Menta, citronela y melisa: ¡las plantas que alejan a los mosquitos sin químicos!
Tenerlas en casa es una forma sencilla de mejorar tu calidad de vida y evitar las picaduras de estos molestos insectos

La melisa es una planta antimosquitos. | (Canva)
Con la llegada del calor, los mosquitos comienzan a invadir nuestros casas, jardines y terrazas. No solo son molestos, también pueden transmitir enfermedades, lo que convierte su presencia en una amenaza. Sin embargo, recurrir a productos químicos para mantenerlos alejados no siempre es la mejor opción, ya que muchos de estos contienen sustancias tóxicas que afectan la salud, así que, opta por plantas antimosquitos.
Afortunadamente, la naturaleza nos ofrece alternativas eficaces, sostenibles y decorativas. Existen plantas con propiedades repelentes que, gracias a sus aroma, mantienen a los mosquitos a raya sin necesidad de utilizar sprays, espirales o enchufes. Hoy te presentamos tres de las más efectivas, resistentes y fáciles de cuidar: la menta, la citronela y la melisa.

Tres plantas que actúan como antimosquitos
Estas especies no solo embellecen tu hogar, sino que también actúan como barrera natural durante todo el año, ya sea en verano o en invierno.
1. Menta
La menta es mucho más que una planta culinaria o medicinal: es un poderoso repelente natural contra los mosquitos. Los insectos detestan el intenso olor de sus hojas, lo que la convierte en una excelente aliada tanto en interiores como exteriores. Su crecimiento es rápido y expansivo, por lo que conviene mantenerla en macetas o controlar su desarrollo en el jardín para que no invada otras zonas.
Para que sea efectiva, colócala en lugares estratégicos como ventanas, entradas o terrazas, preferiblemente en semisombra. Riégala con regularidad y aprovecha sus hojas no solo para frotarlas y liberar su aroma, sino también para preparar un refrescante té helado con propiedades depurativas.
2. Citronela
La citronela es probablemente la planta más reconocida por su capacidad para repeler mosquitos. Lo hace liberando una molécula de olor cítrico que altera el sistema nervioso de estos insectos, evitando que se acerquen. Este efecto es tan potente que su aceite esencial también se utiliza para calmar picaduras y en numerosos productos naturales para el hogar.
A diferencia de otras plantas, la citronela necesita estar en un lugar soleado para crecer bien. Puedes ubicarla en balcones, patios o en el borde de ventanas orientadas al sur. Aunque requiere riego frecuente, el sustrato debe mantenerse seco, ya que el exceso de agua puede perjudicarla.
3. Melisa
La melisa, también conocida como toronjil, es una planta con múltiples virtudes. Sus hojas desprenden un aroma agradable que resulta insoportable para los mosquitos, lo que la convierte en una defensa natural muy efectiva. Además, sus pequeñas flores blancas añaden un toque decorativo, mientras que sus propiedades medicinales la hacen aún más valiosa: es calmante, diurética y alivia dolores leves.
Para aprovechar al máximo su potencial, coloca la melisa en un lugar bien iluminado pero protegido del sol directo. Es una planta perenne que soporta bien las estaciones frías si se mantiene en condiciones adecuadas, lo que la hace perfecta para combatir a los mosquitos más allá del verano.
Antimosquitos: naturales vs químicos
Los repelentes químicos pueden ser eficaces a corto plazo, pero su uso continuado no está exento de riesgos. Muchos contienen DEET u otros compuestos que, aunque aprobados para uso doméstico, pueden causar irritaciones en la piel, reacciones alérgicas o afectar a niños y mascotas.
En cambio, las plantas antimosquitos ofrecen una solución natural, segura y decorativa. No solo ayudan a repeler insectos de forma continua, también aportan beneficios adicionales: purifican el aire, embellecen los espacios y pueden utilizarse para otros fines, como infusiones o aromaterapia.
Tener plantas antimosquitos en casa es una forma sencilla de mejorar la calidad de vida. No solo actúan como barrera natural frente a los insectos, sino que aportan frescura, bienestar y un toque decorativo a cualquier espacio. La menta, la citronela y la melisa son tres ejemplos perfectos de cómo la naturaleza puede ayudarnos a mantener alejados a los mosquitos de manera efectiva durante todo el año.