¿Cuántas copas de vino o cervezas se pueden tomar a la semana sin poner en riesgo la salud?
Superar unas pocas copas de vino o cervezas a la semana puede poner en riesgo la salud

Alcohol
El consumo de alcohol es una costumbre socialmente aceptada en España, pero la ciencia lleva años advirtiendo de los riesgos incluso en cantidades aparentemente moderadas. Diversos estudios internacionales y organismos de salud coinciden en que no existe un nivel completamente seguro de consumo de alcohol, aunque sí hay límites considerados de bajo riesgo.
Según el Ministerio de Sanidad de España, se entiende por consumo de bajo riesgo aquel que no supera los 20 gramos de alcohol puro al día en hombres (equivalente a unas 2 copas de vino o 2 cañas) y 10 gramos diarios en mujeres (una copa o una cerveza). Beber por encima de esa cantidad —más de 40 gramos diarios en hombres o 20-25 gramos en mujeres— se considera ya un consumo de riesgo. (sanidad.gob.es)
A diferencia de otras recomendaciones internacionales, en España se insiste en que el problema no es solo cuánto se bebe, sino también cómo. Se desaconseja beber a diario y se recomienda dejar al menos dos o tres días sin alcohol a la semana, además de evitar los denominados «atracones de bebida» o binge drinking.
Cuánto es ‘demasiado’ alcohol
A nivel internacional, los datos respaldan estas advertencias. Un estudio publicado en The Lancet concluyó que el riesgo de mortalidad empieza a aumentar a partir de unos 100 gramos de alcohol a la semana, lo que equivale a unas cinco copas de vino o seis cervezas.
Del mismo modo, los Centers for Disease Control and Prevention (CDC) definen el consumo moderado como una bebida al día para mujeres y dos para hombres, superando esos valores de forma habitual se incrementa el riesgo de cáncer, enfermedades hepáticas y cardiovasculares. La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, va incluso más allá: «Ningún nivel de consumo es seguro para nuestra salud».

¿Cuándo saber si tenemos un problema?
De acuerdo con la National Institute on Alcohol Abuse and Alcoholism (NIAAA), se considera consumo excesivo cuando una persona supera los 15 tragos semanales en hombres o 8 en mujeres, o bien de cuatro a cinco copas en una sola ocasión.
En España, estos valores se traducen en más de 280 gramos de alcohol puro a la semana en hombres o más de 140 gramos en mujeres, cifras que duplican el consumo considerado de bajo riesgo. Beber por encima de esos niveles o hacerlo de forma diaria puede indicar un problema de abuso o dependencia.
Además, estudios recientes han detectado que incluso pequeñas cantidades consumidas con mucha frecuencia pueden aumentar el riesgo de cáncer gastrointestinal o enfermedades del corazón.
Así, como vemos, en nuestro país el límite saludable máximo estaría en torno a diez copas de vino o seis pintas de cerveza a la semana para hombres, y la mitad para mujeres, siempre distribuidas en varios días y sin atracones. Si se superan esas cifras, o si el consumo se vuelve necesario para relajarse, dormir o afrontar el día, ya no se trata de una simple costumbre social, sino de un signo de riesgo de dependencia alcohólica. Y como recuerda la OMS, «cuanto menos, mejor». No se trata de prohibir el consumo, sino de entender que incluso una copa de más puede tener consecuencias acumulativas a largo plazo.
