La Delegación del Gobierno en Madrid prohíbe todas las manifestaciones del 8-M por motivos de salud pública
La Delegación del Gobierno en la Comunidad de Madrid ha decidido, tras estudiar todas las propuestas de convocatorias de manifestaciones y concentraciones, prohibir todas las que han sido comunicadas a la Delegación del Gobierno, previstas para el domingo 7 y el lunes 8 de marzo .
Lo más importante: el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco ha afirmado que se han estudiado detalladamente «cada una de las peticiones presentadas», tanto en los recorridos establecidos como en la previsión de asistencia, la duración de las mismas y los lugares de celebración, entre otros detalles. Había más de 65 peticiones para manifestarse con motivo del 8-M en Madrid.
El delegado del Gobierno ha optado por prohibir todas las convocatorias «en un momento en el que la Comunidad de Madrid sigue siendo uno de los territorios de España con mayor índice de contagios, así como de personas hospitalizadas, por encima de la media nacional». La decisión se ha anunciado después de que el pasado miércoles la ministra de Sanidad, Carolina Darias, volviera a hacer un llamamiento a la responsabilidad asegurando que «no ha lugar» a las manifestaciones este año. La Consejería de Sanidad madrileña también había desaconsejado todas las convocatorias sobre las que se le había pedido un informe técnico.
La propia Comisión 8M había convocado cuatro concentraciones de hasta 500 personas en el centro de Madrid para el lunes próximo, entre las seis y las nueve de la tarde, con un «exhaustivo protocolo» para garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad del coronavirus [contexto id=»460724″]. Hace una semana Franco afirmó que no se habían prohibido algunas de las manifestaciones convocadas alegando que cumplían los «parámetros exigibles» en situación de pandemia – aseguraba que la Consejería de Sanidad desaconsejaba concentraciones de más de 500 personas y que se habían comunicado convocatorias con menos gente-.
No obstante, la Consejería de Sanidad respondió que al margen del criterio del número de asistentes a la hora de emitir informes técnicos se tienen en cuenta otros parámetros, como los lugares de celebración, el tiempo que van a durar o la posibilidad de que se junten con otros actos con muchas personas.
La Consejería de Sanidad había evaluado en ese momento cuatro convocatorias remitidas por la Delegación del Gobierno, y en todos los casos había emitido un informe desfavorable a su celebración. Sanidad se quejó de que tras las palabras de Franco, en solo 24 horas se habían recibido 69 peticiones de informes técnicos para manifestaciones entre los días 7 y 9 de marzo, todas de no más de 500 participantes.
Finalmente la Delegación ha seguido el criterio tanto del Ministerio como de la Consejería e independientemente del número de asistentes ha optado por prohibir todas las convocatorias.
Uno de los movimientos que organizaba una de las manifestaciones se ha pronunciado en sus redes sociales: «El derecho a la manifestación es un derecho democrático. Salimos durante los meses más duros de confinamiento a cuidar de nuestras vecinas, salimos a trabajar, salimos a consumir… Pero quieren prohibirnos salir a protestar. El movimiento feminista estará el 8 de marzo».
El derecho a manifestación es un derecho democrático. Salimos durante los meses más duros de confinamiento a cuidar de nuestras vecinas, salimos a trabajar, salimos a consumir…
Pero quieren prohibirnos salir a protestar.
El movimiento feminista estará el 8 de marzo. https://t.co/MahOWWnrf5
— Feminismos Madrid (@FeminismosMad) March 4, 2021
También han afirmado que el 8M lleva años llenando las calles de Madrid y que van a seguir adelante.
https://twitter.com/FeminismosMad/status/1367412231135199234?s=20