The Objective
El purgatorio

Vito Quiles: «Yo no soy ningún activista: soy periodista y estoy en contra del acoso»

El polémico reportero se abre en ‘El purgatorio’ a hablar de periodismo, política, Alvise Pérez o su relación con Rufián

Una de las reglas de este antiguo oficio de contar noticias es que la persona que las transmite no se convierta en noticia. Pero ya saben que el mundo ha cambiado: tantas reglas han volado por los aires que ahora hay informadores que son objeto de noticia y, más aún, de debates encendidos. Vito Quiles (Elche, 2000) es noticia, y lo viene siendo desde hace tiempo. Este reportero, que bien podría recordar a los chicos del mítico Caiga Quien Caiga —en una mezcla de preguntas razonables y momentos de puro entretenimiento—, es alguien que genera debate. Por tipos como él, nadie lo oculta, el Congreso ha reformado su reglamento. Y con él, jovencísimo y muy polémico, hablamos de periodismo, activismo, política, Alvise Pérez, su relación con Rufián o las preguntas no formuladas a la oposición.

PREGUNTA: ¿Qué tal el verano?

RESPUESTA: Pues bastante bien, la verdad. Y me ha dado tiempo a hacer muchas cosas. Lo he disfrutado un montón y he aprovechado para descansar, que era algo que necesitaba bastante.

P: ¿Has salido de España o solamente turismo nacional?

R: Sí, turismo nacional. Además, me he dado cuenta de que no hace falta salir de España para apreciar la diversidad y la maravilla que es el país que tenemos. He disfrutado un montón. Cada día me siento más patriota, porque la gente identifica el patriotismo con un concepto ideológico, yo también lo identifico como el amor a tu país en general y el amor y la admiración a su entorno natural, a todo lo que es su gente. Me lo he pasado de maravilla, la verdad. Y España es que es el mejor destino para mí.

P: ¿Te ha dado tiempo a leer algún libro que otro, ver películas, series…?

R: Pues no mucho. Alguna serie de Netflix igual he visto, pero incluso repetidas, porque no soy muy de innovar. Si me gusta algo, igual hasta la repito, si me aburro. Pero como estaba tan entretenido de viaje, en la playa, con los amigos… He de reconocer que no es algo que hable muy bien de mí, pero joder, he invertido más tiempo en beber cerveza que en leer.

P: Si tienes que beber algo, ¿qué bebes?

R: Whisky. Depende del momento o depende de la persona con la que esté disfrutando de ese whisky. Pero normalmente con Coca Cola.

P: He visto que ni siquiera en verano has dejado de protagonizar momentos que han salido en prensa, en discotecas…

R: Es que tampoco me da la vida para leerlo todo. A veces me busco en Google a ver qué he liado últimamente. Porque hay veces que crees que no has hecho nada y de repente has hecho algo. La verdad es que me fascina. Entiendo que también, cuando no hay noticias en verano, que sobre todo es un periodo bastante agrio para los medios de comunicación, porque la clase política descansa también, entiendo que lo que han hecho ha sido en vez de tener noticias, fabricarlas, y me han sacado ahí por todos lados.

P: ¿Qué es lo que más te ha dicho la gente cuando te ve por la calle?

R: Cuándo sale tu entrevista con Carlos Padilla. No, es broma. Noto mucho cariño. Tampoco me gusta hablar mucho de esto porque entiendo que hay gente que obviamente está en el lado correcto. La verdad, noto que hay bastante sintonía entre la generación Z, la nuestra, incluso los jóvenes o las venideras en relación con lo que yo hago, con lo que yo defiendo, con mi forma de trabajar, con mi forma de ser. Noto bastante apoyo y la verdad es que realmente la gran mayoría de las veces me encuentro con mucha simpatía.

P: ¿Y cuando te dicen algo que no es de tu agrado, qué te suelen decir? No me creo que toda la gente que te pare te diga cosas elogiosas.

R: Alguna vez, pero muy pocos momentos. Muy rara vez. O sea, a veces en fiestas multitudinarias, en las Fallas de Valencia, por ejemplo. Siempre es el calificativo más ideológico: fascista o facha, o reproducen bulos que han escuchado de ti en algún pseudomedio de izquierdas y te dicen agitador o mentiroso. Yo creo que al final las personas que saben quién eres o que te pueden ubicar, si piensan algo malo sobre ti, no lo dicen. Simplemente no te saludan, pero bueno, algo hay.

P: Siempre preguntamos en este prólogo por la relación con la fe de los invitados. ¿Tú eres un hombre creyente?

R: Soy un hombre creyente. Se podría decir que sí. No practico mucho últimamente. Cuando era pequeño, más. Estudié en el Opus, y en el colegio me hacían ir a misa. Pero en general, soy creyente. Me gustaría ir más a misa.

P: ¿Hay San Vito o no hay santoral?

R: Sí, sí. Yo creo que es en junio. El 14 puede ser. San Vito mártir. Lo escuché alguna vez, pero bueno, tampoco es que lo celebre con gran efusividad.

P: Vito no es el nombre cortado, es un nombre total.

R: Es total y absoluto.

P: No es Vitorino.

R: No, no, no. Es Vito a secas.

P: Y Vito, porque tú tienes familia italiana.

R: Mi padre es italiano. Tengo familia paterna italiana y de Buenos Aires. Pero sí, mi padre es italiano y mi madre es española, de Alicante.

«La buena fama es positiva y la mala me da igual. Disfruto mucho, la verdad»

P: De raíces casi inmigrantes, diríamos. Vinieron de fuera, ¿no?

R: Sí, pero mi madre no.

P: Me refiero a tu familia paterna.

R: Se podría decir.

P: ¿Cómo llevas tú lo de la fama? Porque intuyo que no te desagrada demasiado.

R: Bueno, en cierta parte, la buena fama es positiva y la mala me da igual. Disfruto mucho, la verdad. En general, sí, porque al final el trabajo este que yo desempeño tiene sus cosas negativas. Tiene muchas, porque al final está sometido a mucha presión. Luego los compañeros realmente no existen y los que existen te atacan o te intentan hostigar de alguna forma. O sea, realmente no hay mucha familiaridad y sobre todo en esta profesión. Lo que noto mucho es que tampoco hay mucho corporativismo, por así decirlo. Cuando realmente te das cuenta de que te has creado una comunidad digital donde la gente coincide contigo, te apoya y, como te decía anteriormente, te reconoce tu labor, yo lo disfruto. Hay gente que dice: «¿Y tú no te agobias?». Digo: «Qué va, porque para mí es la parte positiva». Estoy sometido a mucho estrés de lunes a jueves o viernes, bastante gente atacándome incluso del propio gobierno, ya no es un usuario de Twitter random ni nada de eso. Luego notas el afecto y te gusta. Y además, me siento bastante bien en ese entorno.

P: Dices en tu encabezado de X: periodista a secas, nada más. ¿Todo lo que haces lo consideras periodismo?

R: La gran mayoría de cosas, sí. Tienen mucho que ver con el periodismo, pero no con la concepción que se tiene hoy en día del periodismo. Desgraciadamente, determinadas personas o medios de comunicación han querido hacernos entender que el periodismo era otra cosa, que yo lo considero seguidismo del Gobierno, pero en general hago muchas cosas relacionadas con el periodismo. Otras no, y además lo reconozco. Y tampoco he querido dar ninguna masterclass de periodismo ni ejercer el periodismo al pie de la letra, como de manual. De lo que soy consciente es de que estoy reivindicando una batalla cultural, una guerra más ideológica, más mediática.

P: ¿Tú dirías que más que periodista eres activista?

R: No, eso tampoco.

P: Cuando hablas de la batalla cultural…

R: Sí, pero yo considero que un periodista puede desempeñar un ejercicio escrupuloso e inmaculado del periodismo, como es el ejercicio que yo de alguna forma desempeño de forma objetiva en las salas de prensa del Congreso, donde pregunto siempre con mucha educación, con mucho respeto, con mucha tranquilidad, sin connotaciones ideológicas la mayoría de veces, porque simplemente expongo ciertas contradicciones que quedan bastante en evidencia. Pero luego, oye, también puedes tener tu parte fuera de ese entorno parlamentario un poco más subjetiva o más connotativa, más ideológica… Es por lo que digo que también desempeño esos dos modelos de periodismo, pero son compatibles en cierta parte.

Vito Quiles. | Víctor Ubiña

P: Te he escuchado hablar del nosotros frente al ellos. ¿Quiénes son esos nosotros y quiénes son ellos?

R: Desgraciadamente, el país se ha polarizado mucho desde la llegada de ciertos sectores extremistas al Gobierno y desde incluso ese afán que tiene Pedro Sánchez por dividir a la sociedad entre el lado correcto, que se podría entender como sus familiares y su gente más cercana, y los del PSOE, y luego los fachas, etc. Considero un ‘nosotros’ adecuándonos un poco a esa diferenciación que hace la izquierda de dos bandos, del bando que realmente no se resigna a sucumbir a las políticas, la gran mayoría nefastas, y el bando un poco más activo, sobre todo joven, más esperanzador, más patriótico, el que ha encabezado movimientos o pequeñas revoluciones como la de Ferraz. Ese tipo de comunidad con la que yo me siento muy identificado, sobre todo porque al final me considero que también soy un chaval joven y la gente que me apoya y a la que yo considero que es afín a mí ideológicamente la tengo como un equipo. Realmente lo siento así.

P: ¿A ti te preocupa la polarización en España?

R: Sí, hombre, me tiene que preocupar. Me preocupa porque de alguna forma yo tampoco quiero que escale la polarización. Es verdad que si asciende a cierto punto en el que ya se llega a emplear incluso la violencia, como está sucediendo en las calles últimamente… A mí me gustaría que no se increpara a nadie. Evidentemente me preocupa, no me gusta, pero es algo que asumo. No es algo que yo quiera erradicar de un plumazo, es algo que han traído, que han generado y si están dispuestos a jugar en ese terreno, pues yo lo acepto.

P: ¿Pero uno puede estar dispuesto a contribuir a la polarización cuando se habla de nosotros frente a ellos, cuando se plantea también esa esa distinción entre ciudadanos, entre periodistas?

R: Sí, yo estoy entrando en ese juego. Se puede entender así, pero tampoco estoy firmemente concienciado en erradicar la polarización. Al final, es un punto al que hemos llegado porque han confluido muchas vertientes y ha remado más, por ejemplo, la izquierda de este país, a que la sociedad esté tan polarizada. Simplemente juego sus cartas. Es decir, hay un nosotros y ellos porque el PSOE, porque Podemos, porque Pablo Iglesias distinguieron entre dos bandos en España, entre empresarios y trabajadores, entre mujeres y hombres, y están constantemente llevándonos al enfrentamiento. Es un marco de juego sin más.

P: Estás en contra de los escraches a los políticos, pero después he visto que has retuiteado un vídeo donde un señor se acerca a Ábalos y le dice: «¿Te gustan las putas?». Que si uno está en contra del acoso de la gente, de los políticos en la calle, debería estar en contra también de eso.

R: Yo estoy en contra del acoso. Jamás un periodista o un comunicador debería emplearlo, porque se infringe y se transgreden todas las normas de periodismo y de lo que es una buena comunicación profesional. Pero entiendo a ese señor. Está viendo de frente a una persona que también le ha robado a él, que ha utilizado sus impuestos para gastárselo en prostitutas, en vicios, en placeres de la vida cobrando sueldo público y, es más, llevando un estilo de vida muy superior al de la gran mayoría los ciudadanos españoles, simplemente porque se estaba aprovechando del dinero público, estaba robando, se está corrompiendo profundamente. Entiendo que ese señor debe estar mosqueado. Estoy en contra de que ese acoso lo lleven a cabo políticos o lo lleven a cabo periodistas, o se lancen campañas. Es libre de hacer lo político o lo que quiera. Para eso cobra un sueldo público también, para someterse al escarnio de la ciudadanía.

«Veo mejores periodistas en el bando crítico con el Gobierno, pero simplemente porque Pedro Sánchez es quien gobierna»

P: ¿Consideras que solo hay buenos periodistas en la derecha? ¿Hay buenos periodistas de izquierda?

R: Hay realmente buenos periodistas a secas. Ni de derechas ni de izquierdas.

P: No somos tontos. Hay afinidades políticas, ideologías..

R: Periodista de derechas es como un término muy vago. Los considero más críticos con el Gobierno, otros menos, otros igual más progresistas, pero periodista de derecha y periodista de izquierdas… ¿Tú qué serías, por ejemplo?

P: No lo sé. Centro centrado.

R: No conozco muchos. Pero la gran mayoría de periodistas, que yo considero que son periodistas, son periodistas formidables, incluso critican a ambos bandos. Pero no sé, yo es que como no simpatizo con ninguno que defienda a este Gobierno, porque realmente están muy alejados y distorsionados de la realidad social y política. Es complicado. Veo mejores periodistas en el bando crítico con el Gobierno, pero simplemente porque Pedro Sánchez es quien gobierna. Un buen periodista fiscaliza al poder.

Vito Quiles. | Víctor Ubiña

P: En eso estamos de acuerdo. El buen periodista fiscaliza al poder y el poder mayoritario en este país lo tiene Pedro Sánchez. Una de las críticas que se te hace a ti es esto de que nunca haces preguntas incómodas a miembros del Partido Popular o a miembros de Vox. ¿Tú a esto qué respondes?

R: Pues respondo simplemente que me apena que se critique tanto a ciertos medios de comunicación. La Sexta, El Plural, La Marea, Mediaset, Atresmedia… por qué nadie nunca va a preguntarle a Rufián por los 18 meses que dijo que se iba a quedar en el Congreso y lleva ya diez años. Decían no, es que solo le pregunta a un lado y un buen periodista pregunta a todos por igual. Bueno, ¿y quién hay así? De mis compañeros no hay nadie. Sí he visto a un distinguido locutor de radio o algún presentador de noticias, pero en general, dentro de mi esfera, es que no hay nadie que haga eso.

P: Si el día de mañana Alberto Núñez Feijóo es presidente del Gobierno, ¿lo harías con miembros del Partido Popular?

R: Sí, lo podría llegar a hacer si me pareciera de alguna forma que han incumplido sus promesas o han llegado a cometer ciertas fechorías, por así decirlo, al mismo nivel que el Partido Socialista o que yo considerara que fueran graves y susceptibles de debate y de alguna forma hacer ese desmentido. Sí, lo haría. Pero sobre todo la gente me dice: «¿Qué harás?». Porque me lo preguntó Rufián, pero seguiría yendo a por la oposición.

P: Pero entonces incumples lo que estás diciendo.

R: Si yo veo contradicciones dentro del Gobierno del PP, lo haría y les interrogaría también, pero también dedicaría mucho tiempo a seguir fiscalizando y controlando a la oposición. Me parece que es muy peligroso el Partido Socialista actual.

«Me han hecho protagonista y no sé por qué. Yo nunca lo busqué»

P: Cuando mencionabas a Rufián, uno de los de la serie de capítulos más virales que ha tenido la temporada política pasada han sido esta serie de encuentros. ¿Cómo se empezaron a dar estos encuentros con Rufián?

R: Es entretenimiento y está bien. O sea, no es malo el entretenimiento, es positivo. Además, contribuye precisamente a lo que comentaba anteriormente, que es frenar esa polarización política. Un poquito de entretenimiento, no siempre agresión, peleas, tensión en plena calle, lanzamiento de micro… Está bien y es sano, es saludable. De todas formas, no lo elijo yo. Pongo el micrófono a un entrevistado y no le pregunto por cuál es su equipo de fútbol favorito. Me lo dice él. Pero yo le pregunto realmente por qué, por ejemplo, los españoles tienen que ver cómo, de alguna forma, en Cataluña se están adoptando ciertos privilegios para los condenados por el procés que no se adoptan en otras partes de España o algunas desigualdades, pero el debate lo decide él.

P: ¿A ti te han hecho famoso tus enemigos?

R: Bueno, se podría decir.

P: Después de haberos convertido en esta cosa cómica, un dúo cómico que en redes sociales lo ha petado y ambos lo sabéis… Pero si de repente a toda la gente a la que le has preguntado, a Patxi López o a otra gente en la calle, hubiera respondido de ese modo, tú serías mucho menos famoso de lo que eres.

R: Concuerdo. Y no sé si alguien de aquí, de esta casa, me lo comentó una vez hablando. Me dijo que realmente los periodistas no debemos buscar ser los protagonistas cuando hacemos este trabajo. Estoy totalmente de acuerdo. Pero yo siempre digo lo mismo, me han hecho protagonista y no sé por qué. Al final fueron ellos. Yo nunca busqué ser el protagonista. Si me hubieran respondido con educación… Lo que entiendo es que a lo mejor lo han hecho porque no saben responder o se les atragantan las formas o la capacidad que tienen para reaccionar o no saben.

P: ¿Tú te arrepientes de algo que hayas hecho en tu carrera periodística?

R: Sí, de algunas cosas, seguramente. De algunas cosas me puedo arrepentir. Algunos trabajos igual, cuando a lo mejor no estaba tan preparado, cuando estaba empezando. Algunas formas de proceder igual, pero tampoco te podría identificar una concreta de algo que yo me arrepienta que haya hecho.

P: ¿Cuál es tu relación con Alvise Pérez? Fuiste número 57 de la lista de Se acabó la fiesta en las elecciones al Parlamento Europeo.

R: Es una relación personal y de amistad. No es una relación ni contractual, ni laboral, ni profesional.

P: Tú no cobras nada.

R: No, qué va. Cuando se presentó a las elecciones, le respaldé públicamente porque es un amigo, es una persona cercana y es alguien que tiene una buena intención, unas buenas ideas y que comparte muchas cosas conmigo. Y no me importa en absoluto apoyarle públicamente. Incluso realmente la integración en la lista es más por una cuestión de promocionar el partido o de simbolizar esa unión.

P: ¿Es compatible estar en una lista electoral y a la vez estar ejerciendo de periodista? Porque es verdad que se ha dado el caso de periodistas que han estado en política, después vuelven al periodismo y no hacen una transición como jueces que son ministros y de repente vuelven a ser jueces y no ha pasado nada. Del PSOE, del PP. En ese caso, tú eras periodista en el Congreso de los Diputados y periodista en tu labor profesional, pero a la vez también estabas en una lista electoral.

R: No coincidió, no estaba ejerciendo el periodismo en ese momento. Lo que sí te digo es eso, que contrasta con la labor del periodista. Pero en aquel momento, igual lo interpreté mal, no sé. Yo veía que una agrupación de electores, que no era un partido con representación parlamentaria. Luego, después, cuando decidí seguir haciendo mi trabajo periodístico, pues ya no formé parte.

«¿Qué es falta de respeto a un político? ¿Recordarle sus pactos con los herederos del terrorismo?»

P: ¿Tú descartas ser político en un futuro?

R: No. A día de hoy, no lo podría descartar.

P: Si Alvise Pérez quiere que su agrupación de electores pase a ser partido político y se presenta a unas elecciones generales en España y te llama, ¿es posible que dijeras que sí?

R: Lo tendría que pensar mucho porque es que realmente ahora me siento cómodo con lo que estoy haciendo. Evidentemente, no voy a esconder que tengo simpatía con algunos de sus postulados, de algunas cosas que defiende, pero tendría que pensarlo mucho, mucho más de lo que pensé aquella vez mi inclusión en la lista de las europeas.

P: Que veo que fue un error para ti.

R: No tanto como un error, pero simplemente se ha utilizado mucho para atacarme. Además, muy injustamente, yo creo. Igual, no fue muy astuto por mi parte darles esa baza a mis críticos.

«Yo no me saltaría el turno de palabra en el Congreso si alguna vez me la dieran»

P: La famosa reforma del Congreso que se aprobó el 31 de julio, que ahora es una resolución de la Mesa del Congreso, va a desarrollar un régimen sancionador con las infracciones leves, graves, muy graves. He buscado y el nombre de Vito Quiles no sale en el BOE, pero es cierto que ha motivado esta reforma. Tú, de momento, no estás expulsado del Congreso.

R: No. A ver, el tema es que es muy interpretable. Ese es el problema. Sabes que ellos consideran, por ejemplo, una infracción el hecho de que tú te saltes el turno de preguntas. Entonces, claro, no puedo seguir preguntando porque el turno no me lo dan nunca. Yo no me lo saltaría si me dieran la palabra, pero no me la dan, entonces yo entiendo que en la sede de la soberanía no se puede tolerar un veto tan selectivo y tan abyecto. Luego, por ejemplo, faltar el respeto a un político o algo así. ¿Qué es falta de respeto a un político? ¿Recordarle sus pactos con los herederos del terrorismo? ¿Hablar de la corrupción que se le está imputando por parte de una juez? Van a hacer lo que les salga de ahí.

P: Te parece cortesía con algunas compañeras, por ejemplo, decir y no lo has dicho tú, lo ha dicho tu compañero Bertrand Ndongo sobre Marta Monforte: «Pájaras como tú con las rodilleras y mamándosela a los políticos sois un cáncer para este país». Este mensaje luego lo borró, pero este no está borrado para la periodista Silvia Intxaurrondo: «Tanto tiempo de rodillas tiene estas cosas: hematomas e inflamación». ¿Esto es educación?

R: Me parece muy mal que me estés reproduciendo lo que dijo Patxi López desde la tribuna del Congreso para defender y avalar que se nos expulsara. Se te ve el plumero, don Carlos.

Vito Quiles. | Víctor Ubiña

P: No lo sé. A mí esto me parece lamentable.

R: Es broma. No, a mí me parece muy bestia. No tiene justificación de verdad. A mí me da vergüenza. Me parece que es un tono que no se debe emplear nunca.

P: Te lo digo porque tú tienes cercanía con él. Yo lo conozco. Le puedo mandar un whatsapp.

R: Pero es que luego esas cosas se utilizan para cargar contra mí. Entonces a mí me molesta eso porque yo no soy así. Yo no digo que Bertrand sea una mala persona, pero hombre, tiene salidas de tono que a mí me parece que no son tolerables en el ámbito profesional en el que aspiramos a movernos y a trabajar. Entonces, bueno, que se utilice esto contra mí cuando yo nunca he tenido una de esas salidas de tono, me parece injusto. Y la gente -como hacemos cosas parecidas a veces, no siempre, pero alguna vez, porque al final él también está ahí, como metido un poco- dice: son amigos. Bueno, esa es una deducción que haces tú. O sea, yo tampoco comparto con él todo el día el vídeo tomando cervezas. Lo que pasa es que la gente no sé por qué nos mete en el mismo saco. Yo creo que les interesa.

P: Yo esto no lo he dicho nunca, que seáis iguales él y tú.

R: Pero se utiliza. Le viene bien a Patxi López o al PSOE. Por ejemplo, el día que votaron la reforma, me di cuenta de algo que me sorprendió mucho es que se me nombraba, pero no se hablaba de mí. Entonces yo lo que veo es que utilizan lo que dicen otros para atacarme a mí, porque realmente no pueden o no tienen nada sobre mí para atacarme realmente a mí, porque como yo mi labor que hago es lo más profesional posible, de verdad te lo digo, es muy complicado y es jodidamente difícil buscarme alguna salida de tono porque yo soy la persona con el mayor temple y la mayor paciencia del mundo.

P: ¿Qué te pareció cuando leíste el artículo de Daniel Gascón que decía ‘Vito Quiles y el precio de la libertad‘?

R: Me gustó mucho. Gran artículo. Aunque si te soy sincero, justo cuando salió me lo quería leer, pero es que era de pago. Y pagar encima para leer El País

P: ¿Entonces no lo leíste?

R: No lo leí al principio, pero luego ya lo pude leer, pero me pareció un buen artículo y un artículo valiente, la verdad, porque estando en El País y decir eso… todos sus compañeros que trabajaban conmigo en el Congreso se le echaron encima. No conozco a Daniel, pero se lo agradecí personalmente.

P: Bueno, ¿cómo afrontas este nuevo curso político?

R: Pues con mucha ilusión, la verdad. Tenía ganas de volver a empezar. Lo echaba de menos. Me ha tocado este verano buscar o pedir información sobre las vacaciones de Óscar Puente, de Patxi López, porque estaba aburrido. Y me interesé un poco más por sus vacaciones tal vez, pero en general bastante ilusionado, porque estamos en un periodo muy negro para la historia de España. En general, es un momento negro y afortunadamente no debe de quedar mucho, por toda la información que vemos, por el gran trabajo que hacen medios como este destapando corrupción y no queda mucho y lo afronto con mucha esperanza y con ganas de seguir con mi trabajo.

«No tengo más ilusión que presenciar el derrocamiento del Gobierno de Sánchez»

P: Dime algo que haya hecho bien Pedro Sánchez por esto de luchar contra la polarización y el sectarismo.

R: Lo único que hace bien es cada vez que se va de España al extranjero, porque así no nos da la matraca ni lo sufrimos. Porque cuando se dedica a escribir cartas de amor, mientras aprovecha para blanquear a todos sus miembros de la formación que siguen robando a manos llenas… no podría destacar nada bueno de Pedro Sánchez, absolutamente nada, porque es que no me creo ni que se llame Pedro, fíjate. Hay algo que está muy bien: el ‘verano joven’ está bien.

P: Ah, sí. Eso es de Óscar Puente.

R: Sí, sí, sí, sí. Para que veas que no soy un sectario. Óscar, lo del verano joven está bien, porque además la gente quiere viajar, sobre todo los jóvenes lo tenemos jodido por las condiciones de mierda que nos habéis impuesto en el futuro laboral. Así que gracias al menos por abaratarnos un poco el tren.

P: A Óscar Puente no le tienes mucho cariño ¿no? ¿Qué fue lo que te dijo? ¿Saco de mierda? A mí eso me parece más grave porque es representante público, pero ya sabemos cómo nos llama también aquí. Tengo para cerrar un test mucho más liviano. ¿Un lugar en el mundo?

R: La Comunidad Valenciana. Jávea.

Vito Quiles. | Víctor Ubiña

P:  ¿Tienes palabrota o insulto más usado, aunque sea en la privacidad?

R: Sí, sí, sí, sí, sí. Utilizo muchos descalificativos, pero no banales. Son más currados. Últimamente utilizo el término mamporrero.

P: ¿Tienes amigos que voten al PSOE o que voten a la izquierda?

R: Amigos no, conocidos.

P: ¿Familiares que voten a la izquierda?

R: Ni de broma. Hasta el cuñado está en sus cabales.

P: Dime un político que te guste y que no sea Alvise Pérez.

R: Isabel Díaz Ayuso.

P: Una película que siempre recomiendes.

R: Pues no soy nada cinéfilo, pero me gustan las policíacas. La que más he repetido es Venganza, con Liam Neeson.

P: Un libro para regalar.

R: Pues el de Iván Espinosa de los Monteros. El de España tiene solución, que me lo envió hace no mucho y lo estoy terminando, pero me parece fabuloso.

P: ¿Cuál es tu idea de éxito?

R: Servir para cambiar algo. Condicionar. Repercutir. Y sobre todo, poder representar intereses y gente.

P: Un hecho histórico que te hubiera gustado presenciar. 

R: Lo que querré presenciar será el derrocamiento del Gobierno. No tengo más ilusión que presenciar eso.

P: La cualidad que menos te gusta de ti, ¿cuál es?

R: Soy muy inquieto, muy nervioso y a veces eso también produce que se te vayan cosas de la lengua.

P: ¿Cocinas o te cocinan?

R: Cocino. Pero no se me da muy bien.

P: ¿Tienes un plato estrella?

R: Pues un plato casero que me enseñaron entre mi madre y mi abuela: las lentejas, los garbanzos.

P: ¿Podrías llegar a considerar en algún momento a Gabriel Rufián amigo tuyo?

R: Pues fíjate, yo creo que sí. Lo difícil sería que él pudiera considerarme a mí coleguita.

P: ¿Tienes un deporte para verlo o para practicarlo?

R: Sí. El fútbol sobre todo. Me ha gustado el fútbol.

P: ¿España es?

R: El mejor país del mundo.

P: ¿Qué opinión te merece THE OBJECTIVE?

R: Absoluta admiración. Ha conseguido algo que realmente es muy difícil de conseguir: un nivel de impacto de audiencia, de alcance, de afección y de conexión con la ciudadanía, que cada vez se informa más a través de este tipo de medios que a lo mejor otros más tradicionales, que era muy difícil de conseguir y que se ha hecho y se ha conseguido con mucho trabajo, con grandes profesionales, con mucha investigación, con mucho tiempo y sobre todo con mucho periodismo y mucha profesionalidad. Una pregunta: ¿has sido presionado en algún momento para invitarme a esta entrevista?

P: No, jamás. Hablé con gente del periódico y la reforma del Congreso de los Diputados fue, digamos, el punto culmen para decir ‘voy a invitarlo’. No concordamos en muchas ideas de cómo practicar este oficio, pero es cierto, y lo digo aquí, creo que tu relación con la gente no es la misma que la de otros compañeros. Gracias por venir y por enfrentarte a una serie de preguntas que igual no era muy cómoda, pero había que hacerlas.

R: La verdad es que estoy agradecido porque me habéis invitado y me parece además que es lo correcto, porque yo siempre estaré en contra del silenciamiento que se quiere hacer contra determinadas ideas, porque la censura es lo radicalmente opuesto y lo antagónico al periodismo y a la libertad. Yo siempre defenderé eso. Al final, todos merecemos poder expresarnos y poder reivindicar nuestras ideas, convicciones o nuestra forma de proceder, de trabajar.

Publicidad