Moda de segunda mano: seis claves a tener en cuenta para acertar con una compra perfecta
Adquirir una pieza de lujo en el mercado de segunda mano puede ser una inversión si no caes en los errores más comunes
Prendas de lujo de segunda mano. | Vestiaire Collective
Comprar artículos de lujo de segunda mano se ha convertido en una de las opciones favoritas en los últimos años. Esta fórmula de comprar prendas y accesorios únicos viene impulsada por las nuevas generaciones y por los prescriptores de moda. Estos dos grupos prefieren dejar de lado las compras impulsivas del fast fashion a favor de invertir en modelos únicos y conseguir diferenciarse con bolsos, cinturones o pañuelos de firmas internacionales.
«El auge de la moda vintage y del culto a los noventa y los dos mil ha traído esta modalidad, muy asentada en países como Francia», detalla el experto en moda Javier Blanco sobre esta tendencia al alza. Una fórmula de comprar que, aunque no es nada nuevo, si que se ha convertido en una alternativa real al alcance de todos y que amenaza con desbancar las ventas tradicionales de ropa de lujo a estrenar.
La compra venta de artículos de segunda mano ha producido una serie de plataformas especializadas en este sector que estén ya muy asentadas. Nombres como Vestiaire Collective, My Theresa o The Real Real ofrecen la posibilidad de comprar piezas de lujo de una manera muy sencilla. Sin embargo, los expertos advierten que hay que saber invertir con cabeza y tener presente una serie de indicaciones para que el artículo que adquiramos no sea una compra más, sino una buena inversión. Desde THE OBJECTIVE te explicamos cuáles son estas claves para que te sientas muy segura a la hora de ampliar la familia de piezas favoritas de tu armario.
Realizar una amplia búsqueda
En este tipo de mercado la oferta es muy amplia por eso es importante que, antes de iniciar la compra, sepamos muy bien qué tipo de producto queremos adquirir. «Si no tenemos claro en qué pieza invertir, es importante hacer una buena búsqueda, aunque lleve tiempo», aconseja Blanco. Aunque sean piezas únicas, no tienen que quedarse con nosotros mucho tiempo. Últimamente se está poniendo de moda en países como Francia o Países Bajos comprar una pieza de segunda mano para ser usada una temporada y luego venderla de nuevo. Se trata de «un modelo circular que puede ser rentable», añade el especialista.
Si no se tiene claro un modelo, lo mejor es confiar en los clásicos porque siempre serán un acierto. Hay algunas piezas que son como un fondo de armario y funcionan siempre independientemente del paso de las temporadas y las tendencias. «Para aquellos que no sean especialmente seguidores de la moda, es la mejor opción», señala Blanco.
¿Cuáles son estos modelos más demandados? Podemos señalar ejemplos como bolsos clásicos de Chanel o Yves Saint Laurent, así como los modelos de Fendi que fueron tendencia en los años noventa. También serán una buena compra unos mocasines de Gucci con detalles bordados en la parte frontal o los emblemáticos abrigos largos de Max Mara.
Invertir en verificación
Aunque son muchas las tiendas de venta y alquiler de artículos de segunda mano que podemos encontrar a pie de calle, las opciones digitales son las más utilizadas. Una de sus principales ventajas es que cuentan con una función que permite crear alertas para ofertas de productos deseados.
El inconveniente de estos portales es que la prenda no se puede examinar en directo. Es aquí donde la confianza cobra importancia. Hay páginas en las que existe una función especial de verificación para que el consumidor tenga la garantía de no estar comprando una falsificación. «Por un precio que, como mucho, llega hasta los treinta euros, las plataformas de reventa cuentan con personal cualificado que se encarga de revisar la pieza en cuestión antes de que se le entregue al comprador», explica el experto.
La propia plataforma es la primera interesada en velar por la autenticidad. Además de ofrecer esta alternativa, es importante fijarse bien en las fotos para ver claramente elementos de los diseños como las etiquetas, el interior o el número de serie. En algunos casos, incluso, se puede llegar a acompañar del ticket o la factura de compra del establecimiento original.
Colores neutros y formatos clásicos
Aunque los accesorios en colores llamativos sean tendencia, los expertos nos señalan que es mejor decantarse por piezas que estén realizadas en tonos neutros. Este tipo de diseños son atemporales y cuesta más que dejen de estar de moda. Además, se pueden amortizar más rápido ya que se utilizan con mayor regularidad.
Si vas a empezar a invertir en este tipo de productos de lujo de segunda mano, fíjate en propuestas en negro o en la paleta de los marrones. «Se llevan hoy, se llevaron hace 40 años y probablemente se sigan llevando dentro de 20», incide el experto.
Otra recomendación es huir de las piezas que sean extremadamente grandes o muy pequeñas. Lo mejor es elegir productos que sean funcionales, aunque no sean la última moda. Un buen ejemplo lo encontramos en los bolsos donde hay que preferir invertir en modelos de tamaño medio, de tipo bandolera o con asa al hombro.
Entre las compras más acertadas en cuestión de ropa, podemos encontrarnos con diseños clásicos que nunca pasen de moda como unos buenos vaqueros, una chaqueta de tweed o una gabardina.
Guía de cuidados
Las prendas de lujo de segunda mano están realizadas en materiales de primera calidad y eso favorece que se preserven en mejor estado a pesar de los años. Los tejidos realizados con materias óptimas o con buenas pieles podrán tener muchas vidas (y distintos propietarios).
Por este motivo, es importante cuidar bien el producto después de comprarlo por si en un futuro quieres ponerlo a la venta. No basta con mimar la pieza, también es clave conservar su caja original y es que de esta manera pierde menos valor porque no se deformará o sufrirá desgastes por el polvo o el sol.
Antes de comprar, hay que fijarse bien en los detalles del producto para comprobar si se ha cuidado con esmero. El uso de una pieza se ve en las esquinas, los pliegues, las correas, las asas o las cremalleras. Son estas zonas claves las que delatan todo. Sin embargo, en ocasiones también es preferible comprar un artículo a muy buen precio y luego reparar la piel. Existen tiendas especializadas que barnizan e hidratan el material dejándolo como nuevo.
Elegir bien la talla
A la hora de realizar cualquier compra, los expertos nos aconsejan comprar la talla que estemos usando en el momento. No caigas en el error de pensar que puedes perder peso y comprar una talla por debajo de la tuya. Además, hay que tener en cuenta que el sistema de tallaje ha variado con el paso de los años así que, si vas a comprar una prenda vintage, quizás no coincida con la talla que estás buscando. Lo mejor en estos casos es recurrir a las medidas ya que los centímetros permanecen inalterables.
Otro buen truco es pedir una foto de la vendedora con la prenda puesta. Pregunta cuáles son sus medidas y así te puede servir de referencia para saber cómo puede quedarte a ti. Cuando se realizan compras online, equivocarte de talla suele ser uno de los errores habituales por lo que es mejor cerciorarse bien antes de tomar una decisión.
La clienta perfecta
En el caso de que estés utilizando una página de reventa como Vinted o Wallapop, recuerda que siempre puedes negociar el precio. Intenta pagar lo mínimo posible pero tampoco seas muy arriesgada ya que puede que otra compradora se te adelante mientras que llevas a cabo la negociación. Para ver cuánto puedes ajustar el precio, fíjate en el tiempo que la pieza lleva a la venta porque, cuanto más tiempo tenga, más fácil será conseguir una buena rebaja. Además, piensa que no pierdes nada por intentarlo.
En este tipo de páginas gana quien sabe realizar una buena búsqueda. Puedes realizar búsquedas preestablecidas con las prendas que sueles comprar y filtros como firmas o tallas. Esta selección te ahorrará mucho tiempo ya que, además, ayudará al algoritmo a mostrarte las piezas que mejor se ajusten a tus intereses.
Otra buena herramienta es seguir a aquellos vendedores que más te gusten. Al tenerlos identificados, descubrirás rápidamente los nuevos artículo que pongan a la venta. Además, si das con una vendedora que tenga tu misma talla, será más fácil que aciertes con tus compras. Tampoco olvides marcar como favoritos aquellas piezas que te han gustado para así enterarte enseguida de si son rebajadas.
Una pieza de segunda mano puede ser una fantástica inversión si sabes guiarte por la razón y seguir estos consejos prácticos.
