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Los mejores destinos para ver tulipanes en abril de 2026 fuera de España

Cada uno de estos lugares ofrece una perspectiva distinta de un fenómeno que sigue fascinando a viajeros de todo el mundo

Los mejores destinos para ver tulipanes en abril de 2026 fuera de España

Tulipanes | Canva pro

Cada abril, cuando el invierno se retira y la luz recupera fuerza, Holanda vuelve a desplegar el espectáculo natural que la ha convertido en uno de los destinos más buscados de la primavera. Aunque aún falte un año, quienes conocen bien este fenómeno saben que los entusiastas de los tulipanes reservan con tanta antelación que planificar ya no es una opción, es casi una norma. Kilómetros de campos se cubren de rojo, rosa, amarillo y violeta, un mosaico vibrante que transforma el paisaje en una pintura realista donde el tulipán es protagonista absoluto.

Cuándo florecen los tulipanes en 2026

La floración depende de la meteorología, pero el momento álgido suele concentrarse entre mediados de abril y los primeros días de mayo. La transición previa también merece atención, porque a finales de marzo empiezan a abrir los narcisos, que tiñen el paisaje de un amarillo profundo, mientras que la primera mitad de abril la ocupan los jacintos, conocidos por su aroma dulce. A partir de mediados de mes llega el estallido cromático definitivo y el país se convierte en una alfombra multicolor. La Semana Santa y las vacaciones de Pascua suelen coincidir con el mejor momento, de modo que reservar con tiempo es esencial si el objetivo es viajar en 2026.

Bollenstreek, la ruta clásica del tulipán

La región más icónica para vivir la experiencia es el Bollenstreek (oeste de los Países Bajos), la llamada región de los bulbos situada entre Leiden, Haarlem y Lisse. Aquí los molinos se alzan junto a los canales, las carreteras avanzan entre campos infinitos y la típica postal holandesa se hace realidad. Su corazón es Keukenhof, el jardín de Europa, un parque que abre solo en primavera y garantiza tulipanes en flor gracias a sus más de siete millones de plantas colocadas una a una. Dentro del recinto se organizan exhibiciones, esculturas florales y rutas temáticas que convierten la visita en un recorrido casi ceremonial pensado para todo tipo de viajeros.

Tulipanes

Quienes prefieran los campos en estado puro pueden recorrer la zona en bicicleta siguiendo las rutas del sistema Knooppunten, un entramado de caminos rurales conectados mediante puntos numerados que permiten trazar itinerarios personalizados. La recomendación de los agricultores es clara, evitar entrar en los campos, ya que un solo paso puede dañar una hilera entera destinada a la exportación, aunque las mejores fotos siguen tomándose desde los caminos sin necesidad de acercarse más.

Noordoostpolder, la cara más auténtica

Más al norte se extiende el Noordoostpolder, una región al lado del mar que se ha convertido en uno de los lugares más impresionantes para contemplar tulipanes sin masificación. Sus más de dos mil hectáreas forman un paisaje casi infinito que cada primavera culmina con el Tulpenfestival. Aunque las fechas de 2026 no están confirmadas, la tradición marca la celebración entre mediados de abril y principios de mayo y todo indica que el patrón se repetirá. Las rutas en coche o bicicleta conducen por plantaciones salpicadas de miradores fotográficos, talleres de floristería y degustaciones locales. Emmeloord actúa como epicentro y conserva la esencia agrícola del país, con granjas familiares, molinos y caminos tranquilos.

Tulipanes

Consejos para organizar tu viaje a los tulipanes en 2026

Planificar con antelación será clave. Reservar vuelos y alojamiento con meses de antelación garantiza acceder a las zonas más cercanas a los campos, como Lisse, Haarlem y Leiden, aunque alojarse en Ámsterdam sigue siendo una alternativa cómoda gracias a sus conexiones ferroviarias. Para moverse por las regiones florales, combinar tren y bicicleta permite evitar atascos, recorrer caminos rurales y disfrutar del paisaje sin prisas, además de respetar los cultivos. La mejor hora para visitar los campos es al amanecer, cuando la luz es suave y hay menos visitantes, y en lugares como Keukenhof conviene llegar a la apertura para recorrer el parque con tranquilidad. Respetar las plantaciones, no cruzar las hileras y elegir las horas adecuadas para fotografiar los tulipanes asegura que la experiencia sea memorable sin dañar las flores.

El clima de abril puede ser variable, por lo que es recomendable llevar ropa ligera de abrigo, chubasquero y calzado cómodo. Los días lluviosos no arruinan la visita: los colores se intensifican y muchos viajeros disfrutan de los campos casi en soledad. Comprar entradas anticipadas para Keukenhof o espacios privados como Tulip Experience Amsterdam y Tulip Barn ayuda a evitar aglomeraciones, mientras que en el Noordoostpolder conviene consultar las actualizaciones de floración para planificar rutas en coche o bicicleta. Explorar pueblos pequeños como Hillegom o Warmond ofrece descansos tranquilos y miradores alternativos, completando un viaje fluido y cómodo que permite vivir la primavera holandesa en todo su esplendor.

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