solares adecuados, lo que amplifica la luz solar y aumenta exponencialmente el riesgo de daño ocular.

Alternativas seguras para la observación

Existen formas seguras de observar un eclipse sin exponer directamente los ojos al sol. Juan Almagro Coco recomienda los siguientes métodos:

1. Cámara estenopeica: un dispositivo casero que permite proyectar la imagen del sol sobre una superficie sin mirarlo directamente. Este método es completamente seguro y fácil de fabricar con materiales simples, como una caja de cartón, papel de aluminio y una hoja blanca.
2. Gafas de eclipse certificadas: estas gafas cumplen con las normativas internacionales y pueden adquirirse en establecimientos especializados. Deben estar homologadas bajo la norma ISO 12312-2 para garantizar su eficacia.
3. Proyección con telescopio o binoculares: en lugar de mirar a través de ellos, se puede proyectar la imagen del sol en una hoja de papel o una superficie blanca para observar el eclipse sin riesgo.
4. Transmisiones en vivo: para quienes prefieren una experiencia segura y detallada, muchas instituciones astronómicas y medios de comunicación transmiten los eclipses en directo, permitiendo ver el fenómeno sin riesgos.