Las feministas se quejan a RTVE por defender que atletas trans compitan como mujeres
La Alianza Contra el Borrado de las Mujeres denuncia ante la Defensora de la Audiencia el enfoque «sesgado»

Una pieza emitida en RTVE sobre las pruebas genéticas de sexo, respetuosas y no invasivas, como requisito para participar en las categorías deportivas de las mujeres.
Las feministas de la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres han transmitido una queja a la Defensora de la Audiencia de la RTVE y al Observatorio de Igualdad del ente público por su tratamiento informativo sobre la participación de personas trans en la categoría femenina de atletismo. En concreto, denuncian el «sesgado» modo de informar en las noticias sobre la decisión de la Federación Internacional de Atletismo de realizar pruebas genéticas de sexo, «respetuosas y no invasivas» a juicio de la asociación, para competir como mujeres.
La noticia que ha motivado la queja, que se emitió en el telediario de las 21.00 horas del pasado 28 de marzo, abría con una pregunta y varias aseveraciones que, a juicio de las feministas, eran capciosas. «¿Todas las mujeres atletas pueden competir en la categoría femenina? Esa pregunta, a bote pronto chocante por discriminatoria, tiene respuesta por parte de la Federación Internacional de Atletismo y es un no, no pueden», comenzaba la pieza de la principal cadena de la televisión pública.
«Solo las que superen una prueba genética, exámenes necesarios, dicen, para proteger la competición femenina… Y ponen en el mismo plano a mujeres trans y a mujeres con Diferencias de Desarrollo Sexual como la atleta Caster Semenya o la boxeadora Imane Khelif. Busca en ellas un gen muy particular», continuaba la narración.
En la queja remitida a RTVE, las feministas sostienen que la prueba establecida por la Federación Internacional de Atletismo es «respetuosa y no invasiva» y permite determinar con claridad el sexo de los atletas «para que compitan en la categoría que les corresponde en base a su sexo», lo cual «no es discriminación, es justicia y juego limpio». «Como es sabido, las denominadas mujeres trans son biológicamente varones y no han perdido ninguna de las ventajas competitivas derivadas de un desarrollo con testosterona», abunda la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres.
Además, la nota aclara que Semenya o Khelif «no son mujeres con Diferencias de Desarrollo Sexual», sino que «son hombres con Diferencias de Desarrollo Sexual y producen testosterona a niveles masculinos, totalmente fuera del rango femenino». Por ello, «la mención en la noticia de RTVE a pruebas que ‘buscan un gen muy particular’ es engañosa por lo que sugiere de excepcional: el gen SRY no tiene nada de particular o excepcional. Ubicado en el cromosoma Y, este gen es el principal responsable del desarrollo de las características sexuales masculinas».
«Lo que está en juego, el futuro del deporte femenino, es demasiado importante. Los y las telespectadoras de la televisión pública tienen derecho a escuchar los diferentes puntos de vista, a conocer sin filtros ideológicos de qué se habla cuando se habla de ventajas competitivas, de pruebas genéticas, de protección de las categorías deportivas de las mujeres en base al sexo», añaden las feministas, que demandan a «la radiotelevisión pública una información veraz y no sesgada sobre asuntos que afectan de lleno a los derechos de las mujeres».
Feministas contra RTVE
No se trata de la primera queja que la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres remite a la Defensora de la Audiencia de la RTVE. El pasado mes de febrero denunciaron una intervención de Pablo Iglesias en la que atacó a la feminista Tasia Aránguez por cuestionar la «autodeterminación de género». La asociación se quejó entonces por «los insultos al feminismo y el trato desigual» que recibió su representante, profesora de Filosofía del Derecho en la Universidad de Granada.
En un tenso debate sobre la participación de personas trans en el deporte femenino, Iglesias llamó «gentuza», «tránsfobas», «fascistas» y «nazis» a quienes se oponen, comparando a Tasia Aránguez y Carmen Calvo con Donald Trump. Además, pidió que se use la norma de Irene Montero para censurar a quienes defienden la competición basada en categorías biológicas. Por su parte, la presentadora, Gemma Nierga, reconvino a la feminista pidiéndole que no hablara de «varones biológicos» porque así lo había pedido Samantha Hudson, una activista trans presente en el plató.
Anteriormente, estas feministas contrarias a la teoría queer ya habían enviado quejas a RTVE por referirse a las mujeres como «personas menstruantes» o por colar un robot «no binario» en una serie infantil, entre otras polémicas.