Carmen Lomana revela su secreto de belleza: la clásica Nivea azul que todos conocen
En tiempos donde lo nuevo se impone constantemente, rescatar clásicos es una forma de reivindicar una belleza más honesta
Carmen Lomana | Redes sociales
En un momento donde la cosmética avanza a pasos de gigante y proliferan fórmulas exclusivas, ingredientes exóticos y rutinas interminables, sorprende que una de las mujeres más elegantes del panorama español apueste por la sencillez. Carmen Lomana, referente de estilo, empresaria y defensora de la belleza natural, ha revelado recientemente cuál es su secreto mejor guardado para mantener la piel hidratada: una crema de toda la vida que cuesta apenas unos euros, la clásica Nivea de la azul.
Un clásico que resiste al paso del tiempo
Nada de cosmética de autor ni cremas de más de 100 euros por envase. La crema que Lomana usa cada noche para hidratar su piel es la mítica Nivea de lata azul. Esa que muchas recuerdan de la infancia, con su inconfundible aroma y textura densa. Una fórmula creada en 1911 que, sin necesidad de marketing agresivo, ha logrado permanecer en el tiempo por méritos propios. Según ha contado la propia Lomana, siempre lleva un tarro en el bolso y no solo lo utiliza para el rostro. También la aplica en manos, codos, rodillas, labios e incluso para prevenir estrías. Es, como ella misma lo describe, un producto multitasking que nunca le falla. Y aunque tiene acceso a cualquier tratamiento de alta gama, asegura que sigue confiando en esta crema por su eficacia real y su historia.
¿Qué la hace tan especial?
La fórmula de Nivea se basa en una emulsión de agua en aceite, enriquecida con glicerina, pantenol y eucerit, un ingrediente exclusivo desarrollado por Beiersdorf, la firma detrás de la marca. A pesar de su aspecto sencillo, ofrece una hidratación profunda, ideal para pieles secas o maduras, especialmente durante la noche, cuando el rostro necesita regenerarse y recuperarse. Aun sin estar específicamente formulada como crema facial, muchas mujeres, Lomana incluida, la usan como tratamiento nocturno, e incluso como mascarilla intensiva o desmaquillante en situaciones puntuales. Su textura espesa obliga a masajear la piel con lentitud, lo que la convierte en un ritual de autocuidado tan efectivo como relajante.
Tres alternativas igual de eficaces (y asequibles)
Aunque la Nivea azul es todo un clásico, no es la única opción económica y eficaz para quienes buscan una hidratación potente sin gastar una fortuna. Aquí van tres alternativas que también merecen un espacio en el neceser:
- CeraVe Moisturising Cream: recomendada por dermatólogos, esta crema rica en ceramidas y ácido hialurónico es ideal para pieles secas y sensibles. No tiene perfume, se absorbe bien y refuerza la barrera cutánea. Su precio ronda los 10-15 euros y cunde muchísimo.
- Weleda Skin Food: un favorito entre celebrities como Victoria Beckham, esta crema es ultra nutritiva y perfecta como mascarilla nocturna. A base de extractos vegetales y aceites naturales, ofrece una hidratación intensa con un plus de ingredientes orgánicos. Cuesta entre 8 y 12 euros.
- Neutrogena Hydro Boost Gel-Cream: con textura más ligera y alto contenido en ácido hialurónico, esta opción es ideal para quienes buscan frescura y absorción rápida sin renunciar a la hidratación. Funciona muy bien como base nocturna o diurna y se encuentra en farmacias por unos 12 euros.
Belleza sin artificios
El gesto de Carmen Lomana es más que una elección personal. En un mundo dominado por el exceso, ella apuesta por lo sencillo, lo probado y lo funcional. No es nostalgia, es inteligencia cosmética. Y su mensaje es claro: no hace falta gastar fortunas para cuidar la piel con eficacia. En una época marcada por la búsqueda constante de novedades, volver a clásicos como la crema Nivea, o a versiones contemporáneas con el mismo espíritu, es una manera de apostar por una belleza más auténtica, racional y al alcance de todos.