Centenares de sobrecitos con cannabis cayeron del cielo esta semana en la plaza central de Tel Aviv para regocijo de los alucinados transeúntes, que se precipitaron a recoger el maná. ¿Un milagro?
En contexto: un dron dejó caer centenares de sobrecitos de dos gramos de marihuana en la plaza Rabin, frente a la alcaldía de Tel Aviv. La acción forma parte de una campaña por la legalización de la marihuana impulsada por el Grupo Green Drone (Dron verde), cuyo eslogan es «amor libre».
De acuerdo con el Jerusalem Post, junto antes del lanzamiento, el grupo publicó un mensaje en Telegram, insinuando que llevaría a cabo operación: «Ya es hora, queridos hermanos. ¿Es un pájaro? ¿Un avión? No, es el dron verde que distribuye gratuitamente cannabis desde el cielo».
La policía anunció poco después del incidente que había arrestado a dos sospechosos de unos 30 años, que supuestamente operaban el dron que sobrevoló la plaza Rabin y esparció las bolsas de cannabis.
Pero la marihuana seguirá probablemente cayendo desde el cielo, pues Dron Verde ha anunciado que el proyecto «lluvia de cannabis» proseguirá cada semana en un lugar diferente de Israel, hasta que caiga del cielo un kilo de cannabis en total.
Aunque Israel ha dado luz verde a la exportación de cannabis médico, la producción, la venta, la compra y el consumo de esta droga para uso recreativo sigue estando prohibida.