Cómo cuidar el pelo en la playa: los diez errores más comunes que cometes cada verano

Las vacaciones en la playa son buenas para aliviar el estrés y relajarse, pero pueden poner a prueba nuestro pelo. Si cada vez que vuelves a casa notas que tu cabello se encuentra reseco y encrespado, incluso después de haberlo lavado, quizás no lo estás cuidando bien tras haberlo sometido a horas de sol y mar.

El agua salada, la arena y la exposición prolongada al sol dañan y debilitan nuestro cabello. Estos factores lo vuelven más frágil, quebradizo y deshidratado, lo que produce que se rompa más y que aparezcan las puntas abiertas. Además, también puede provocar una pérdida de color y brillo.

Por suerte, para cuidar nuestro pelo no hace falta que renunciemos a los buenos ratos de playa. La solución es llevar a cabo un conjunto de buenos hábitos, una rutina de cuidados especiales y el uso de productos capilares adecuados. Hoy te lo explicamos todo en THE OBJECTIVE para que sepas cómo adaptar el cuidado del pelo a los días de playa y lo hacemos señalando los error más habituales y la mejor manera de corregirlos.

1) Peinar el cabello húmedo

Hay que tener cuidado con desenredar el pelo mojado porque es una de las primeras cosas que no deben de hacerse. Es mucho más recomendable hacerlo cuando el cabello esté seco. «Deja que sea al aire libre y luego ya péinalo. Cuando está mojado la fibra capilar es más frágil y, si pasas el peine, se rompe», nos aclara María García, responsable de experiencia de cliente de la firma de champús Dalire.

Tampoco es recomendable hacerse un moño o una coleta cuando el cabello aún está mojado. El pelo húmedo es más pesado y al recogerlo podemos hacer que el bulbo capilar se debilite y se rompa con más facilidad. Exista la creencia de que tampoco debe hacerse porque el cabello se pudre, pero es una afirmación falsa.

2) No lavar el cabello después del baño

Deberías de saber que después de cada baño en el mar debes de lavar tu pelo con agua dulce en las duchas. Sin embargo, este lavado rápido no es suficiente para proteger el cabello de los daños del sol y la sal. Para preservar su salud hay que ir un paso más allá y lavarlo en profundidad una vez que lleguemos a casa.

Al regresar de la playa, somete al cabello a un lavado a conciencia. De esta manera eliminarás por completo cualquier residuo de arena y sal cuidando tanto el pelo como el cuero cabelludo. De esta manera podrás preservar su brillo natural.

3) El cowashing

Una técnica muy popular en verano es el llamado cowashing que consiste en lavar el pelo utilizando únicamente el acondicionador. Aunque este sistema tiene muchas ventajas, los expertos no lo aconsejan para los momentos de vacaciones en la playa porque no garantiza una limpieza profunda. Hay que pensar que nuestro pelo se enfrenta a nuevas agresiones como la salinidad del agua del mar.

En verano hay que mantener el uso del champú porque el cabello está sometido a un mayor estrés que en otros momentos del año. Después de lavar el cabello y haberlo aclarado bien, puedes seguir haciendo uso del acondicionador sin ningún problema. Otra buena forma de nutrirlo es aportando un extra de hidratación con productos llenos de vitaminas gracias a ingredientes como el aceite de coco, el romero o la ortiga.

4) Usar agua caliente

Para lavar el pelo después de estar al sol lo mejor es utilizar agua tibia. Las altas temperaturas de una ducha caliente lo que producirá será que se abran las cutículas del cabello, haciéndolas más opacas y consiguiendo que el color de la melena esté menos vivo. Además del agua tibia, un buen consejo es que después del lavado normal le terminas dando un último enjuague a tu cabello con agua fría. Verás como el resultado es un pelo con más brillo del que estás acostumbrada.

5) No usar protector solar

Ya sabemos la importancia de proteger la piel de los rayos solares, pero el pelo no puede quedarse en el olvido. Tu melena también necesita de un cuidado especial con un protector térmico. Los más recomendados son aquellas fórmulas en spray que son muy cómodas de usar porque se vaporizan sobre la cabeza y protegen al cabello del daño que puede causar el sol y las altas temperaturas.

Esta película protectora garantiza un cabello más sano y fuerte pero, como con el protector solar para la piel, recuerda reaplicarlo a lo largo de la jornada o después de cada baño. Si además el cosmético contiene keratina, conseguirás un extra de brillo en la melena. Otros ingredientes especiales serán el aceite de coco o la vitamina E que nos ayudarán a nutrir el cabello.

6) Actualizar el color

El cloro de las piscinas, además de otras sustancias que contiene el agua, es perjudicial para los cabellos rubios o teñidos. Estas melenas son muy porosas y absorben estos componentes y adoptan un tono verdoso. Para evitarlo, recuerda siempre aclarar el pelo con agua dulce tras un baño en la piscina y utiliza un protector en crema que actuará como barrera para que estas sustancias no se adhieran al cabello.

Si llevas el cabello teñido y has notado que ha perdido color en tu visita a la playa, es mejor que no lo tiñas de nuevo hasta pasado unos días. El cabello necesita un descanso después del estrés al que es sometido durante el verano y los tintes a base de amoníaco no son lo que mejor les viene en ese momento. «Si no quieres renunciar a ello, opta por el baño de color. Es una técnica mucho más natural y menos invasiva, perfecta para dar un nuevo brillo al cabello»,  aconseja María García.

7) No adaptar tu corte al verano

Lo ideal es sanear la melena antes del verano así que es el momento perfecto para hacerte un cambio de look. Lo mejor es cortar por lo sano y lucir una melena más corta de lo habitual. Un corte más radical aportará frescor y es mucho más cómodo de mantener durante los meses de calor. Sin embargo, podemos meter la pata si nos decidimos por un flequillo justo en esta época. Desde Ananda Ferdi no lo recomiendan porque resultan incómodos a la hora de tomar el sol.

Aprovechando la visita al peluquero, puedes llevar a cabo un tratamiento anti frizz para evitar el encrespamiento habitual en los lugares de costa. La terapia vegana o el tratamiento con flor de mango son algunos ejemplos que eliminan este odiado efecto debido a la humedad del ambiente.

8) Tomar demasiado el sol

La exposición prolongada a los rayos solares puede ser muy perjudicial para nuestro cabello. Los resultados son deshidratación, pérdida de brillo y alteraciones en el color. Al volverse más seco, el pelo está más quebradizo y propenso a romperse o caerse, por eso es tan importante protegerse con un sombrero cuando vayamos a pasar mucho tiempo bajo el sol.

9) No hidratar el cabello

El cabello, como la piel, necesita hidratarse después de tomar el sol. Para hacerlo, los aceites capilares no son una buena opción porque reconstruyen la fibra pero no la hidratan. Es mejor confiar en mascarillas, sobre todo aquellas que entre sus ingredientes cuenten con aminoácidos como el aloe vera o la manteca de karité. Estos componentes, además de hidratar, también trabajan a favor de la nutrición y el brillo de tu melena.

Muchas de las mascarillas hidratantes para el sol que podemos encontrar en el mercado cuentan también con factor de protección contra los rayos solares. Esto nos facilitará más si cabe la tarea de proteger el cabello durante el verano.

Por el contrario, hay otros productos capilares a los que es mejor darles vacaciones. En verano somos más propensos a usar geles, gominas o lacas para peinarnos rápidamente o lograr el efecto wet. Estos cosméticos tienen ingredientes que deshidratan el cabello así que es más recomendable conseguir el mismo resultado estético utilizando otros productos como las mascarillas con protección solar que, todo lo contrario, aportan un extra de hidratación.

10) No cuidar la alimentación

Una dieta sana es uno de los pilares para conseguir tener una melena fuerte y brillante. Para lograrlo, debes de incluir en tu alimentación productos ricos en vitamina C y hierro como son las verduras de hoja verde. Otro de los componentes esenciales es el omega 3 que está presente en el pescado.

Los frutos secos también son muy recomendables por el aporte de zinc y selenio que introducen en el organismo y que son muy beneficiosos para la salud de tu cabello. Además, también resulta importante un buen aporte de calcio que lograremos con la leche y sus derivados como el yogur natural.

Diez errores muy habituales durante los meses de verano que pueden pasarle factura a tu cabello. ¿En cuántos de ellos estabas cayendo sin ser consciente de sus efectos?