THE OBJECTIVE
España

Moncloa ve la mano de Pablo Iglesias tras el intento de reventar un acuerdo con Yolanda Díaz

Moncloa teme la «sombra alargada de Iglesias» tras el intento de reventar un acuerdo con Díaz en la negociación de la reforma laboral.

Moncloa ve la mano de Pablo Iglesias tras el intento de reventar un acuerdo con Yolanda Díaz

Podemos

Tras los últimos movimientos de Irene Montero y Ione Belarra que han derivado en los episodios de tensión en la coalición vividos desde el pasado viernes está la «sombra» del exlíder de Podemos, Pablo Iglesias. Es lo que aseguran a THE OBJECTIVE fuentes de Moncloa.

El encuentro de «pacificación» que concluyó con nocturnidad el lunes en el Congreso entre los representantes de PSOE (Adriana Lastra, Félix Bolaños, María Jesús Montero) y Podemos (Irene Montero, Ione Belarra y Pablo Echenique) «no fue para tanto». Concluyó con risas pasadas las 21.30 horas y con la principal línea clara por parte de la órbita socialista: «Quien lidera la negociación sobre la reforma laboral es la vicepresidenta primera», Nadia Calviño, que «manda sobre la segunda», Yolanda Díaz. 

Hubo tensiones en los receptores del mensaje, sobre todo por parte del jefe de gabinete de la ministra de Trabajo, Josep Vendrell, para defender que su jefa lleva siete meses, «desde el 17 de marzo», negociando la derogación de la reforma laboral con los agentes sociales.

Según fuentes consultadas por THE OBJECTIVE, «el tono fue bueno» porque las relaciones entre ellos, sobre todo entre Montero y Echenique, son «muy buenas, después de haberlo negociado todo», aunque «no hubo consenso en nada». Desde la cuota socialista se dejó claro que este es un solo Gobierno, que no puede suprimir a la vicepresidenta primera de las funciones que le son propias, como la coordinación ministerial. Y alertaron del riesgo de orillar a los empresarios en la mesa de negociación como ocurrió con la aprobación del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) el pasado mes de septiembre, negociado directamente por Díaz.

Calviño, la ‘supervisora’

La cuestión no es menor dado que la Comisión Europea exige la concertación con los agentes sociales, en donde Díaz juega un papel crucial y privilegiado por haberse ganado el crédito absoluto de los sindicatos y el respeto de la patronal. De ahí el cambio de estructura de la negociación a la que se incorporará la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, en la reunión de este miércoles pero camuflada con la «presencia de otros ministerios», anuncian fuentes gubernamentales, para lo cual se llegará a un «acuerdo en las próximas horas». 

Nadia Calviño será la «coordinadora económica», es decir, la supervisora de que el sentir de los empresarios representado en la patronal CEOE y Cepyme se vea representado al mismo nivel que el de las centrales sindicales. Se trata de una garantía aplaudida por el presidente de la patronal, Antonio Garamendi, quien agradeció el viernes el respaldo de Pedro Sánchez a su número dos económica y quien confía en que se mantenga la prevalencia de los convenios de empresa sobre los del sector, uno de los principales caballos de batalla de la temida derogación laboral. 

Díaz, ‘la lideresa’

La decisión salomónica es la concesión del título para Yolanda Díaz. Unas horas después de la reunión parlamentaria, tanto Podemos como PSOE se esforzaron por rebajar la tensión públicamente. Primero, Pablo Echenique en el Congreso; después, la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez en Moncloa, quien proclamó que «la ministra de Trabajo liderará la mesa de Diálogo Social», como ha ocurrido «normalmente», si bien «parece razonable que participen miembros de otros departamentos». 

Una táctica socialista que ha hecho suya la órbita socialista del Gobierno solicitando «por ejemplo la incorporación de Igualdad (Irene Montero), Asuntos Sociales (Ione Belarra) o Universidades (Antonio Castells), en tanto en cuanto pretenden una óptica trasversal de la reforma laboral». Y es aquí donde está la cuestión de fondo para el Ejecutivo.

Iglesias ‘vuELve’

«Pablo asesora y aconseja a Ione, no hay ninguna duda», explican miembros de la coalición que ubican al exvicepresidente y a su ex número dos en la secretaría de Estado, hoy ministra de Asuntos Sociales, en el «mismo tipo de políticos y con las mismas formas» políticas consistentes en llevar al límite las negociaciones hasta el punto de reventarlas. Ese es el objetivo del antaño líder de Podemos. «Intentan titular a Yolanda para marcarle el paso», y ese es el difícil equilibrio en el que se mueve el Gobierno de Sánchez, a medio camino entre el refuerzo de la autonomía de Díaz sin que ésta cuestione la jerarquía de Calviño en el organigrama del gabinete ministerial.

Así se explica la decisión salomónica de entregarle a Díaz la medalla de «liderar» la mesa de negociación para quitarse la presión de sus compañeros morados, que encendieron la mecha de esta batalla interna, aún por concluir. No es poco que los decibelios hayan bajado y que el Gobierno respire ahora con relativa tranquilidad tras el tsunami político. Auguran fuentes socialistas que «habrá un acuerdo» y que las posiciones «están alejadas pero algo menos». «Al final, tendrá arreglo y pasará lo de siempre, que se llegará a un pacto» porque «no hay alternativa» ni a la reforma laboral ni a la permanencia del Gobierno de coalición de aquí a dos años. Luego, ya se verá.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D