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Cuando te conviertes en un meme

¿Qué hace bueno un meme para que sea universal? Que supere las barreras culturales y lingüísticas

Cuando te conviertes en un meme

Belén Esteban. | RRSS

El algoritmo tiene sus misterios que la razón no entiende. Uno de los grandes enigmas es la viralidad y los mecanismos que llevan a un vídeo o a una imagen a reproducirse de manera exponencial, llegando a cualquier rincón del mundo a través de los móviles. ¿Qué hace bueno un meme para que sea universal? Que supere las barreras culturales y lingüísticas, que llegue a las emociones más básicas y, por ende, comunes a todos los seres humanos. Al margen de ese fenómeno universal que provoca la risa, principalmente, destaca otro de índole local que resulta, cuanto menos, curioso: los memes para reírnos con los personajes con cuya imagen se juega y los memes que se ríen de ellos. Para que nos entendamos, poniendo ejemplos muy precisos, los memes de Belén Esteban y los de Terelu Campos.

Cuenta la leyenda que la de Paracuellos tiene un meme para cualquier cosa que nos pase en la vida porque es literalmente una creadora de imágenes conceptuales: solo en Tik Tok hay 8,4 millones de vídeos relacionados con ‘Belén Esteban Memes’, todos ellos nacidos a lo largo de estos años en su camino hacia la popularidad icónica. Belén no solo es un personaje, es un fenómeno sociológico del que ha ocupado incluso la prensa internacional. «Ahora me toca a mí», «No, negativo, no», «Te voy a decir cuatro palabras: vete a la mierda», «Jódete que estoy viva», «Ostras, vais a flipar», «Esta se lo tiene muy subidito, quién se cree que es, ¿Madonna? ¿Lady Gaga?», «¡Págame!», «Cuidao. ¿Y esto es una amenaza? Como lo quieras llamar», «Espero que te cures. ¿Sabes de qué? De la maldad que tú tienes. Sé feliz», «Ni la nombres. ¡Tú no!», «Mira, no te voy a insultar, pero lerda, tú» son algunas de las innumerables frases que han hecho historia, algunas como politono para el móvil y otras («¡Cómo me alegro, tía, de verte ahí!», por ejemplo) ya se han incorporado al acervo popular. Todos ellos tienen a Belén como musa y reafirman el peso de la colaboradora en la cultura pop.

Por el contrario, ha sido el descenso a los infiernos de Terelu el que ha generado su oleada de memes. Posiblemente, todo comenzó con la ya mítica imagen de la presentadora engullendo una porra. Ese fue el germen de toda una batería de momentazos que han servido para ir minando poco a su imagen mientras el respetable se iba cachondeando de ella: cargando el equipaje para viajar con su madre y su hermana como si fueran a mudarse a los Estados Unidos, bebiendo el ‘colacao’ como si no hubiera un mañana, con un desproporcionado copazo de balón celebrando las victorias deportivas delante del televisor, con los rulos puestos mientras fuma y tiene gintonic en la mano, sentada con cara de cabreo mientras sostiene un globo, el ‘orgasmo’ al comerse un perrito caliente…. La relación de Terelu con la comida es digna de estudio, pero está claramente vinculada a la ansiedad. La imagen de la pequeña de las Campos comiendo o bebiendo es un género en sí mismo.

Poco ayuda a Terelu el viaje vital que ha supuesto dejar de hablar de su madre para no parar de hablar de su hija mientras el mundo parece esperar que haga algo por sí misma. Lamentablemente, cuando lo hace es peor. Es inevitable que genere memes cuando nos deja titulares como: «Hago malabarismos para sobrevivir. Tengo una persona de servicio, es el único lujo que me permito». Por mucho que intente justificarlo con un discurso victimista: «Me da miedo sentirme desvalida, estar sola y que me pase algo de salud». Lo que no ha entendido es que cuanta más pena quiera dar, más memes se van a hacer a su costa: hay cierta crueldad en las redes, pero también hay mucha alergia a la impostura, que se lo digan a Nacho Cano, que ha pasado de supuesta víctima de un mangoneo político a imputado por contratación ilegal, dejando por el camino un reguero de memes impagables.

Cuanto mayor era el delirio conspiranoico del compositor, más creativas eran las parodias de su situación. Claro que a Nacho le empezaron a crecer los memes un poco antes, cuando se anunció que iba a construir una pirámide de 30 metros de altura en una parcela del barrio de Hortaleza, en Madrid. Algunos incluso mostraban a Isabel Díaz Ayuso convertida en Cleopatra acudiendo a su inauguración. ¡Cómo pasa el tiempo y qué mal envejecen algunas noticias!



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