Los ciudadanos que hayan recibido la pauta completa de la vacunación en Estados Unidos podrán reunirse con otros inmunizados en sitios cerrados y sin mascarilla, según Rochelle Walensky, directora del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), que, aún así, ha aconsejado precaución.
Por qué es importate: todavía existe «un pequeño riesgo» –según el CDC– de que los inmunizados se infecten con la enfermedad y sean asintomáticos o la sufran de manera leve, con lo que podrían transmitir el virus a los que no estén vacunados. Los vacunados también podrán reunirse sin mascarilla con no vacunados si estos no pertenecen a ningún grupo de riesgo y no tendrán que hacer cuarentena o someterse a pruebas aunque hayan estado en contacto con alguien con coronavirus, a no ser que presenten síntomas.
Por «no pertenecer a un grupo de riesgo», el CDC entiende si son menores de 65 años y no padecen alguna enfermedad previa, como cáncer, diabetes o problemas cardíacos. «Si los abuelos están vacunados pueden visitar a su hija y su familia, incluso si estos no han sido vacunados, si la hija y su familia no sufren riesgo de enfermedad (de covid) grave», ha explicado Walensky.
Sin embargo, si se trata de personas no inmunizadas con factores de riesgo de sufrir una COVID-19 grave, los vacunados debería llevar mascarilla, mantener la distancia física y tratar de reunirse con ellas en lugares al aire libre o bien ventilados.
Respecto a los inmunizados que se hayan visto expuestos a alguien con coronavirus, el CDC indica que no hace falta que hagan cuarentena o se sometan a las pruebas, siempre y cuando no presenten síntomas.
Estados Unidos ha autorizado ya el uso de los los sueros de Pfizer, Moderna y Johnson&Johnson: los dos primeros requieren de dos dosis y el tercero de una sola.
Hasta el momento, por lo menos 59 millones de personas han recibido al menos una dosis de alguna de las vacunas, mientras que 31 millones –el 9,2% de la población– está completamente inmunizado frente al coronavirus.