Los talones agrietados del verano serán cosa del pasado gracias a estos cinco consejos
El buen tiempo invita a lucir calzado que deja al descubierto el pie lo que acelera la aparición de grietas, durezas o heridas

Mujer caminando por la playa | Bio Sculpture
Los pies permanecen ocultos durante el año por el uso de zapatos y botas pero, al llegar el buen tiempo, se desnudan y vuelven a respirar. Sin embargo, no todo son ventajas durante el verano. El uso de sandalias y chanclas, unidas a factores como el calor, también producen problemas en los talones como sequedad, rozadoras o la aparición de grietas, callos y ampollas.
Las rozaduras y las grietas son heridas que se producen debido a la fricción de la piel con el calzado y, además, están muy potenciadas por el sudor y el calor. Aunque pueden ser una molestia en cualquier época del año, en verano tienden a acrecentarse por el tipo de calzado que usamos. La piel de los talones está preparada para amortiguar el roce continuo al caminar y por ello llega a ser hasta 50 veces más gruesa que la del rostro. Pero otra de sus diferencias es que es muy pobre en sustancias grasas y, por ello, necesita de cuidados extra para mantener su hidratación.
Si quieres superar este verano sin que las temidas grietas hagan su aparición, desde THE OBJECTIVE te ofrecemos los consejos y cosméticos que necesitas para mantener tus talones hidratados, suaves y flexibles en todo momento. Aunque suelen pertenecer a ese grupo de zonas olvidadas en nuestros tratamientos de belleza, es el momento de prestarles la atención que merecen.
1) Remedios caseros
Uno de los elementos clásicos para el cuidado de los talones es la piedra pómez. Es una habitual en nuestras duchas y no debería de faltar durante los meses de verano. Más allá, también contamos con otros productos y elementos naturales en nuestra despensa para combatir las grietas .

Un buen remedio casero consiste en mezclar limón con agua de rosas y glicerina. A esta mezcla le sumaremos bicarbonato de sodio que funcionara como un perfecto exfoliante natural. Otra mascarilla doméstica es aquella que prepararemos con aceite de oliva virgen extra y aloe vera. Esta mezcla debe permanecer un buen rato en contacto con nuestros talones así que es mejor prepararla por la noche y cubrir los pies con una toalla. Cuando la piel haya absorbido el remedio, la hidratación será completa.
2) Saber elegir el calzado
Ya te habrás dado cuenta que al cambiar del tipo de calzado cuando llega el buen tiempo comienzan a originarse los problemas en nuestros pies. Puedes pensar que la solución es utilizar siempre zapato cerrado, pero la verdad es que tampoco se aconseja que los pies se encuentren siempre apretados y cerrados.

La piel seca se hace más frecuente con el calzado de verano pero no todas las sandalias son iguales. Los peores diseños son aquellos que van abiertos por la parte de atrás ya que dejan la piel al descubierto y se producen las grietas. Una buena opción es alternar diferentes tipos de zapatos y no abusar de ninguno en concreto.
Un capítulo aparte merece el calzado que vayamos a usar para practicar deporte. Si vas a realizar una actividad física en la que se vaya a andar varios kilómetro, es clave utilizar un calzado cerrado y transpirable y nunca olvidarnos de los calcetines. «En los días más calurosos nuestros pies tienden a hincharse y eso, sumado al exceso de sudoración, puede generar dolor o fricción que acabe provocando la aparición de heridas», advierte Vicente Calduch, CEO de Laboratorios Calduch.
3) La alimentación también influye
Parece mentira pero la ingesta de alimentos que tomamos por la boca también tiene su repercusión en la piel de los pies. Comer bien no solo se nota en nuestra silueta o el rostro, hay otras zonas que también necesitan de una correcta alimentación para que la piel esté elástica. Esta dieta aconsejable es rica en ácidos grasos como el aceite oliva virgen extra, los frutos secos, el aguacate, el salmón u otros pescados azules.
También debemos de tener muy presentes las frutas y verduras. Tienen un aporte en vitaminas y minerales como el zinc que son clave para la salud de nuestros pies. Por último, resulta vital tomar el agua suficiente que nuestro cuerpo necesite. En verano hay que extremar este cuidado ya que tendemos a deshidratarnos más debido al calor y el sudor.
4) Recurrir a especialistas
Nunca está de más mimarse un poco y realizarnos un tratamiento de belleza. Los pies, como sucede con el rostro, cuentan también con procesos y masajes que nos pueden sumergir en un profundo relax mientras mejora el aspecto y la salud de la piel. Entre el abanico de posibilidades nos encontramos con propuestas orgánicas que son aquellas que utilizan productos como algas, fango o cítricos. Además de su efecto relajante, las envolturas están formuladas para eliminar toxinas, calmar dolores o favorecer la circulación.

Siempre hay que confiar en los especialistas. Por ello, si tienes algún problema en los pies, acudir al podólogo es clave. Además, asegúrate de comprar los productos para tratarlos en la farmacia o centros especializados. En estos lugares contarás con el consejo profesional del experto que te informará de las opciones más adecuadas para las necesidades de tus pies.
5) Cosmética especial para los pies
Muchas personas recurren a las cremas corporales, e incluso faciales, para tratar problemas en los pies como las grietas de los talones o las durezas. Es un grave error. Tenemos que pensar que la piel no es igual en todas las zonas del cuerpo y los pies sufren numerosas fricciones en el día a día que provocan asperezas o sequedad con asiduidad. Por este motivo, requieren de productos formulados de manera exclusiva para sus necesidades.

Un buen ejemplo lo encontramos en la firma Bio Sculpture que cuenta con Heel Balm, un bálsamo para los talones que es famoso entre los expertos. Está formulado a partir de compuestos orgánicos y extractos de plantas que logran ablandar las callosidades y ayudan a combatir la sequedad. Se puede aplicar generosamente dos veces al día mientras se masajea el talón o la planta del pie para completar su absorción. Además, la firma también cuenta con otros utensilios pensados especialmente para los pies como raspadores, parches para eliminar callos, guantes o limas.
La importancia de un buen bálsamo
Es importante quedarnos con la idea de que para cuidar la piel de los talones es necesario contar con productos específicos. Este tipo de cosméticos cuentan con una base grasa que compensará la falta de hidratación y que crea una película deslizante que impedirá la aparición de rozaduras. Más vale prevenir que curar, por lo que los expertos recomiendan anticiparse y mimar esta piel antes de que aparezcan los problemas. Debes de saber que las áreas que más sufren son los dedos, los talones y los laterales.
Otra buena alternativa para este tipo de cuidados es el bálsamo Dermo Suavina. Cuenta con esa base grasa fundamental y, además, tiene un perfume elaborado con aceites esenciales de plantas y frutas mediterráneas de origen natural, como son la naranja, el limón o la mandarina, junto al mentol. Este agradable aroma cítrico y mentolado aumentará la sensación de frescor en la piel.

Este bálsamo hidratante ayuda a reparar, hidratar y proteger la piel. Aunque son muy conocidas sus ventajas para el cuidado de los labios, tiene otros múltiples usos. Es un aliado perfecto para hidratar las cutículas, lo que protege a la uña de posibles heridas que pueden ser un foco de infecciones. Es una cuestión muy importante en verano cuando los pies están más expuestos y desprotegidos.
También es un remedio muy eficaz para combatir las durezas. Para acabar con ellas, desde el laboratorio nos recomiendan aplicar una generosa capa de bálsamo en las zonas afectadas por la noche y cubrir el pie con calcetines de algodón. En cuanto despiertes la mañana siguiente ya estarás notando la mejoría.