El documental de TV3 crítico con los policías infiltrados es el más visto de los últimos 40 años
Es récord de la temporada y de la historia del programa ’30 Minuts’. A través del 3Cat lo ha visto gente de toda España

Documental 'Infiltrats' de TV3. | CCMA
El documental Infiltrats (Infiltrados), emitido por primera vez el pasado enero en el prime time de TV3, ha batido récords en el 3Cat, la plataforma en streaming de la televisión autonómica. Se trata del documental más visto de la cadena en este año y ha superado incluso a otras producciones de ficción. En los primeros días que estuvo disponible en su portal online obtuvo una acumulación de visualizaciones de más 267.000 reproducciones. Y en este cierre de temporada de junio, la dirección de TV3 ha informado que se ha situado en el documental más visto de la historia del programa 30 minuts «en el entorno digital», con más de 363.000 reproducciones acumuladas. Este programa se empezó a emitir en 1984, lo que supone que ha sido el de mayor audiencia en 41 años.
El gran éxito del documental a través de su plataforma en streaming significa que muchas personas del resto de España interesadas en el caso y que no pudieron ver el documental cuando se emitió por la televisión autonómica lo han podido consumir a través de esta plataforma en streaming de acceso gratuito. El único requisito para acceder en el portal del 3Cat es crear una cuenta personal, mediante el correo electrónico. Sin gastos asociados.
Un documental crítico con la policía
La cadena explica que el documental es una apuesta de TV3 por «el periodismo de investigación como herramienta para generar debate y conciencia social». Como informó THE OBJECTIVE en enero, ni el Ministerio del Interior ni la Comisaría General de Información, de quien dependen estas operaciones, quisieron participar en el documental. Por parte de la policía sí lo hace una portavoz del sindicato Jupol, Laura García.
La producción tiene un tono de denuncia contra estas prácticas de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y lo equiparan con otro caso del Reino Unido en el que la justicia de ese país falló a favor de la activista inglesa Kate Wilson y en contra del Estado británico, y que también aparece en el documental explicando su caso.
«Me ha violado el Estado»
En el documental, los principales afectados de estas infiltraciones relatan las relaciones de amistad y «sexoafectivas» que mantuvieron con los agentes. Clara, una de ellas, denuncia: «Yo considero que me ha violado el Estado. No me habría enrollado nunca con un policía». Esta declaración aparece en los vídeos de promoción que han difundido por las redes sociales, aunque no está íntegra en el documental.
Infiltrats se basa en las investigaciones del digital La Directa, que sirvió para destapar la identidad real de cuatro agentes que salieron de la promoción de policías de 2019 en la academia de Ávila. Su primera labor habría consistido, según la versión del documental, en infiltrarse en movimientos de la izquierda independentista para obtener información. Los cuatro fueron descubiertos por algunas mentiras, tener el geolocalizador activado o errores propios que suscitaron las sospechas de estos activistas de izquierda.
«Hay infiltrados por toda España»
El documental revela detalles inéditos que no habían aparecido en las informaciones periodísticas. Uno de estos momentos es cuando la única agente mujer infiltrada responde a la llamada telefónica de quien había sido su pareja, Òscar Campos, durante los dos últimos años. La policía le asegura que nunca ha querido perjudicarle, que incluso le ha protegido, y le asegura que «hay infiltrados por toda España, en Salamanca, Málaga, Granada…». «Lo quieres asociar todo al independentismo y no», remacha.
Campos, miembro de asociaciones independentistas de Salt, en Gerona, acaba colgando el teléfono. Enfadado, relata ante las cámaras que se ha sentido engañado y manipulado por una persona con quien hizo «planes de futuro».
Los especialistas que figuran en el reportaje sostienen que estas infiltraciones han acarreado a los afectados consecuencias psicológicas, y se habla de maltrato y tortura. De hecho, las querellas presentadas ante los juzgados consideran que estas presuntas infiltraciones constituyen los delitos de tortura, contra la integridad moral, de lesiones y de descubrimiento y revelación de secretos.
Además de este caso de policías infiltrados en varios movimientos sociales y de la izquierda independentista, otros dos de los documentales más vistos de septiembre a junio han sido Murs de silenci. Gran escala 2000, que narra la investigación sobre la trama de explotación sexual de menores el 1992 en un club del Alto Ampurdán, con 135.000 reproducciones. Y Los héroes de Vandellòs I que explica el incidente nuclear en Vandellòs de 1989, con 112.179 reproducciones.